2. Proyecto Aprendo… enseñando
El proyecto aspira fomentar el
gusto por la lectura, proyectar las
destrezas de comprensión lectora
de manera divertida para lograr
que el estudiante desarrolle la
capacidad de leer con fluidez y de
comprender mientras lee.
3. Propósito del proyecto
• Ayudar a los estudiantes de nivel
elemental a mejorar en el
proceso de lectura mediante
tutorías.
8. Álvaro y el miedo al mar
• Autora: Silvia García
• Valores: valentía, superación, amistad
9. Álvaro tenía miedo a las olas del mar, pero era su
secreto porque no se atrevía a contárselo a
nadie. Cuando iba a la playa con su familia decía
que no le gustaba bañarse en el mar porque
prefería hacer castillos de arena. Sus primos le
insistían, pero él se negaba a jugar.
Cuando miraba el mar y se fijaba en el color
brillante y azul del agua, la brisa que llegaba
desde lejos, lo bien que la pasaban todos
tirándose agua y saltando las olas, se sentía triste
por no atreverse.
10. Un día soleado, Álvaro se quedó nuevamente
jugando solo en la arena. Su madre había
insistido mucho en que la acompañara al agua
pero él no quería que nadie le viera gritando
en el momento en que una ola monstruosa
pasara por encima de él.
Mientras construía un precioso castillo se le
acercó una niña con una gran sonrisa y una
cara llena de pecas y le dijo:
- Hola, soy Candela. ¿Cómo te llamas?
11. - Yo, Álvaro. ¿Te gusta hacer castillos de
arena?
- No, porque me da miedo encontrarme
insectos entre los granos de arena y que
me piquen. -Me gusta más bañarme en el
mar. ¿A ti no?
- No, a mí me gusta más hacer castillos de
arena.
- Eso es porque no has jugado conmigo en
el agua. Ven, la pasaremos genial.
-Es que no me gusta mucho la playa.
- ¿De verdad? ¿O es que te da miedo el
agua?
12. Álvaro, que nunca se había enfrentado a una
pregunta tan directa contestó:
- La verdad … me da un poco de miedo. Tengo
miedo a las olas- dijo agachando la cabeza.
- Podemos hacer una cosa. Tú me ayudas a jugar
con la arena a construir un castillo y yo te ayudo a
que toques el agua del mar.
Álvaro lo pensó durante un rato y al final decidió
enfrentarse a su miedo e intentar disfrutar por una
vez del verano.
13. Álvaro le dijo que sí, este ayudó a
Candela a jugar con la arena y al ver que
no había insectos la niña empezó a reír y
le dijo:
- ¡Qué tonta he sido! ¡Es muy divertido
jugar con la arena y ver los diferentes
colores que tiene cuando está seca o
mojada! Ya no le tengo miedo, muchas
gracias. Ahora te toca a ti. – Candela
extendió su mano y Álvaro se agarró muy
fuerte a ella.
14. Caminaron juntos hasta la orilla, mientras a
Álvaro le temblaba el cuerpo entero. Estaba a
punto de tocar el agua... cerró los ojos y cuando
se dio cuenta ya estaba dentro del mar.
- ¡Qué fresquito!
Candela tiró de él y una ola pequeña le cubrió
casi por completo. Sin embargo en vez de sentir
que se ahogaba y que lo pasaba mal se dio
cuenta de que no le había pasado nada y se sintió
muy tranquilo y feliz.
15. Cuando sus primos lo vieron en el agua
corrieron hacia él para mojarle. Él comenzó a
lanzarles agua y Candela también. Acabaron
jugando horas en el mar y Álvaro se sintió muy
contento por haber vencido su miedo.