El documento describe el trastorno del espectro autista (TEA), indicando que es un síndrome del neurodesarrollo definido por características conductuales que aparecen en los primeros 3 años de vida. Aunque tiene una base neurobiológica, no tiene una causa única ni tratamiento médico, sino tratamiento educativo. El diagnóstico debe ser realizado por un especialista como un neurólogo.