La persona le agradece a Dios por haberla hecho mujer y darle amor, esperanza y confianza para cumplir con sus labores. Pide sabiduría, perdón por sus errores, y una nueva oportunidad para buscar a Dios con todo su ser y bendecir a otros con la manera en que vive. Finalmente, pide la gracia y conocimiento de Dios para cumplir bien con sus roles y hacer el bien sin demora.