La profesora propuso leer cuentos en lugar de las lecturas habituales para la próxima clase, ya que los niños se aburrían. Los niños apoyaron la idea y decidieron traer diferentes cuentos para leer y decidir cuál era el mejor. Cuando llegó la clase, los niños leyeron los cuentos y sorprendieron a la profesora con su entusiasmo y trabajo.