La globalización financiera no es un “producto natural” de la historia de los mercados, la tecnología o la ideología: es la consecuencia de decisiones de los Estados que, a su vez, son producto de un complejo juego de poderes. Este juego incluye la competencia que han llevado y llevan los gobiernos de los países más poderosos para hegemonizar el mercado financiero y la disputa de intereses entre los sectores económicos y los Estados, tanto en el ámbito nacional como en la arena del mercado global.
En los Estados Unidos (EE. UU.) y la Unión Europea (UE), los intereses de las finanzas se expresan abiertamente en la acción de lobbies autorizados y con la participación de representantes de las finanzas en órganos decisorios de los Estados. Precisamente, en el momento del estallido de la crisis global, en 2008, quien era secretario del Tesoro de los Estados Unidos, había desarrollado su carrera previa en el banco de inversión Goldman Sachs, el más grande del país, y cuando abandonó su cargo volvió a la arena de las finanzas.
1. El poder en la globalización financiera | 11
Introducción1
La globalización financiera no es un “producto natural” de
la historia de los mercados, la tecnología o la ideología: es
la consecuencia de decisiones de los Estados que, a su vez,
son producto de un complejo juego de poderes. Este juego
incluye la competencia que han llevado y llevan los gobier-
nos de los países más poderosos para hegemonizar el mer-
cado financiero y la disputa de intereses entre los secto-
res económicos y los Estados, tanto en el ámbito nacional
como en la arena del mercado global.
En los Estados Unidos (EE. UU.) y la Unión Europea (UE),
los intereses de las finanzas se expresan abiertamente en
la acción de lobbies autorizados y con la participación de
representantes de las finanzas en órganos decisorios de
los Estados. Precisamente, en el momento del estallido de
la crisis global, en 2008, quien era secretario del Tesoro de
los Estados Unidos, había desarrollado su carrera previa en
el banco de inversión Goldman Sachs, el más grande del
1 N. del E. El presente libro está realizado en base a materiales de la Tesis de Doctorado en
Ciencias Sociales del autor, titulada “Las relaciones de poder entre los estados y entre los
sectores sociales en la construcción de la globalización financiera”, presentada en la Facul-
tad de Ciencias Sociales de la UBA y defendida el 13 de noviembre de 2013.
2. 12 | Julio sevares
país, y cuando abandonó su cargo volvió a la arena de las
finanzas.
La tecnología y la ideología juegan ciertamente un papel
importante en todos los aspectos de la globalización: la tec-
nología de procesamiento y transmisión de datos ha per-
mitido vehiculizar gigantescas masas de capital a través de
las fronteras en segundos, pero su aplicación es, siempre,
decisión de autoridades nacionales o internacionales. La
difusión de la ideología liberal a partir de la década de 1980
ha operado, a su vez, como el instrumento de ocultamiento
y legitimación de los intereses empresariales y de ataque a
las funciones reguladoras y sociales de los Estados.
La globalización financiera involucra dos procesos arti-
culados: la liberalización del movimiento transfronterizo
de capitales y la desregulación de los sistemas financieros
de cada país. Ambos procesos se profundizaron en los años
posteriores a la crisis del régimen cambiario de Bretton
Woods, en 1971. Desde esa década, los gobiernos de los paí-
ses desarrollados compitieron y negociaron la liberaliza-
ción de los flujos de capital teniendo en cuenta sus intere-
ses, tanto en lo que respecta a favorecer las operaciones de
suscorporaciones financieras ynofinancierasenelexterior,
como a defenderse de eventuales pérdidas de capitales.
Poco después de comenzada la liberalización de los
movimientos de capital, se inició la desregulación de los
sistemas financieros nacionales; se eliminaron los topes a
las tasas de interés, que se habían establecido para facilitar
el financiamiento de la producción, así como las restriccio-
nes operativas para las entidades financieras, que tenían el
propósito de contener la especulación.
En el sistema financiero global las políticas públicas
retrocedieron, y la atracción de depositantes y la distri-
bución del crédito fueron dejadas en manos del mercado.
3. El poder en la globalización financiera | 13
Las potencias compitieron para reducir regulaciones con
el propósito de beneficiar a sus corporaciones financieras
y atraer inversores a sus mercados. En este proceso, los
agentes del sector financiero tuvieron un papel activo al
presionar a los Estados para que se definieran a favor de
una desregulación que aumentó sus espacios de libertad y
sus oportunidades de ganancia.
Como consecuencia de este doble proceso de liberali-
zación de los movimientos de capital y de desregulación
de los mercados financieros, el negocio financiero creció
explosivamente, por encima de las actividades productivas
y comerciales. La participación y la influencia de las finan-
zasenlavidaeconómicaysocialseincrementaronentodas
sus dimensiones, en lo que se ha denominado la “financia-
rización” o “capitalismo dirigido por las finanzas”.
Losprincipalesrasgosdeestecapitalismosonelaumento
del endeudamiento público y privado, el crecimiento de las
empresas financieras en la economía, el aumento de los
negocios financieros de las empresas productivas y la utili-
zación de empresas como activos financieros en los merca-
dosdefusionesyadquisiciones.Estatendenciacomprendió,
incluso, la difusión de los sistemas de pensión privados, que
captan los ahorros de los empleados y someten los ingresos
del trabajo a los vaivenes financieros.
La financiarización no fue inocua para la sociedad: dio
lugar a una serie de crisis de creciente gravedad que des-
embocaron en la crisis global que se inició en 2007 en los
Estados Unidos y luego se extendió con mayor o menor
fuerza por gran parte del planeta, con enormes costos eco-
nómicos y sociales.
La crisis ha creado una situación paradójica en la vida
de los Estados: estos ejercieron y ejercen su poder inter-
viniendo activamente en las negociaciones y toma de
4. 14 | Julio sevares
decisiones locales e internacionales para implementar y
promocionar la liberalización y desregulación; es decir,
para reducir sus capacidades regulatorias y su capacidad
de decisión en la vida de sus sociedades. Los Estados, en
suma, se autolimitaron a favor de los intereses del capital.
Esta resignación solo puede explicarse porque los Esta-
dos están bajo la poderosa influencia del capital y de su
programa de liberalización. Sin embargo, siguen siendo el
lugar central de decisión y de intervención, especialmente
en momentos de crisis; en estas circunstancias actúan
para resguardar su legitimidad, cuestionada por los costos
sociales de las crisis, y para garantizar la continuidad de la
reproducción del capital.
La evolución señalada tiene una influencia decisiva
sobre la vida de las sociedades, porque el aumento del
poder financiero y la colonización de los Estados y los par-
lamentos por parte de los agentes del capital financiero, ha
derivado en un deterioro de la representación, ya de por
sí limitada y distorsionada, de los intereses ciudadanos en
los sistemas democráticos.