La paz total, en la presidencia de gustavo Petro.pdf
Andrés Avelino Cáceres Dorregaray.docx
1. Andrés Avelino Cáceres Dorregaray (Ayacucho, 10 de noviembre de 1836-Lima, 10 de octubre de
1923), fue un militar y político peruano que luchó en la guerra del Pacífico y fue Presidente
Constitucional del Perú en dos ocasiones: de 1886 a 1890 y de 1894 a 1895. Es el patrono del Arma
de Infantería del Ejército Peruano.
En el Perú es considerado un héroe nacional, por haber luchado en todas las batallas importantes
de la guerra del Pacífico (San Francisco, Tarapacá, Tacna, San Juan y Miraflores) y por haber
liderado la resistencia en la sierra central contra la ocupación chilena, la llamada Campaña de la
Breña (1881-1883). Dominaba el quechua, por lo que tuvo gran influencia sobre la población
indígena de su país, a base de la cual formó un ejército regular, apoyado por guerrillas o
montoneras. Fue conocido por sus soldados como «Taita Cáceres», mientras que los chilenos le
apodaron «El Brujo de los Andes», debido a que solía evadir las maniobras envolventes planeadas
con mucho celo por los generales chilenos, y porque actuaba con tanta fluidez que parecía estar
presente en todas partes. En dicha campaña obtuvo el triple triunfo de Pucará, Marcavalle y
Concepción, y aunque fue derrotado en Huamachuco, no se rindió y continúo organizando la
resistencia alentando a los guerrilleros o montoneros a continuar la lucha con enfrentamientos
con el ejército chileno en distintos puntos de la sierra. Ante el constante acoso guerrillero y la falta
de aprovisionamiento las tropas chilenas tuvieron que replegarse a Lima, en diciembre de 1883,
hasta la desocupación total en agosto de 1884, que es cuando Cáceres dio por consumada la
guerra y el reconocimiento del Tratado de Ancón.
Después de la guerra con Chile, incursionó activamente en la política, fundando su propio partido,
el Partido Constitucional, de tendencia derechista. Su partido se caracterizó por ser expresión de la
oligarquía nacional y militar representando a los terratenientes y la Iglesia. Se enfrentó al
presidente Miguel Iglesias, al que no reconoció como presidente constitucional por haber firmado
el tratado de paz de Ancón con Chile con cesión territorial, desatándose una guerra civil. Una vez
más, Cáceres demostró su estrategia militar al poner fuera de juego al ejército principal de Iglesias
en la localidad de Huaripampa (sierra central peruana), acción que se conoce como la
«huaripampeada» (1884). A continuación atacó Lima, donde sus fuerzas cercaron en el Palacio de
Gobierno a Iglesias. Este renunció a la presidencia en 1885, siendo sucedido por un gobierno
provisional, el mismo que convocó a elecciones en las que ganó abrumadoramente Cáceres. En
este primer gobierno constitucional, de 1886 a 1890, Cáceres tuvo que llevar adelante la
Reconstrucción Nacional, especialmente en el campo de la recuperación económica. Puso fuera de
curso el billete fiscal o papel moneda, muy devaluado entonces; creó impuestos nuevos; intentó la
descentralización tributaria; y para solucionar el problema de la enorme deuda externa firmó el
Contrato Grace por el cual entregó los ferrocarriles a los acreedores. Volvió a la presidencia en
1894, en unas cuestionadas elecciones, que provocaron en su contra la formación de la Coalición
Nacional, integrada por los demócratas y civilistas, encabezados por Nicolás de Piérola; se desató
una sangrienta guerra civil que culminó con el asalto de los coaligados a Lima, ante lo cual Cáceres
renunció y partió al exilio, en 1895. Volvió al Perú en 1899 y siguió participando en la política.
Apoyó al presidente Augusto B. Leguía en su ascenso al poder en 1919, el mismo año en que el
Congreso le ascendió a Mariscal, siendo el único militar de la guerra del Pacífico que llegó a ese
máximo grado. De los tres principales héroes peruanos de la guerra con Chile (Miguel Grau,
Francisco Bolognesi, y Andrés Avelino Cáceres), Cáceres fue también el único que sobrevivió a la
guerra y que posteriormente se convirtió presidente del Perú