El documento discute varios temas relacionados con el Ayuntamiento de Zaragoza y su papel como capital de Aragón. Propone una ley de capitalidad que defina competencias y financiamiento, especialmente para cubrir los costos adicionales como capital. También pide más fondos de la comunidad autónoma para servicios no obligatorios como educación y transporte que benefician a toda la región. Finalmente, promete crear una comisión conjunta para negociar un proyecto de ley.