1. Director: Harold Alva Viale / Domingo 31 de enero de 2021 / Año 2 / N° 17
SUPLEMENTO DOMINICAL DEL DIARIO EXPRESO
CONTRAPODER
EL ARTE
DE LA RESISTENCIA
Juan Antonio Bazán
ALÉTHEIA
Luis Miguel Cangalaya
NUEVA
PERPECTIVA
Carlos Pando Sánchez
IMAGINARIO
POLÍTICO
Diego Alonso Samalvides
EL ÚLTIMO
MILITANTE
Víctor López García
AL MARGEN
DE LOS FRENTES
Juan Pablo Bernal
AL PIE
DEL ACANTILADO
Gabriel Rimachi Sialer
PARRHESIA
Paul Laurent
ALQUIMIA
CULTURAL
Sol Pozzi Escot
Ilustración de portada: Stalin Alva Viale
“Soy un liberal del siglo XIX,
que se encuentra enfrentado
a un rival muy honorable
que se llama Karl Marx”
HERNANDO DE SOTO:
2. C C
ALÉTHEIA
Luis Miguel Cangalaya Sevillano
EL PLAN
P2
CONTRAPODER / Suplemento Dominical del Diario Expreso. 31 de enero de 2021. Año 2 / Nro. 17 // Director: Harold Alva Viale // Editor de Polí ca: Juan Antonio Bazán //
Editor de Cultura: Luis Miguel Cangalaya Sevillano // Comité Consul vo: Víctor López García, Antonio More , Paul Laurent // Columnistas: Carlos Pando Sánchez,
Gabriel Rimachi Sialer, Diego Alonso Samalvides Heysen, // Cronistas: Sol Pozzi Escot, Juan Pablo Bernal // Ilustraciones: Stalin Alva Viale
vanza País nació en la erra de César
AVallejo, San ago de Chuco, en el año 2000.
Hay que recordar que, a cinco años de su
creación, en el 2005, se inscribió en el JNE para
par cipar en las elecciones del año 2006, donde
presentó como candidato presidencial a Ulises
Humala Tasso, el hermano mayor del expresidente
Ollanta Humala. En ese entonces no pasaron la
valla electoral y perdieron su inscripción. Luego ha
tenido etapas de reorganización, donde ha
presentado a otros candidatos sin mucho éxito.
Por ejemplo, Julio Gagó, quien postuló a la alcaldía
de Lima en el 2018 o Beatriz Mejía, quien lideró el
par do en las elecciones parlamentarias del 2020,
luego de la disolución del Congreso por Mar n
Vizcarra. Ahora, luego de todo ese i nerario donde
no han obtenido el éxito en sus postulaciones,
par cipa en las elecciones generales con Hernando
de Soto para la presidencia de la República.
El plan de gobierno de Avanza País está dividido en
cuatro dimensiones: social, económica, ambiental
e ins tucional. En la dimensión social propone
incrementar progresivamente el presupuesto en
salud e impulsar la par cipación ciudadana en el
diseño e implementación de las propuestas de
salud para hacerlas viables y sostenibles en el
empo. En la dimensión económica pretende
preservar la fortaleza macroeconómica y el grado
de inversión, así como con nuar desarrollando el
comercio y la diversificación de des no y
productos de exportación. En la dimensión
ambiental plantea reformar y fortalecer las
ins tuciones a cargo de la formalización de la
propiedad urbana y rural. Finalmente, en la
dimensión ins tucional propone potenciar la
opera vidad de los órganos jurisdiccionales y
fiscalías que conocen casos de corrupción y delitos
conexos.
Hernando de Soto es economista de profesión y
preside el Ins tuto Libertad y Democracia (IDL). Ha
asesorado a muchos presidentes en el mundo,
entre ellos, a Alberto Fujimori, desde la segunda
vuelta de las elecciones de 1990. Hoy, de pronto,
ha llegado a Avanza País, un par do que ha sido
considerado como “vientre de alquiler”, debido a
que el candidato lidera un par do del cual hace
meses no tenía ningún po de vínculo. Sin
embargo, quienes lo conocen restan importancia a
ello y, por el contrario, afirman que De Soto ha
revolucionado la comprensión de la riqueza y la
pobreza, tal como lo señalara en sus libros El otro
sendero y El misterio del capital.
DE AVANZA PAÍS
a polí ca ene giros inesperados. Hombres
Lde saco y corbata que deciden virar su
horizonte para transformarse en lo que
Aristóteles definía como animal polí co. Sucede
cuando en lo individual han sido parte de una
reestructuración importante en el campo de su
especialidad. Luego, con un síntoma de madurez,
se percatan que la experiencia no sirve si no está
acompañada de una visión global que pueda
generar un cambio social. De esas luces parece
teñirse la candidatura del economista Hernando
de Soto. Pero no nos engañemos. No es un
polí co. El discurso que ene no es propio de un
polí co, sino de un economista. Un polí co no solo
empa za con el pueblo, sino que es capaz de
bajarse del estrado del saber y con un don de
docencia tratar de explicar los problemas que
enfrenta la sociedad en términos prác cos para
que todos puedan comprenderlo.
No somos de primer mundo. En un país donde el
común denominador de ciudadanos no ene un
interés por la lectura ni el desarrollo intelectual,
di cilmente podemos apreciar las propuestas de
candidatos de esta envergadura. Hernando de
Soto no parece ser equiparable con el resto de
personajes que ostentan el sillón presidencial
cuando a trayectoria nos referimos. Es uno de los
peruanos más exitosos y reconocidos a nivel
mundial por su trabajo en la economía informal, la
importancia de los negocios y derechos de
propiedad. Además, ha asesorado a más de 30
presidentes en todo el mundo y ha sido
reconocido por jefes de estado como Bill Clinton,
Vladimir Pu n, Emmanuel Macron, George HW
Bush, Ronald Reagan y Margaret Thatcher. Sin
embargo, como no estamos acostumbrados a
mirar bien a las personas que destacan, los
esfuerzos se doblegan para bajarse su candidatura.
Su delito público más grande: ser liberal. En un
mundo donde pensar dis nto está condenado
socialmente, un liberal se convierte en una
catástrofe para la doctrina progresista. Ser liberal
en el Perú significa recibir todo po de
descalifica vos, aunque en la praxis el sistema
económico liberal es el que históricamente nos ha
conducido a reducir la pobreza en el mundo. Por
supuesto que el discurso comunista es más
llama vo, sobre todo para una generación que
está acostumbrada a esperar todo del Estado.
Vivimos una crisis, pero saldremos adelante con el
carácter emprendedor que personifica a los
peruanos.
IMAGINARIO POLÍTICO
Diego Alonso Samalvides
DE SOTO
EN LA LUPA
ara Hernando de Soto, la competencia polí ca no
Pha sido ajena a su rol de inves gador social.
Aparece en la escena polí ca en el año 1987, luego
de la esta zación de la banca, como aliado de Vargas Llosa
en el Movimiento Libertad en oposición al primer
gobierno aprista. Más adelante, sin embargo, será asesor
de Alan García para la formalización de la propiedad
agraria en la costa peruana. Luego del golpe de estado del
92 fue asesor del Ing. Fujimori en la búsqueda de la
reinserción del Perú al sistema financiero internacional.
En los noventa el autor de “El otro sendero” será
consultor internacional en temas de formalización y de
ges ón pública, teniendo una destacada trayectoria como
intelectual defensor del liberalismo económico.
Actualmente es candidato presidencial de “Avanza País”,
pero en un momento muy di cil para la república con
gran precariedad ins tucional, una pandemia
descontrolada y grave crisis económica.
Desde el Plan de gobierno de Avanza País, De Soto
propone como principal obje vo formalizar la economía,
de esa manera se lograría romper la dicotomía país formal
versus país informal. Se trata entonces de lograr que los
sectores marginados del estado y del gran mercado
accedan a estos, generando mayores espacios y
oportunidades de intercambio mercan l para la gran y
mediana empresa. Pero ¿Cómo piensa lograrlo? Con una
profunda reorganización de la ges ón pública, reduciendo
las barreras burocrá cas y mejorando la norma vidad
vigente, buscando que los emprendedores se formalicen y
accedan al crédito, tecnología y nuevos mercados.
Son alterna vas válidas, pero al candidato liberal le
planteamos algunas interrogantes a su propuesta
formalizadora, ¿no es cierto que la economía informal
urbana es abastecida por la producción formal? por
ejemplo, el comercio ambulatorio trabaja intercambiando
bienes producidos por las empresas formales,
permi endo con ello evasión tributaria y trabajo
precarizado. En el sector rural se puede observar el
abandono del pequeño agricultor, heredero de la erra
post reforma agraria, luego de la parcelación de las
coopera vas, abandonado por el Estado desde las
polí cas neoliberales de los noventa. ¿Cómo hacer para
incorporar al mercado compe vo a este mayoritario
sector rural?
De triunfar en las elecciones, el candidato Hernando De
Soto, tendrá un enorme reto: modernizar la ges ón
pública permi endo que el pequeño emprendedor
urbano y rural fuertemente golpeados por la pandemia,
accedan en igualdad de condiciones a compe r en un
mercado generalmente monopolizado por los grandes
grupos de poder económico.
LOS DESAFÍOS DEL CANDIDATO
NUEVA PERSPECTIVA
Carlos Pando Sánchez
DE SOTO PARA FORMALIZAR
LA ECONOMÍA
3. ESTA PESADILLA
YA LA VIVIMOS
ecir que no hemos aprendido nada es un
Dlugar común. Decir que la segunda ola se
originó por las conglomeraciones
mo vadas por las fiestas navideñas, es una
estupidez. Empezó antes, aunque jamás lo asuma
esa mayoría que monopoliza la información.
Empezó con las manifestaciones de noviembre, la
protesta en medio de una pandemia, nos guste o
no, fue una acción genocida. Los resultados los
vemos no ahora, no hace veinte días, no hace un
mes: las muertes empezaron en diciembre, pero
nadie del oficialismo va a decirlo: ninguno de los
medios que apoyaron a Vizcarra y luego
legi maron a Sagas , tendrán agallas para
confirmar esta verdad. Basta ir a los hospitales y
preguntar por las cifras de muertos en diciembre,
la escasez de oxígeno y de camas UCI ¿Que la
segunda ola era inevitable? Seguro, pero pudimos
tener menos víc mas. Hace unos días, como si de
pronto retornáramos a la pesadilla de marzo, el
presidente anunció otra cuarentena ¿Qué sucedió
los previos al 31? Quienes pudieron, desesperados,
abastecieron sus alacenas, sin embargo, la mayoría,
ese 70% de la población que responde al día a día,
sin bono, tendrá que elegir, de nuevo, entre el
hambre o el virus. Sin planificación, sin horizonte,
el Perú está condenado a enfrentar una de sus más
dramá cas crisis. ¿Qué nos corresponde como
ciudadanos? Nos corresponde estar alertas, nos
corresponde no bajar la guardia, nos corresponde
defender con responsabilidad la libertad, nos
corresponde defender la vida. Por eso, desde este
número, analizamos las propuestas de los
candidatos presidenciales ¿Cuáles son sus planes
de gobierno? ¿Por qué sienten que están
capacitados para ocupar la presidencia de la
república? ¿Qué los moviliza a presentarse en
medio de esta pandemia? ¿Cuál es su historia? ¿A
quién le han ganado? Iniciamos con Hernando De
Soto, el reconocido economista que lleva en su lista
a jóvenes candidatos como Adriana Tudela
Gu érrez, Alessandra Krause Alva, Alejandro
Cavero y a los reconocidos Diego Uceda y María
Teresa Dulanto. Este es el momento de pararnos
firmes ante la desinformación de los grupos de
poder y sus encuestadores. Nuestra misión es
fortalecer la democracia aún a pesar de lo que
sospechamos será otra fallida cuarentena. A
nosotros nos corresponde informar y al gobierno le
toca asis r a la población. Quince días ha ordenado
el presidente, de acuerdo, pero exigiremos
resultados, acciones concretas, vamos a unirnos en
el deber, pero exigimos transparencia. Esta
pesadilla ya la vivimos, nos están obligando a
repe rla.
ALQUIMIA CULTURAL
AL MARGEN DE LOS FRENTES
vanza País vuelve con una
Aimagen renovada a 15 años
desde su úl ma presentación
en elecciones generales. En esta
ocasión, el tren ha cambiado sus
colores y su diseño, viéndose más
dinámico y sintonizando con la llegada
del Bicentenario, 200 años que
parecen no han dotado de madurez al
electorado. A los cambios
mencionados, se le suman las nuevas
caras que presenta el grupo polí co: la
juventud se ha abierto paso. En su lista
por Lima Metropolitana, se aprecian
figuras como Alejandro Cavero,
abogado, docente, analista polí co y
peruano convencido que se necesitan
“reformas de fondo”, con quien tuve la
posibilidad de dialogar para solventar
dudas sobre la reaparición repen na
de AP en unas elecciones tan
polémicas como inciertas.
¿Qué sucede en Avanza País? Cavero
asegura que se ha realizado una
“alianza programá ca” entre la
dirigencia del par do y el equipo de
Hernando de Soto. ¿Qué los une? “Las
ideas y el programa” que viene
planteando De Soto Polar desde hace
tres décadas. A esto, agregó que
dentro de las candidaturas de la
agrupación hay personajes más afines
a la izquierda y el conservadurismo, lo
que permite la pluralidad y diversidad
de ideas; no obstante, todos
convergen en que se deben resolver
los problemas diagnos cados por su
candidato a la Jefatura del Gobierno,
como la informalidad, darle
propiedad a la gente y reducir el peso
de la burocracia.
Frente a la visión par daria, Cavero
indica que, por lo pronto, el obje vo
principal es “ser gobierno” y darle fin
a “cinco años de piloto automá co”.
En esa línea, considera que debe
romperse con la inercia vizcarrista,
pepekausista y morada; caso
contrario “el país se va a quebrar
socialmente”.
Avanza País nota la existencia de “dos
países paralelos”. Por un lado, un 30
% formal, que “goza de los beneficios
del libre mercado. Por el otro, un 70
% informal, el cual “no puede
par cipar en igualdad de condiciones
en la economía”. Para Cavero, esta
dicotomía es una “fractura social”, la
cual debe ser resuelta para que “el
Perú no se vuelve una bomba de
empo”.
El subterfugio a esta situación es
“cambiar lo que no funciona en la
Cons tución” y conservar lo que, se
ha demostrado, resulta; velar por la
reac vación y reunir información, la
única vía que detectan para finalizar
con el “estado fallido”.
Por su parte, indicó que ha propuesto
cuatro reformas cons tucionales:
distritos uninominales, retornar a la
bicameralidad, voto voluntario y
renovación por mitades.
Para la formalización masiva, el as bajo
la manga que ene Hernando de Soto,
Cavero señala que se necesita
información. “La formalidad no es otra
cosa que un sistema de registro de
quién es dueño de qué y dónde. Al
saber ello, puedes localizar las trabas
que hay en la economía”.
La propuesta de Avanza País se
manifiesta sólida y dis nta. Se aleja de
la polí ca convencional, alejándose de
la demagogia que ha venido azotando
y aún azota al Perú. Con este grupo
polí co, se presenta una versión
contemporánea de la derecha liberal,
en reemplazo de grupos anacrónicos
nacidos el milenio pasado. CP
A 70 días de los comicios del 11 de abril, se van conociendo las agrupaciones polí cas que podrían tener
representación en el Congreso y las que se posicionan como favoritas para hacerse del Poder Ejecu vo.
Entre estas, se encuentra , “el par do del trencito”, el cual busca llevar al economista
Avanza País (AP)
Hernando de Soto al sillón de Pizarro, acaso el más cues onado de las úl mas décadas.
Escribe: JUAN PABLO BERNAL
¿EL TREN DE LAS REFORMAS?
AL MARGEN DE LOS FRENTES
Alejandro Cavero
Candidato AP
4. Por qué, Hernando De Soto, quiere ser
¿presidente del Perú?
No me gusta la palabra “quiere”, porque desde un
punto de vista personal, este no es el mejor momento,
con la pandemia, de entrar a asumir una posición de
enorme responsabilidad. Para mí es claro que haremos
las cosas bien o mejor, no sabemos si estamos al
principio o al final de una gran pandemia. Este es un
empo en el cual el sector informal ha perdido las tres
cuartas partes de sus ingresos y sus ahorros. El equipo
que tengo hará una transformación que no podrían
hacer los otros y esa es una de las razones por las cuales
siento el deber de estar en carrera. Entonces, y esto es
una infidencia, he tenido el honor de que ocho de
quienes ahora son candidatos se acercaron a mí hace
más de un año para pedirme que los acompañe y sea el
candidato presidencial, eso me ha permi do comparar
lo que yo creo que puedo hacer con lo que yo creo que
ellos podrían hacer, y si bien los aprecio, dada la
dimensión del problema, que en gran parte como lo he
dicho desde hace un año no es un problema médico,
sino económico, la gente se va a dar cuenta de que
como dijo una señora a quien entrevistaron migrando
de Lima hacia el campo, frente a la pregunta de por qué
hacía eso: exponer a sus hijos a la larga marcha con una
serie de personas que podrían estar infectadas, ella
respondió: “mire lo que yo en endo es que la
enfermedad se podría eventualmente curar con una
vacuna, el hambre no se cura con una vacuna, entonces
yo prefiero correr el riesgo de infectarme, pero no me
muerodehambre,notengootra”.Esosignificaqueyovi
en ese momento que había una cues ón de
responsabilidad, si lo podría hacer mejor, ya no se
trataba de negociar si soy de izquierda o de derecha, de
centro izquierda o de centro derecha, hasta cierto
punto siento que hay algo de compa bilidad entre las
dos alas, pero necesito tener alrededor gente que reme
en la misma dirección, y veo con sinceridad que
tenemos una idea más clara de lo que debemos hacer,
no me la quiero dar de sacrificado, pero se trata de un
sen do del deber, de cumplir con una responsabilidad.
A eso, agregar que crecí creyendo que el mayor honor
no era morir en una cama, sino como lo hicieron
algunos de mis antepasados, en una barricada. Por eso
dar esta batalla ene un sen do para mí muy
importante.
Mucha gente afirma que están tratando de beneficiar
la economía y no la vida, pero con el ejemplo que pone
de la señora, le da otro sen do a lo que debemos
entendercomoeconomía.
Claro. En los primeros ar culos que escribí cuando ni
siquiera había empezado la pandemia, era consciente
que la gente, sobre todo en nuestros países, va a morir
másporrazoneseconómicasqueporotras.
No es que no favorezco a la vida, lo estamos viendo, si uno
no entra a hacer una reforma del Estado, así tenga usted el
mejor médico del mundo en el ministerio de salud, el
problema no es si entre ellos se pelean para ver quién ene
la mejor vacuna, eso se da en cualquier profesión, su
problema básico es que nadie firma el cheque para
comprar los insumos, y ese no es un problema médico: es
un problema de saber cuál es el equilibrio de poderes con
aquellos que quieren luchar contra la corrupción y con
aquellos que quieren eficacia, y esa eficacia se mide
económicamente. Por eso, nosotros no tendremos ningún
problema en el sen do de que lleguen las medicinas a
empo, de que las exportaciones peruanas sigan yendo
para poder pagar esas medicinas, para poder tener los
ahorros con los cuales formar capital y reconstruir o
imaginarnosotropaís,entoncessíestamosluchandoporla
vida, pero por el lado que menos se conoce, que no es el de
la medicina, y creo que allí se equivoca gente que sabe
mucho,sinodelladodequésehaceycómosesobreviveen
una economía pandémica donde se ene a claramente
entre un 70% y 80% de la población que por ser informales
y no tener acceso al capital, y por lo tanto a las redes
sociales, no ene manera de sobrevivir si están
enclaustrados: Entonces la mía sí es una propuesta para la
vida, pero no suena, por supuesto, tan glorioso como
hablar de camas UCI, pero lo que yo quiero tener es una
economía donde se puedan seguir comprando esas camas
paracuandovengalatercera,olacuartaolaquintaola.
ENTREVISTA
CON HERNANDO DE SOTO
HERNANDO DE SOTO: EL EFECTO
Y LA BARRICADA DE FOUCAULT
ernando de Soto se hace intelectual por el efecto y
Hse hace candidato presidencial por la barricada de
Michel Foucault. Me consta que lo ha leído en
calidad de auctor y creo que lo ha vivido en calidad de
agónico. Precisamente, el efecto Foucault hizo que De Soto
se convir era en el pensador peruano más importante del
úl mo medio siglo:Todos los anormalesfoucaul anos, y aún
más, son nuestros informales. Como el filósofo francés, el
economista peruano nos buscó y nos encontró en los bordes
de la sociedad. Por supuesto, el economista no puede ser fiel
a la letra del filósofo pero sí al espíritu filosófico. De Soto
ene lectura de creador de teoría, y no de erudito que da
cuenta del pensamiento de otro. Pierre Bourdieu decía de
Foucault que leía a determinados autores “no para sacar
saberes, sino para sacar reglas a fin de construir su propio
objeto”. De Soto ene la interdisciplinariedad del francés:
Sus diálogos son básicamente entre la economía, la
antropologíayelderecho.
Foucault y sus anormales hicieron posible que ochenta años
más tarde De Soto revisitara modernamente a Gonzales
Prada y su “Nuestros indios”. Con mo vo de su postulación
presidencial, el poeta Harold Alva y yo hemos conversado
por varias horas con Hernando de Soto, en su casa de
San ago de Surco, sobre todo acerca de cómo se piensa la
sociedad a par r Foucault y otros clásicos asumidos como
cajas de herramientas. Para Foucault, como para De Soto, es
así: Se trata de trabajar con conceptos de rango medio,
procedimentales y clasificatorios que hagan de las teorías
social y económica enfoques y modelos, y de ninguna
manera sistemas de pensamientos abstractos y totales. De
Soto le pone mucha atención a la metodología. Incluso su
pelea con Mario Vargas Llosa, su más grande promotor y
luego su más grande detractor, puede también ser explicada
metodológicamente como la falta de entendimiento entre
quien ene incursiones en el proceso polí co y quien
permanece en la polí ca como resultado: Algo así como un
poli csversuspolicy.
De Soto ha pasado a la historia del pensamiento social
peruano, a pesar de que entre nosotros es casi extra
universitario. De Soto ene dos libros que son, a la vez, sus
opus magnum editados en más de treinta idiomas y en
millones de ejemplares: El otro sendero. La revolución
informal, y El misterio del capital. El primero es un libro
peruano en puridad, que dialoga con la tradición de Víctor
Andrés Belaunde en La realidad nacional y de Fernando
Belaunde Terry en La conquista del Perú por los peruanos.
En tanto que,elsegundo es un libro de pretensión occidental
e incluso universal, en el género de sus predecesores Francis
Fukuyama en El fin de la historia y el úl mo hombre y
Samuel Hun ngton en El choque de civilizaciones y la
reconfiguración del orden mundial. En verdad, De Soto sabe
mucho y compite con algunos candidatos presidenciales que
literalmente no saben nada. De Soto piensa por el efecto y
postulaporlabarricadadeFoucault.
EL ARTE DE LA RESISTENCIA
Juan Antonio Bazán Hernando De Soto Polar es uno de los
intelectuales con mayor pres gio en
el mundo. Arequipeño, autor del clásico
libro “El otro sendero”, postula al sillón
presidencial por Avanza País, una
organización polí ca que bien podría
clasificarse, por sus candidatos, no
por su naturaleza, como el úl mo
reducto liberal. Dialogamos con él.
Harold Alva & Juan Antonio Bazán
5. CONTRAPODER
5
manera de que la revolución industrial siga en manos
capitalistas y se equivocó porque sigue en manos
capitalistas, inclusive en China. En ese contexto, soy un
liberaldelsigloXIX.
¿Por qué Mario Vargas Llosa nunca entendió su
par cipación en el primer fujimorismo?
Yo no veo a Mario hace 32 años, somos hasta parientes y
éramos los dos nuevos polí cos que asociaban cuando
empezó el Movimiento Libertad. Él me pidió prologar “El
otro sendero”, Mario fue un gran promotor nuestro, por
eso siempre le he estado muy agradecido, yo
probablemente no hubiese surgido si él no me daba el
espacio y el aval, es más, yo no quería escribir un libro,
quise que él lo escriba, pero él me dijo “no, lo enes que
escribir tú”, fue muy generoso. Había un nivel intelectual
que él comprendió, yo tengo sesenta discursos de él que
son sacados de todos nuestros ar culos, la palabra
mercan lismo, economía informal, estaban allí en toda la
campaña, a ese nivel lo comprendió, pero hay otro
elemento: entra Fujimori, asume la presidencia y no era
que se copió de Vargas Llosa, Fujimori no quería el shock,
yo estuve allí, estaba también Pérez de Cuéllar y dieciséis
personas en un cuarto convenciendo a Fujimori que tenía
que hacer el shock, un shock que no lo inventó Vargas
Llosa. Mario sufrió esa derrota, de allí ese odio, extraño en
un hombre que, además de su carrera, ene una familia e
hijos talentosos que nacieron de la unión con Patricia que
es una mujer extraordinaria a quien le debe mucho de su
éxito; que logra ganar un país como España, y que fue lo
suficientemente polí co para obtener el Nobel. Hay un
momento, esta es una infidencia, en una entrevista, el
periodista le hizo la misma pregunta que ustedes a mí, al
principio: “señor Vargas Llosa ¿por qué quiere ser
presidente?” y Mario respondió, lo cito correctamente:
“porque el premio gordo, seamos claros, es la presidencia
de la república”. Por alguna razón todo el resto era
secundario frente a poder ser el heraldo del liberalismo o
de la modernidad en 1990. Ese punto en la historia se lo
quitó Fujimori, por eso cualquier persona asociada a esa
derrota va a ser condenada por su gente y por sus
abogadosenLima.
Usted es uno de nuestros intelectuales de mayor éxito
¿Cómoorganizasudía?Háblenosdesudisciplina.
Voy a decepcionarlos. Yo lo que descubrí desde niño, es
que si uno hace lo que quiere, si uno busca respuestas
sobre temas que le provocan curiosidad, le va a ir
rela vamente bien. Cada vez que he hecho algo ha sido
porque aquello sa sfacía una curiosidad, entonces, tengo
disciplina para, cuando encuentro un problema que
despierta mi curiosidad, ir y saber cómo escoger los libros,
qué fórmulas existen que todavía no han sido publicadas,
pero que la gente ya empezó a percibir, qué cosas se puede
encontrar en la historia; soy disciplinado en recorrer mis
fuentes de información, pero la base, si ustedes quieren
saber por qué tengo rela vo éxito, es que no recuerdo
haber hecho jamás algo que no me entretenga. Hagan lo
que les gusta, tengan fe en sus ins ntos y, hay que
conversar,más,deloqueselee. CP
escuchar y tomar decisiones en miles de lugares
dis ntos del país que significa reconocer el sector
informar y darse cuenta que formalizar no es que todo
el mundo se inscriba en un registro sino saber escuchar
a cada una de estas mil realidades y empoderar a
aquellos que realmente mandan en cada rincón del
país.
¿Quélodiferenciadelfujimorismo?
El fujimorismo no ene una línea ideológica, yo sí tengo
unalíneaideológica.Heallíladiferencia.
Ustedenquélíneaideológicaestá
A diferencia de mis rivales, no me sitúo en un contexto
siglo XXI, porque no creo que el Perú esté en el siglo XXI
de los Estados Unidos ni de Europa. Está más o menos a
principiosdelsigloXIXyelgranproblemadelsigloXIXes
la distancia que existe entre aquellos que saben formar
capital y enen los instrumentos, los documentos para
trabajar en mercados grandes, que son los sectores A y
B, que son el 20% de la población, y sus empleados que
son el 10%, y un 70% que la gente llama sector informal,
que no es informal sino es otro mecanismo que trabaja
la economía artesanal donde el promedio de las
empresas enen alrededor de ocho o diez empleados
donde no existe la división del trabajo que es necesaria
para triunfar en una economía industrial o de la
revolución tecnológica que ene que ser modernizada.
Entonces para contestarles, yo sería un liberal del siglo
XIX, que se encuentra enfrentado a un rival muy
honorable que se llama Karl Marx, que dice que no hay
¿Cuál es su valoración de la manera cómo ha sido
manejada la pandemia por los gobiernos sucesivos de
Mar n Vizcarra, Manuel Merino y, sobre todo el actual,
de Francisco Sagas ? ¿Qué opina del confinamiento
socialquesehadecretado?
Loscasosmásexitososhansidolosdeaquellosgobiernos
en el mundo que se han mantenido en contacto con la
población llamada marginal, que es la mayoría, porque
con el confinamiento total, como lo hemos hecho
nosotros, solo puede sobrevivir un 20% o 30% de la
población, los países que han tenido éxito, o las ciudades
como Guayaquil, o países como Israel, Taiwán, Nueva
Zelanda, Irlanda, Turquía, son aquellos que adoptaron
medidas compa bles a las maneras como se vive en
dis ntos lugares, entonces nosotros hemos formado al
lado de la campaña, lo que llamamos el pacto social, que
es la aglomeración de quinientos medios de pequeñas y
medianas empresas, desde las mineras hasta las mypes,
que enen, cada una, una receta dis nta para sobrevivir,
los pequeños mineros lo llaman la distancia laboral, si
Usted entra a Arequipa y ve cómo se protegen los
comercios que están desde la Plaza de Armas hasta el
finaldelacalleSantaCatalina,escompletamentedis nto
de la forma cómo se enen que proteger en el barrio José
Luis Bustamante y Rivero donde están ubicados los
puneños, en otras palabras, lo que ninguno de estos
gobiernos han sabido hacer son tres cosas muy
puntuales y por eso están jalados: Uno, no saber cómo
hacer funcionar al estado; Dos, por no darse cuenta que
hay que delegar decisiones al privado si ellos no saben
cómo firmar; y Tres, hay que tener un mecanismo para
“ILD fue el grupo civil más bombardeado en la guerra contra el senderismo
porque “El otro sendero”, entre cosas permitió, como dijo Abimael Guzmán,
alejar a los jóvenes de la guerra popular”
“El fujimorismo
no tiene una línea
ideológica, yo sí tengo
una línea ideológica.
He allí la diferencia”.
6. AL PIE DEL ACANTILADO
Gabriel Rimachi Sialer
SAGASTI:
“EL HÉROE DEL BICENTENARIO”
Si creen que la idea de encerrar a todo el Perú, durante
15 días (creemos que serán muchos días más), obedece
a que manejan la idea de que si la gente no sale, no se
contagia, no es cierto. El gobierno ha impuesto la
cuarentena no para proteger a la población del virus, lo
ha hecho para proteger al gobierno de los reclamos
populares y de la falta de estructura sanitaria a nivel
nacional. Produce informó el día de ayer que, por
ejemplo, los restaurantes podrán vender por delivery
los 7 días de la semana sin restricciones horarias; pero
solo podrán hacerlo aquellos que cuenten con RUC
vigente, tengan un mínimo de 2 años de an güedad y
facturen mensualmente ventas mayores a 13 UIT, es
decir: S/57 mil 200 soles mensuales, o S/1,906 soles
diarios. Quienes no cuenten con estos requisitos enen
que cerrar sus puertas e irse a sus casas por 15 días
“para evitar la propagación del virus”.
Pero no solo este sector es el que está habilitado para
seguir trabajando. En la relación de ac vidades
económicas que permanecerán ac vas durante esta
nueva cuarentena están casi todos los rubros: desde el
mantenimiento de carros y motos hasta
supermercados, construcción, comercio, pesca o
manufacturas. Es decir: esta cuarentena es para los
informales, que son el 70 % de la población peruana. Si
enes una bodeguita, te jodiste. Si vendes empanadas,
café al paso o enes un carrito de hamburguesas,
jódete. No calificas para seguir trabajando.
Cuando uno cri ca al gobierno, saltan siempre los que
creen que uno lo hace porque “le ene rria”. Pero
todos aquellos que cri can suelen ser quienes enen
ahorros o realizan teletrabajo o poseen los recursos
(mínimos o no) para poder encerrarse en su casa a ver
Ne lix durante 15 días. Son aquellos que exigen a gritos
“empa a” los primeros en defender una cuarentena
que, a todas luces, está dirigida a asfixiar a los
informales (que son los que sos enen la economía del
país). Y apelan al discurso de la irresponsabilidad ajena,
a “la falta de empa a”, al “ins nto asesino” del otro...
Pero jamás cues onan sus privilegios. Y jamás ven,
desde su comodidad, la desesperación que significa
para miles de peruanos el salir día a día a trabajar en las
calles para poder alimentar a su familia porque son
informales.
No ven el fracaso del gobierno en el tema de las
vacunas mientras todos los países vecinos ya están
siendo vacunados. No ven que los hospitales que
Vizcarra “inauguró” eran alquilados y están siendo
ahora desmontados por falta de pago. No ven que se
gastan 30 mil soles en quequitos mientas la gente
muere asfixiada por falta de plantas de oxígeno que
cuestan la mitad de eso. No ven –porque la gran
prensa no lo muestra– que en los cerros se organizan
ollas comunes donde cuentan con dos pechugas de
pollo para hacer sopa para 100 personas (no cia de
ayer en el no ciero del mediodía). No quieren ver, por
miedo o protección emocional, que el Perú es mucho
más grande que sus propias zonas de confort.
Durante la primera cuarentena hemos asis do a uno
de los capítulos más grandes de corrupción de nuestra
historia. Muchos de los que defendieron a Vizcarra
terminaron aceptando “haberse equivocado” en sus
muros de Facebook, lavándose las manos bajo el
manto de la dignidad. Durante esta segunda
cuarentena estamos asis endo a otro escenario
donde el gobierno privilegia a las grandes empresas y
no ve la desesperación de los independientes o los
informales. No querer ver esto es de necios. No se
puede ordenar una cuarentena imitando a Europa
porque simplemente no somos Europa, porque
encerrar a la gente sin un bono económico es sembrar
la semilla de una explosión social producto del
hambre y la desesperación: las deudas siguen
generando intereses, los recibos de luz y agua se
juntan, los alquileres enen que ser pagados.
Jus ficar el accionar de un Sagas desesperado
porque no a na a nada –con una ministra de salud
que hace rato debió ser expulsada para poner a
alguien más competente; con un ministro de
economía que no sabe decir cuándo soltarán el bono
económico para la ciudadanía, toreando las preguntas
de la prensa– pinta de cuerpo entero el egoísmo de
todos aquellos que, en un acto incomprensible, creen
que Sagas es el héroe del Bicentenario, que sus
mensajes son clarísimos y directos, que están en
buenas manos, que los equivocados son los otros:
nunca el gobierno. Creen que la poesía los salvará.
Olvidan que Nerón también era poeta.
C P6
ace un par de días el encargado de Palacio de
HGobierno, Francisco Sagas , dio su brevísimo
mensaje a la nación indicando el regreso a la
cuarentena durante 15 días para evitar más contagios
de Covid. La discusión en redes sociales (siempre
estériles, siempre inú les), se fue entonces por el lado
de buscar a los culpables entre la población: los que
salieron a la marcha de noviembre “contra los
golpistas”, y los que se fueron de pachanga en navidad y
año nuevo. Uno de esos dos grupos era el responsable
de que ya no hubiera camas UCI disponibles, culpables
de la falta de oxígeno, del aumento de muertos, de la
cuarentena. Uno de esos dos grupos. Nunca el culpable
fue el gobierno y sus decisiones erradas.
El periodista Ryszard Kapuscinski escribió alguna vez:
“La prensa no informa a la opinión pública: la orienta”. Y
el papel de los medios de comunicación durante esta
pandemia ha sido gravitante de acuerdo a sus
par culares intereses económicos. Estuvieron a favor de
Vizcarra mientras recibían publicidad estatal o jugosas
ayudas económicas mediante Reac va, o en contra de
Vizcarra cuando estas ayudas se acabaron y el
escándalo de Richard Swing ya estaba incluso parodiado
los domingos por la noche en El Show de JB. Luego vino
el tránsito de Merino, que no gobernó porque duró
apenas 6 días en el poder, y finalmente llegó Sagas ,
como un bálsamo de intelectualidad, honradez y poesía
–gracias a la voz del pueblo que es la voz de Dios– a
poner paños fríos en un país harto de la falta de trabajo,
de la corrupción más escandalosa de todos los empos
y del circo electoral más disparatado de nuestra
historia.
Pero Sagas resultó ser peor que todos los anteriores.
Estamos bajo el control de una persona que pertenece
al par do Morado –del que fue fundador ideológico–,
cuyo discurso de “hombre de ciencia”, de intelectual y
gran lector, se desdice de sus actos, de su falta de
interés en el pueblo, y de su falta de reacción ante lo
que viene ocurriendo en el país. No hablemos aquí de
los reclamos del sector agrario, de los reclamos del
sector educa vo, de los reclamos del sector salud. De
eso ya se ha hablado bastante. Hablemos de la nueva
cuarentena y del trasfondo de la misma.
Si creen que la idea de encerrar a todo el Perú, durante 15 días, obedece a que manejan la idea de que si la gente no sale, no se contagia,
no es cierto. El gobierno ha impuesto la cuarentena no para proteger a la población del virus, lo ha hecho para proteger al gobierno
de los reclamos populares y de la falta de estructura sanitaria a nivel nacional.
7. CP7
HERNANDO DE SOTO:
¿EL CÁNDIDO CANDIDATO?
EL ÚLTIMO MILITANTE
Víctor López García
PARRHESIA
Paul Laurent
caso como un pequeño elogio a
AAlexander Tocqueville, el intelectual
italiano Bruno Leoni hizo su personal
auscultación de los Estados Unidos de la
década de 1950. Poco conocido a nivel
general, su posición es la de un liberal tan
autén co como el famoso F. A. Hayek.
Y si Hayek advir ó en 1944 que el mundo
marchaba peligrosamente hacia un “camino de
servidumbre” (como tuló al libro que lo lanzó
a la fama) por apostar por polí cas que
despreciaban el comercio y la propiedad, Leoni
no iba a ser de opinión diferente.
Su lectura de la Norteamérica de mediados del
siglo XX la ofrece en un ar culo tulado «La
polémica "liberista" contemporánea en los
Estados Unidos» (1956), donde advierte que
mientras la sociedad apuesta
mayoritariamente por los valores liberales sus
polí cos enen una postura abiertamente
opuesta.
Para medir su aserto Leoni decide cotejar cada
uno de los diez puntos propuestos por Karl
Marx y Friedrich Engels en el Manifiesto
comunista de 1948 frente a lo que los
gobiernos han establecido desde inicios de la
centuria. En esa revisión apreciará que de los
diez puntos insertos en el Manifiesto sólo tres
no se aplicaron.
(1) La existencia del impuesto progresivo sobre
la renta, (2) la casi abolición de la herencia por
una muy alta carga imposi va, (3) que el
crédito esté concentrado en el estado, (4) la
alta par cipación de éste en los medios de
comunicación y en el transporte, (5) en el
sector industrial y en la agricultura, (6) la
enseñanza elemental gratuita y (7) la abolición
del trabajo infan l en las fábricas se lo
confirman.
Únicamente imperará la propiedad de la erra,
el respeto a los bienes de los emigrantes y
rebeldes y la libertad de trabajo.
Ante ello Leoni acusa que ese viraje se llevó a
cabo reinterpretando la cons tución
celosamente redactada por los padres
fundadores. Una cons tución que nació para
frenar al gobierno y a sus funcionarios antes
que a la sociedad. Empero, será ésta úl ma la
que con su predilección por el comercio libre y
los valores individualistas conserve los
fundamentos de la nación.
LEONI
mejoramiento de la economía, la sociedad y la polí ca
que ha marcado gran parte de su vida profesional.
Al servicio de regímenes de dis nto po ideológico con
el común denominador de contribuir al proceso de
desarrollo económico, progreso social y modernización
gubernamental. En esta dinámica, colaboró con
Belaúnde, Alan y Fujimori, en varias oportunidades y
temá cas. Llegaba cuando lo requerían y se iba cuando
quería.
Así, colaboró con más de 35 gobiernos sobre temas de
gobernabilidad democrá ca. Ha sido reconocido como
uno de los más importantes e influyentes intelectuales
del mundo en diversas ocasiones y por dis ntas
en dades académicas y comunicacionales. Igualmente,
premiado por diferentes gobiernos y presidentes por
su aporte y valía. Sus libros "El otro sendero" y "El
misterio del capital" se es man entre los más
influyentes de los úl mos empos. Realmente un lujo
para el país, por el que también se jugó enfrentando el
terrorismo comunista criminal y genocida de Sendero
Luminoso al que comba ó con sus ideas y acciones a
través de su Ins tuto Libertad y Democracia, cuyo local
fuera dinamitado perdiendo la vida algunos
integrantes.
Ahora, cercano a los 80, lo tenemos de candidato
presidencial, en un país cuya población electoral no
suele votar por los más inteligentes o preparados para
gobernar. En términos de ap tud, es, sin duda, el
mejor: el más lúcido y coherente. El tema está en el
campo de la ac tud, vale decir de su carácter y
conducta como líder. Pero, sobre todo, en la decisión
de muchos desinformados o mal informados por la
prensa que tenemos; la misma que está apostando por
morados, caviares, y rojos, arqueritos, correlones,
traidores y secretarias. Ojalá prime el voto inteligente.
onocí a De Soto en el año 1984, cuando yo
Cintegraba el Directorio de la Comisión Nacional
de Plan de Gobierno (CONAPLAN) del Par do
Aprista Peruano, que presidía Luis Alva Castro. Junto
con otro militante y amigo como Javier Tantalean
Arbulú estábamos a cargo también de la propuesta
para el Sector Informal de la Economía. Y lo invitamos a
que haga una exposición al Equipo Técnico sobre sus
ideas al respecto que ya eran difundidas en medios
académicos y comunicacionales.
Asis ó y planteo su idea medular. Consideraba que la
"informalidad era el resultado de la incapacidad del
estado para poder legalizar a los trabajadores por
cuenta propia que se han inventado un trabajo para
sobrevivir". Entonces, no me pareció muy convincente
su hipótesis, pues sería muy sencillo darle personería
jurídica para resolver en posi vo dicha realidad. Al
igual que otros integrantes del colec vo, más bien
simpa zábamos con la concepción más estructuralista
de la informalidad que entonces postulaba Daniel
Carbone o, que se había integrado al trabajo orgánico
de CONAPLAN en el Área Económica, y que junto con
otros intelectuales del Centro de Estudios para el
Desarrollo y la Par cipación (CEDEP) y del Programa
Regional de Empleo para América la na y el Caribe
(PREALC) consideraban que la informalidad "era el
producto de la incapacidad de la estructura económica
capitalista en desarrollo para incorporar mano de obra
a los procesos produc vos y condenaba a ingentes
segmentos de trabajadores a tener que inventarse un
empleo para sobrevivir".
Su presencia, entonces, en una reunión de técnicos
polí cos apristas e independientes que colaboraban
con el diseño de las futuras polí cas públicas, daba
cuenta de su talante siempre abierto y en disposición
de analizar, deba r y proponer ideas para el
8. e niño, conoció el exilio. La
Dllegada de la dictadura del
General Odría lo alejó, junto
con su familia y durante más de una
década, en el país de los relojes cucú y
el chocolate de taza. El desarraigo
amenazaba con volverse ley. Hoy, ese
niño es Hernando De Soto,
considerado por la revista Time, en el
2004, como uno de los 100 hombres
más influyentes del mundo, y actual
candidato presidencial. Se le acusa, en
ciertos sectores, de haber mantenido,
a nivel psicológico, un cierto grado de
exilio en relación al Perú: existe
quienes dudan de su conexión con la
realidad peruana.
El 70% del Perú es informal: esas
palabras no solamente representan, a
ojos de De Soto, la oportunidad una y
otra vez perdida del mendigo sentado
en el banco de oro, sino conforman, y
eso es algo que vemos hoy, el
resultado de décadas de polí cas
económicas que nunca alcanzaron el
edén prome do. La contradicción, en
pandemia, explota en nuestras caras
todos los días. Pero De Soto, de una
forma u otra, siempre estuvo ahí.
Desde que, durante los 80 y 90,
llevara a cabo, a través del Ins tuto
Libertad y Democracia que lidera,
una serie de inicia vas junto con el
Estado buscando el otorgamiento de
tulos de propiedad que logró incluir
a 1.2 millones de familias al sistema,
sus esfuerzos han sido reconocidos
tanto a nivel nacional como
internacional. De acuerdo al hoy
candidato de Avanza País, la
formalización del informal y el
otorgamiento de los tulos de
propiedad configuran la clave que
debe seguir nuestro país para
alcanzar, ahora sí de forma plena, el
desarrollo que las polí cas liberales
de antaño prome an.
El enemigo de ayer fue derrotado. La
crisis de iden dad nacional que llevó
al auge del terrorismo fue vencida por
una serie de medidas que, incluyendo
los postulados de tulación de
propiedad de De Soto, lograron
acercar a la población a un Estado
cuya cara había cambiado. Se logró,
con sangre, sudor y lágrimas, vencer
al terrorismo, pero los estragos a nivel
de psicología de masas que dejó esa
época siguen presentes, esta vez bajo
una forma actualizada al día de hoy.
La desconfianza en el Estado, luego de
una serie de gobiernos que, después
de la caída de Fujimori, se dedicaron a
entorpecer y entrampar el sistema
administra vo, ha hecho que la
población se refugie en la
informalidad y, diremos incluso, en el
desentendimiento en relación a la
clase polí ca. El nuevo enemigo, el de
hoy, somos nosotros mismos. ¿Por
qué querrá De Soto ser presidente?
En el año 2001, tentó preliminarmente
la presidencia, para posteriormente
re rarse de la con enda. ¿No se
dieron las condiciones? Seguramente.
¿Están dadas las condiciones en la
actualidad? La pandemia que nos
azota y las inhumanas medidas de
prevención y sanidad establecidas por
el Gobierno muestran que el Perú
informal sangra. La promesa de la
formalidad, en este contexto, no
solamente representa la inclusión de
gran parte de la población a un
sistema entrampado y lejano, sino,
sospechamos, podría representar la
vía de unificación que el país requiere
para derrotar al enemigo de hoy, y
asegurarnos de que nunca vuelva el
enemigo de ayer. Será tal vez, a causa
de esta experiencia que De Soto busca
la presidencia: para acabar, de una
vez, con el exilio del niño peruano en
Suiza, pero, sobre todo, con el exilio
de los peruanos en el Perú. CP
Hoy, que el Perú parece exiliado en sí mismo, la gado por una crisis sanitaria sin precedentes,
su mirada parece proyectar la unificación que el país requiere. ,
Hernando De Soto ene un plan
y la actualidad lo invita a ponerlo en marcha.
Antonio More
LA AUTOPERCEPCIÓN
Y LA CULTURA
PiE DE PÁGINA
I
in problemas, mi amigo compra unas
Szapa llas úl mo modelo, con la misma
tecnología que los brillantes futbolistas
u lizan para compe r en algún campeonato
europeo. Con orgullo, muestra una casaca o
narra lo diver da que fue la reunión aquella
en la que los licores de diversos aromas y
dulzores se acomodaban sobre la mesa. Tal
vez, para cada una de estas acciones, mi
amigo tuvo que sacrificar otros gustos,
priorizar dirían algunos, para obtener lo que
quiere. ¿Vanidad?, ¿superficialidad? Para
nada, es lo que lo hace feliz. Como a muchos
de nosotros puede llenarnos de alegría invitar
a la familia un almuerzo en algún lugar bonito
y decir: “pide nomás”. Y todo esto está bien,
pues sería una ac tud miserable señalar qué
es lo que debe hacer feliz a una persona. Sin
embargo, estas ac tudes me asombran
cuando entramos en una comparación con
respecto al costo cultural. Suena como el
estribillo de una canción el que los libros son
caros. Y pienso en que el gasto realizado por
mi amigo en una noche de francachelas
supera largamente lo que costaría un
ejemplar del excelente libro de cuentos
“Algunos cuerpos celestes” de Augusto Effio o
una edición de relatos raros como
“Dismórfica”, publicado por Pandemonium
editorial; quizá el almuerzo familiar
significaría la misma inversión que las
entradas a una obra de teatro. Algunos
pensarán que es una cues ón de costumbres,
que los peruanos tenemos la idea de comida,
Dios, patria y familia o algo así; pero sospecho
que es una cues ón de autopercepción. Sin
entrar a la discusión sartreana de qué es el
ser, y si lo que hacemos es lo que somos;
pienso que no hemos entrado en la
conciencia de que tenemos un lado sediento
de historias, hambriento de imágenes,
orgulloso de conocimiento. Y que está allí,
como un cuerpo desnutrido y que se sos ene
apenas por las migajas culturales con las que
un peatón distraído se tropieza. No es una
cues ón de preferencias, sino de conciencia,
de percibirnos como intelectuales, ¿acaso no
se concluye siempre que la diferencia entre el
hombre y los animales es la inteligencia? Si no
recuperamos esa necesidad que teníamos de
niños y niñas por saber, por descubrir, por
experimentar y sorprendernos, la cultura se
reducirá a esa despiadada frase de “no tengo
plata para eso”. Y es que los productos
culturales no son caros, si no que nos parecen
poco valiosos.
HERNANDO
DE SOTO
Y EL FIN DE LOS
EXILIOS
ALQUIMIA CULTURAL / SOL POZZI ESCOT