Este documento discute la responsabilidad y la irresponsabilidad. Señala que existen circunstancias comprensibles en las que no se puede cumplir con la responsabilidad, como enfermedades o tráfico. Sin embargo, cuando las personas cuentan con los recursos pero no cumplen, se les puede clasificar como irresponsables. Las consecuencias de la irresponsabilidad son que quienes los rodean dejan de tomarlos en serio y pierden la confianza, y que los irresponsables son incapaces de dar orientación a su vida.

1. REFLEXION SOBRE LA RESPONSABILIDAD
Existen ciertas circunstancias en las que no podemos cumplir con nuestra
responsabilidad. Por ejemplo, si nos enfermamos de gripe y no acudimos a la
escuela o al trabajo, o si había demasiado tránsito vehicular y nos retrasamos para
llegar a una cita. Esos casos pueden ser comprensibles y, simplemente, hay que
explicar lo que ocurrió. Pero hay otros (que la mayoría conoce) en los que las
personas cuentan con todo lo necesario para hacer lo que les corresponde y, no lo
hacen. Esas personas se pueden clasificar en el área de irresponsables. Las
consecuencias de esa actitud ocurren en dos sentidos: por un lado quienes los
rodean dejan de tomarlas en serio y pierden la confianza. Por otro, las personas
irresponsables son incapaces de ir dando una orientación a su vida. Se les olvida
que son ellos, y no los demás, quienes construyen su destino. Se tiene que tener
presente que cada paso puede marcar un avance o un retroceso en la vida.