El documento describe los primeros intentos de crear vehículos que se mueven por sí mismos, comenzando en 1472 cuando Roberto Balturo inventó un aparato que se movía usando la fuerza del viento. En 1582, Leonardo da Vinci diseñó un vehículo que podía transportar a dos personas. Más tarde, en 1829 y 1862, se creó y perfeccionó el motor de explosión, lo que llevó a la producción del primer automóvil con motor en 1866 y el inicio de diferentes líneas de autos limitados.