La ciencia antigua se inicia con los primeros filósofos cuando trataron de sustituir el saber de tipo mítico por el saber racional. Según Aristóteles, este tipo de saber (episteme) consiste en el conocimiento de la causa por la que la cosa es y en la demostración deductiva, entendida como un conjunto de premisas verdaderas a la que le sigue una conclusión igualmente verdadera. Para conocer algo es preciso responder a tres preguntas: Qué es (esencia o causa formal y material), Para qué (causa final) y Por qué es (causa eficiente).