3. Esquistosomiasis
Datos y cifras
La esquistosomiasis es una enfermedad aguda y crónica causada por gusanos parásitos.
La infección se contrae al realizar actividades agrícolas, domésticas profesionales o recreativas
habituales en las que hay contacto con aguas infestadas.
La falta de higiene y algunas actividades lúdicas de los niños en edad escolar, incluidas la natación y la
pesca en aguas infestadas, los hacen particularmente vulnerables a la infección.
El control de la esquistosomiasis se centra en la reducción del número de casos mediante el tratamiento
periódico y a gran escala de la población con prazicuantel; un enfoque más amplio relativo al agua
potable, el saneamiento apropiado y el control de los caracoles también limitaría la transmisión.
.
4. Esquistosomiasis
Las estimaciones indican que en 2016 necesitaron tratamiento profiláctico contra la
esquistosomiasis al menos 206,5 millones de personas, de las cuales 88 millones lo
recibieron
La esquistosomiasis es una enfermedad parasitaria aguda y crónica causada por duelas
sanguíneas (trematodos) del género Schistosoma.
Se estima que al menos 206,5 millones de personas necesitaron tratamiento en 2016.
El tratamiento de prevención, que se debería repetir durante algunos años, permite reducir y
prevenir la morbilidad. Hay constancia de la transmisión de la enfermedad en 78 países.
5. Epidemiología
Sin embargo, la quimioterapia preventiva para la esquistosomiasis, en la que se aplica un tratamiento a
gran escala a personas y comunidades, solamente se requiere en 52 países endémicos con transmisión de
moderada a alta.
La esquistosomiasis es prevalente en las regiones tropicales y subtropicales, especialmente en las
comunidades pobres sin acceso a agua potable segura ni a saneamiento adecuado.
Se estima que al menos un 92% de las personas que necesitan tratamiento contra la esquistosomiasis vive
en África.
Hay dos formas principales de esquistosomiasis (intestinal y urogenital), causadas por las cinco grandes
especies de duelas sanguíneas.
6. Epidemiología
La esquistosomiasis afecta principalmente a las comunidades pobres y rurales, en particular las
poblaciones agrícolas y pesqueras.
Las mujeres que realizan tareas domésticas en aguas infestadas, por ejemplo, lavar la ropa, también
corren riesgos.
Los niños son especialmente vulnerables a la infección debida a higiene inapropiada y contacto con agua
infestada.
Los movimientos de refugiados y la migración hacia las ciudades están introduciendo la enfermedad en
nuevas zonas.
El aumento de la población y las correspondientes necesidades de energía y agua generan a menudo
planes de desarrollo y modificaciones ambientales que también contribuyen a aumentar la transmisión.
12. Esquistosomiasis
Esquistosomiasis: esta dolencia afecta a unos 200 millones de personas en todo el mundo, y más
de 650 millones viven en zonas donde es endémica.
Schistosoma haematobium es el organismo responsable de la esquistosomiasis urinaria,
Mientras que la intestinal puede ser causada por S. intercalatum, S. mansoni, S. japonicum o S.
mekongi.
La causa primera de la enfermedad son los huevos del esquistosoma, depositados por un parásito
adulto en los vasos sanguíneos que rodean la vejiga o los intestinos.
13. Esquistosomiasis--Etiología
La esquistosomiasis es una infección parasitaria causada por trematodos del
género Schistosoma.
La única especie de esquistosomiasis en las Américas es la esquistosomiasis
intestinal causada por Schistosoma mansoni.
Los gusanos adultos en el huésped humano miden alrededor de 1 cm los machos y
1,5 cm las hembras.
El macho tiene forma de canal y alberga a la hembra, de modo que por lo general
se encuentran juntos.
14. Esquistosomiasis--Etiología
Dos países en las Américas, Brasil y Venezuela tienen un total de 1,6 millones
de personas que requieren tratamiento para esquistosomiasis.
En República Dominicana y Puerto Rico se están implementando evaluaciones
epidemiológicas para verificar si la transmisión de la esquistosomiasis se ha
interrumpido, ya que desde hace varios años ningún caso ha sido reportado
casos.
15. El ciclo de vida del parásito
Con el fin de completar su ciclo de vida, el S. mansoni requiere un
huésped final, el ser humano, y
Un huésped intermediario, un caracol de agua dulce del género
Biomphalaria,
(Bulinus o Oncomelania son huéspedes intermediarios en otras regiones
de otras especies de Schistosoma, pero no en la región de la Américas).
16. El ciclo de vida del parásito
Los gusanos adultos viven en las ramas más pequeñas de las venas
mesentéricas intestinales de los individuos infectados, en los que ponen
huevos que llegan a la luz intestinal y acaban en las heces.
Cuando las heces llegan a las fuentes de agua dulce, los huevos se convierten
en larvas llamadas miracidios.
Los miracidios llegan a los caracoles de agua dulce, en los que se reproducen
asexualmente y generan otro tipo de larvas, llamadas cercarias, Las cuales se
escapan del caracol y se liberan en el agua.
17. El ciclo de vida del parásito
La transmisión a las personas se produce cuando las cercarías, que nadan
libremente en el agua, penetran en la piel de los seres humanos que se
bañan en estas aguas con fines profesionales o de recreo.
Una vez en el cuerpo humano, los esquistosómulas (gusanos jóvenes)
penetran en los vasos sanguíneos y llegan
Al sistema venoso portal del hígado, donde maduran en gusanos adultos y
finalmente migran hacia las vénulas intestinales, donde ponen huevos,
cerrando así el ciclo.
18. Signos y síntomas
La esquistosomiasis intestinal puede causar síntomas agudos y crónicos.
El primer síntoma es la erupción pruriginosa que está asociada a la
penetración en la piel de las cercarias.
Los síntomas crónicos están asociados con la inflamación granulomatosa
que rodea los huevos atrapados dentro de los tejidos biológicos.
Los granulomas se pueden encontrar en la pared intestinal
(principalmente en la porción distal del colon) y pueden ser responsables
de sangrado en las heces y dolor abdominal.
19. Signos y síntomas
Sin embargo, la mayoría de los síntomas son causados por la embolización de
los huevos en las venas intestinales del hígado a través del sistema portal.
Aquí, los granulomas se encuentran en los espacios del periportal y tienden a
salir progresivamente lo que conduce a la fibrosis periportal.
Los casos severos se asocian con la obstrucción del flujo sanguíneo y la
hipertensión portal,
Provocando un cuadro clínico caracterizado por la esplenomegalia, ascitis y
várices esofágicas sangrantes que son principalmente la causa de muerte de
esta enfermedad.
20. Signos y síntomas
El síntoma clásico de la esquistosomiasis urinaria es la hematuria
En los estadios avanzados suelen observarse fibrosis de la vejiga y el uréter e
hidronefrosis, y el cáncer de vejiga es una complicación que puede aparecer en las
etapas finales.
La esquistosomiasis intestinal presenta un cuadro clínico inespecífico, con dolores
abdominales, diarrea y sangre en las heces.
En las fases avanzadas suele haber hipertrofia hepática, acompañada frecuentemente
de ascitis y otros síntomas de hipertensión portal.
En tales casos puede haber también esplenomegalia.
21. Esquistosomiasis
Esquistosomiasis: esta dolencia afecta a unos 200 millones de personas en todo el
mundo, y más de 650 millones viven en zonas donde es endémica.
Schistosoma haematobium es el organismo responsable de la esquistosomiasis
urinaria,
Mientras que la intestinal puede ser causada por S. intercalatum, S. mansoni, S.
japonicum o S. mekongi.
La causa primera de la enfermedad son los huevos del esquistosoma, depositados
por un parásito adulto en los vasos sanguíneos que rodean la vejiga o los intestinos.
22. Diagnóstico
Un cuadro clínico sugestivo y antecedente de haber estado en contracto con
agua dulce pueden orientar el diagnóstico.
La identificación microscópica de huevos en heces el método diagnóstico
más utilizado,
Las pruebas que dependen de la detección de antígenos circulantes en
muestras de suero y orina están disponibles pero no son muy sensibles.
23. Diagnóstico
Las pruebas de detección de anticuerpos son las pruebas disponibles más
sensibles y por lo tanto se utilizan para evaluar la existencia de
transmisión residual de la esquistosomiasis en las zonas donde se han
aplicado medidas de control, sin embargo,
Estas pruebas no pueden distinguir entre infecciones recientes y pasadas.
Las técnicas de imagen como la ecografía son herramientas
complementarias útiles para examinar la gravedad de la fibrosis hepática.
24. Tratamiento, prevención y control
El praziquantel es la primera opción terapéutica para el tratamiento de la
esquistosomiasis y se recomienda para eventos adversos leves y temporales.
La dosis recomendada es de 40-60 mg/ kg,-en una sola toma.
El medicamento ha demostrado una alta curación de los enfermos y de
reducción de los huevos.
En áreas endémicas, dónde se realiza administración masiva de medicamentos,
se puede administrar el praziquantel mediante el uso los dosimetros de la OMS.
25. Tratamiento, prevención y control
La oxamniquina es otro de los medicamentos que se pueden utilizar para
tratar la esquistosomiasis por S.mansoni.
Se administra en dosis de 15 mg/ kg, en una sola toma.
Aunque es un medicamento seguro, la oxamniquina es menos utilizada
que el praziquantel debido a que las tasas de curación y de reducción de
huevos son más bajas.
26. Tratamiento, prevención y control
La piedra angular de la estrategia recomendada por la OMS para el
control de la esquistosomiasis en zonas endémicas es la distribución a
gran escala del praziquantel a grupos de alto riesgo como;
Niños en edad escolar, mujeres en edad fértil, incluyendo las mujeres
embarazadas y personas expuestas profesionalmente al agua dulce.
El objetivo de la estrategia es mantener, a través del tratamiento en
intervalos regulares, la carga de gusanos en los individuos infectados
bajas, con el fin de prevenir el desarrollo y la progresión de la morbilidad
y reducir la transmisión de la infección.
27. Tratamiento, prevención y control
Así mismo, es importante abordar los determinantes sociales de la salud
que pueden perpetuar el ciclo de transmisión de la enfermedad como
Acceso a agua segura, saneamiento mejorado y educación en salud para
dar alternativas a los comportamientos de las comunidades endémicas
que facilitan la infección.
En las zonas donde la prevalencia es muy baja, y donde las pruebas de
diagnóstico sensibles son fácilmente asequibles y disponibles, la revisión
periódica y la administración de medicamentos selectiva a los casos
positivos también puede ser una opción
28. Respuesta de la OPS/OMS
En octubre del 2009, la OPS aprobó la Resolución CD49.R19 para la eliminación de las
enfermedades infecciosas desatendidas y otras infecciones relacionadas con la pobreza,
instando a los Estados Miembros a tomar medidas contra la esquistosomiasis (y otras
enfermedades infecciosas desatendidas) para reducir drásticamente su prevalencia en
las Américas.
La meta establecida para el 2015 en esta resolución fue reducir la prevalencia y la
carga de la esquistosomiasis en las zonas de transmisión elevada a una prevalencia de
menos del 10%, según mediciones cuantitativas del recuento de huevos del parásito en
heces.
En mayo del 2012, la Asamblea Mundial de la Salud adoptó la Resolución WHA 65.21
instando a los países endémicos a reducir la transmisión de la esquistosomiasis y
acelerar su eliminación.
29. Respuesta de la OPS/OMS
En mayo del 2013, la Asamblea Mundial de la Salud adoptó la Resolución WHA 66.12 y
reafirmó metas al 2020 para 17 enfermedades tropicales desatendidas, incluyendo la
esquistosomiasis.
En junio del 2013, la Organización de los Estados Americanos (AG/RES.2810(XLIII-O/13)
ratificó la resolución CD49.R19 y 23 países miembros apoyaron la resolución de la OEA.
La OPS/OMS colabora con los países endémicos para obtener la donación de medicamentos y
otros insumos necesarios para lograr interrumpir la transmisión y eliminar la esquistosomiasis.
También apoya a los países en la vigilancia, prevención y control de la esquistosomiasis (ej.
mapeo de la distribución de la enfermedad); y promueve que los países documenten el
proceso para obtener la verificación de la eliminación de la enfermedad.
30.
31. Esquistosomiasis
Datos y cifras
La esquistosomiasis es una enfermedad aguda y crónica causada por gusanos parásitos.
La infección se contrae al realizar actividades agrícolas, domésticas profesionales o recreativas
habituales en las que hay contacto con aguas infestadas.
La falta de higiene y algunas actividades lúdicas de los niños en edad escolar, incluidas la natación y la
pesca en aguas infestadas, los hacen particularmente vulnerables a la infección.
El control de la esquistosomiasis se centra en la reducción del número de casos mediante el tratamiento
periódico y a gran escala de la población con prazicuantel; un enfoque más amplio relativo al agua
potable, el saneamiento apropiado y el control de los caracoles también limitaría la transmisión.
Las estimaciones indican que en 2016 necesitaron tratamiento profiláctico contra la esquistosomiasis al
menos 206,5 millones de personas, de las cuales 88 millones lo recibieron.
32. Esquistosomiasis
La esquistosomiasis es una enfermedad parasitaria aguda y crónica causada por duelas
sanguíneas (trematodos) del género Schistosoma.
Se estima que al menos 206,5 millones de personas necesitaron tratamiento en 2016.
El tratamiento de prevención, que se debería repetir durante algunos años, permite reducir y
prevenir la morbilidad. Hay constancia de la transmisión de la enfermedad en 78 países.
Sin embargo, la quimioterapia preventiva para la esquistosomiasis, en la que se aplica un
tratamiento a gran escala a personas y comunidades, solamente se requiere en 52 países
endémicos con transmisión de moderada a alta.
33. Infección y transmisión
Las personas se infectan cuando las formas larvarias del parásito, liberadas por caracoles de
agua dulce, penetran en la piel durante el contacto con aguas infestadas.
La transmisión se produce cuando las personas infectadas con esquistosomiasis contaminan
fuentes de agua dulce con huevos del parásito, contenidos en sus excretas, que luego se
incuban en el agua.
En el interior del organismo, las larvas se convierten en esquistosomas adultos, que viven en
los vasos sanguíneos, donde las hembras ponen sus huevos.
Algunos de esos huevos salen del organismo con las heces o la orina y continúan el ciclo vital
del parásito.
Otros quedan atrapados en los tejidos corporales, donde causan una reacción inmunitaria y
un daño progresivo de los órganos.
34. Epidemiología
La esquistosomiasis es prevalente en las regiones tropicales y subtropicales, especialmente
en las comunidades pobres sin acceso a agua potable segura ni a saneamiento adecuado.
Se estima que al menos un 92% de las personas que necesitan tratamiento contra la
esquistosomiasis vive en África.
Hay dos formas principales de esquistosomiasis (intestinal y urogenital), causadas por las
cinco grandes especies de duelas sanguíneas.
35. Epidemiología
La esquistosomiasis afecta principalmente a las comunidades pobres y rurales, en particular las
poblaciones agrícolas y pesqueras.
Las mujeres que realizan tareas domésticas en aguas infestadas, por ejemplo, lavar la ropa, también
corren riesgos.
Los niños son especialmente vulnerables a la infección debida a higiene inapropiada y contacto con agua
infestada.
Los movimientos de refugiados y la migración hacia las ciudades están introduciendo la enfermedad en
nuevas zonas.
El aumento de la población y las correspondientes necesidades de energía y agua generan a menudo
planes de desarrollo y modificaciones ambientales que también contribuyen a aumentar la transmisión.
36. Epidemiología
El aumento del ecoturismo y los viajes "fuera de las rutas más trilladas" están haciendo que
aumente el número de turistas con esquistosomiasis. A veces los turistas presentan
infecciones agudas graves y problemas poco habituales, como la parálisis.
La esquistosomiasis urogenital también se considera un factor de riesgo de infección por VIH,
sobre todo en la mujer.
37. Los síntomas de la esquistosomiasis
Los síntomas de la esquistosomiasis son causados por la reacción del organismo ante los
huevos del gusano.
La esquistosomiasis intestinal puede producir dolor abdominal, diarrea y sangre en las heces.
En los casos avanzados es frecuente la hepatomegalia , que se asocia frecuentemente a
ascitis e hipertensión portal.
En esos casos también puede haber esplenomegalia .
El signo clásico de la esquistosomiasis urogenital es la hematuria.
38. Los síntomas de la esquistosomiasis
En los casos avanzados son frecuentes la fibrosis de la vejiga y los uréteres, así como las
lesiones renales.
El cáncer de la vejiga es otra posible complicación tardía.
Las mujeres con esquistosomiasis urogenital pueden presentar lesiones genitales, hemorragias
vaginales, dispareunia y nódulos vulvares.
En el hombre puede ocasionar trastornos de la vesícula seminal, la próstata y otros órganos.
La enfermedad también pueden tener otras consecuencias tardías irreversibles, tales como la
infertilidad.
39. Los síntomas de la esquistosomiasis
Los efectos económicos y sanitarios de la esquistosomiasis son considerables, ya que provoca más
discapacidad que muertes.
En los niños puede causar anemia, retraso del crecimiento y problemas de aprendizaje, aunque los
efectos suelen ser reversibles con el tratamiento.
La esquistosomiasis crónica puede afectar a la capacidad de trabajo y en algunos casos puede ser
mortal.
El número de muertes atribuibles a la esquistosomiasis es difícil de calcular debido a la existencia de
patologías ocultas conexas como la insuficiencia hepática y renal y el cáncer de vejiga.
40. Los síntomas de la esquistosomiasis
Es necesario evaluar las estimaciones del número mundial de muertes por esquistosomiasis, dado
que varían 1 entre 10 100 y 200 000 al año.
En 2000, la OMS estimó que la cifra era de 200 000 muertes anuales, pero es posible que haya
disminuido considerablemente gracias a la expansión durante el último decenio de las campañas de
quimioterapia profiláctica a gran escala
41. DIAGNOSTICO
La esquistosomiasis se diagnostica mediante la detección de huevos del parásito en muestras de
heces u orina.
La detección de anticuerpos y/o antígenos en las muestras de sangre u orina también es un indicio
de infección.
Para la esquistosomiasis urogenital, la técnica habitual consiste en pasar la orina por filtros de
nailon, papel o policarbonato.
Los niños infestados por S. haematobium tienen casi siempre microhematuria, que se puede
detectar con tiras reactivas.
42. DIAGNOSTICO
En la esquistosomiasis intestinal los huevos pueden detectarse al microscopio en muestras de heces
colocadas entre dos portaobjetos de cristal o entre un portaobjetos y papel de celofán empapado en
glicerina con azul de metileno, lo que se conoce como técnica Kato-Katz.
En el caso de las personas que viven en zonas no endémicas o de baja transmisión, las pruebas
serológicas e inmunológicas podrían ser útiles para determinar la exposición a la infección y la
necesidad de realizar un examen, una tratamiento y su seguimiento a fondo
43. Prevención y control
El control de la esquistosomiasis se basa en tratamientos a gran escala de los grupos de
población en riesgo, el acceso a agua salubre, la mejora del saneamiento, la educación sobre
la higiene y el control de los caracoles.
La estrategia de la OMS para controlar la esquistosomiasis se centra en la reducción del
número de casos mediante el tratamiento periódico y focalizado con prazicuantel mediante el
tratamiento a gran escala de las poblaciones afectadas.
Esto implica el tratamiento periódico de todas las personas pertenecientes a grupos de riesgo.
En los pocos países con baja transmisión de la enfermedad baja se debería procurar
interrumpirla.
.
44. Prevención y control
Los grupos destinatarios del tratamiento son:
los niños en edad escolar de las zonas endémicas;
los adultos que se consideren en riesgo en las zonas endémicas, como
las mujeres embarazadas y lactantes,
las personas cuyos trabajos impliquen contacto con aguas infestadas,
como la pesca,
las labores agrícolas o la irrigación, y
las mujeres cuyas tareas domésticas las ponen en contacto con aguas
infestadas;
Las comunidades enteras residentes en zonas altamente endémicas
45. Prevención y control
El objetivo consiste en reducir la morbilidad y la transmisión de la
enfermedad: el tratamiento periódico de las poblaciones en riesgo curará los
síntomas leves y evitará que las personas infectadas lleguen a las fases tardías
y graves de la enfermedad crónica.
Ahora bien, una de las principales limitaciones del control de la
esquistosomiasis es la escasa disponibilidad del prazicuantel.
Los datos de 2016 revelan que se pudo llegar al 34,4% de las personas que
necesitaban tratamiento y que se trató al 51,6% de los niños en edad escolar
que necesitaban quimioprofilaxis contra la enfermedad.
46. Esquistosomiasis
El prazicuantel es el tratamiento recomendado contra todas las formas de
esquistosomiasis.
Es eficaz, seguro y de bajo costo.
Aunque puede haber reinfección tras el tratamiento, el riesgo de padecer
enfermedad grave disminuye, e incluso se revierte cuando el tratamiento
se inicia y repite en la infancia.