7. *¿Por qué lloras? Pregunto el pez dorado
*Porque no tengo mi zapato, se ha quedado
dentro río claro- respondió Juan
*¡Ah con que este zapato es tuyo! pues a
nosotros los peces no nos gusta los zapatos y
nada que contamine nuestro río claro –
respondió el PEZ un poco enojado
*Gracias – respondió el niño pero aun seguía
llorando
8. - ¿Y por qué sigues llorando? – pregunto el PEZ
DORADO
- Porque es tarde y no sé cómo llegar a casa, he
desobedecido a mi mamá – respondió Juan
- ¡Ah ese no es problema! toma esta piedra y te
llevara a hasta tu casa, escúchala con atención –
hablo y aconsejo EL PEZ DORADO
9. Y alegre y contento se fue a su casa y
prometió no desobedecer más a su mamá,
desde entonces ya no es un niño travieso, sino
un niño obediente.