El documento describe la escultura "El Galo moribundo", originalmente hecha en bronce pero solo conocida a través de una copia romana en mármol. Representa a un guerrero galo herido y desnudo, excepto por un collar en el cuello, que transmite el dolor de su herida y la lucha contra la muerte. La escultura conmemora la victoria sobre los galos y muestra la valentía de los adversarios vencidos a través de una figura que representa ambas derrota y victoria.
El Galo moribundo, una escultura helena de 220 a.C
1. El “Galo moribundo”
es una escultura
realizada
originalmente en
bronce, de la cual
solo conocemos la
copia romana en
mármol. Datada
entre 230 y 220 a.C.,
se desconoce el
autor, pero algunos
sugieren que pudo
haber sido Epígonas,
el escultor de la corte
de la dinastía atálida, ya que el encargo fue de parte de Átalo I de Pérgamo.
La escultura representa a un guerrero con cabellera y bigote al estilo galo herido,
y completamente desnudo, exceptuando un torque en el cuello. Esto se puede
relacionar con el hecho de que los guerreros galos iban a combate solo con sus
armas, aunque es más acorde atribuir esta desnudez en la figura a el status de
héroe, que en el arte helenístico se representa generalmente desnudo.
La postura del guerrero requiere de diferentes puntos de vista para ser
contemplado en su totalidad, lo que acuerda con la preocupación por la
plasmación del volumen presente en los artistas helenos.
El mayor realismo se encuentra en los gestos del personaje, los cuales trasmiten la
lucha del mismo para con la muerte y el dolor que esta herida le provoca,
reforzando así el drama de la situación.
La estatua es una firme conmemoración de la victoria sobre los galatas,
mostrando asi la superioridad del pueblo vencedor, y además la valentía de los
dignos adversarios. Aquí se ve el poder de la alegoría de representar al mismo
tiempo la derrota y la victoria de diferentes pueblos en una sola figura.