1. La noche del cazador
Davis Grubb
Ben Harper era un padre de familia, tenía dos hijos: John de nueve años y la
pequeña Pearl de cuatro. Estaba casado con Willa, quien había sido su amor
desde muy jóvenes.
Un día Ben llegó a su casa con la herida de una bala ya que había asaltado el
banco de su pueblo (estamos hablando del año 1933) y matado a dos hombre,
uno de los cuales alcanzó a dispararle antes de que él tomara cien mil dólares y
saliera huyendo. Ben sabía que no le quedaba mucho tiempo antes de que los
policías llegaran por él así que corrió a donde estaban sus dos hijos y les dijo que
les daría todo ese dinero, que era solo para ellos dos, pero que tenían que
prometer que no le dirían a nadie donde estaba ese dinero (el cual, después de
pensarlo mucho, terminó escondiendo dentro de la muñeca de Pearl), ni siquiera a
su madre, que era para que ellos lo utilizaran cuando fueran mayores, para que no
tuvieran que pasar ningún tipo de necesidad como él las había pasado. John y
Pearl prometieron guardar el secreto y vieron cómo se llevaban a su padre a la
cárcel.
En la cárcel Ben conoció al Predicador, un hombre diz que muy consagrado a
Dios, el cual durante sus últimas semanas con vida, antes de que lo ahorcaran, lo
estuvo hostigando hasta el cansancio para que le dijera dónde había escondido el
dinero, según que porque en la tumba de nada le serviría y que él podía construir
toda una iglesia para que muchas almas se salvara, pero Ben nunca dijo nada, ni
a él, ni a su esposa, ni al juez, ni a nadie, y murió con ese secreto.
Poco después de su muerte Willa, su esposa, conoció al Predicador quien le contó
que había conocido a su marido y que él le había dicho que el dinero lo había
aventado al río para que nadie más lo encontrara. Poco a poco el Predicador se la
fue ganando y en un par de semanas ya se habían casado, pero a John no le
gustaba para nada porque sabía que él solo estaba en busca del dinero, pero su
mamá no le creía. Cada vez que se quedaba solo con el Predicador este le
hablaba muy feo y le decía que tarde o temprano descubriría donde estaba ese
dinero, porque sabía que Ben se lo había dicho al pequeño.
Tiempo después, las cosas se pusieron mucho peor y una noche Willa se dio
cuenta de que el Predicador estaba tras el dinero y tomando el auto se fue, pero
nunca regresó, nunca nadie supo su paradero más que un hombre que vio su
carro con ella dentro en el fondo de una parte profunda y escondida del río, pero
no dijo nada por miedo a que pensaran que él había sido el culpable.
2. Así que John y Pearl se quedaron solos con el Predicador quien los maltrataba y
hostigaba para que le dijeran donde estaba ese dinero, pero una noche ellos dos
se escaparon porque el Predicador estaba amenazando a John con una navaja y
Pearl del miedo, con tal de que dejara a John en paz, le dijo que el dinero estaba
en su muñeca, en eso John la tomó de la mano y salió corriendo, tomó el esquife
de su papá y tan solo por cosa de un milagro logró escapar junto con Pearl y la
muñeca antes de que el Predicador los atrapara.
Estuvieron vagando un par de días río abajo hasta que una señora, que se
dedicaba a rescatar niños de la calle y cuidarlos en su casa, los encontró y los
acogió en su casa. Allí John y Pearl encontraron el hogar que hacía mucho tiempo
habían perdido, y se quedaron allí hasta que fueron grandes, y cuando eso pasó
administraron el dinero que les había dejado su papá sabiamente.