1. Génesis del sujeto y el objeto
en El perfume de Süskind.
Especialistas- Bisbal López, Lydia;
Pérez-Cuesta Llaneras, Lucas.
La corporeidad de los elementos en
Aub, Cortázar, García Márquez y
Süskind.
Especialistas- Goyarrola, Claudia;
Alberto de la Fuente, Óscar; Orell, Lucas.
3. “(...) Sorprendente intuición y penetración psicológica
de Patrick Süskind en su conocidísima novela El
perfume. Historia de un asesino” (Jorge Marugán
Kraus)
“La intuición clínica de Süskind nos acerca a los
secretos más ocultos y rechazados de nuestra propia
existencia” (Jorge Marugán Kraus)
4. “Llegó como un deshecho, (…), sólo el olor para
aferrarse a la vida en un desierto de estímulos” (Jorge
Marugán Kraus)
5. “(...) una sola forma de sentir que le impulsaba a una
única acción: oler” (Jorge Marugán Kraus)
6. “Un ser cuyo objeto es un puro objeto de la necesidad
percibido bajo el principio del todo-o-nada” (Jorge
Marugán Kraus)
8. “(…) un olor excepcional cuya pérdida hace sufrir a su
corazón” (Jorge Marugán Kraus)
9. “(…) agujero presente, real, imposible de llenar, en toda
imagen que identifique al yo” (Jorge Marugán Kraus)
11. “¡Ah, que violento sublime! […] este acto violento de exterminación de los
olores[…] Aquí sólo mandaba su voluntad, la voluntad del grande, del
magnífico, del singular Grenouille.” (Süskind, Patrick. El Perfume; la historia
de un asesino. Página 10. Barcelona; RBA editores).
12. “Catástrofe que lo expulsó de la montaña y lo devolvió al mundo.”
Marugán, Jorge. Génesis del sujeto y el objeto en El Perfume de Süskind. P.
173.
14. “Sí, deberían amarle cuando estuvieran dentro del círculo de su aroma, no sólo aceptarle como
su semejante, sino amarle con locura, con abnegación, temblar de placer, gritar, llorar
de gozo sin saber por qué, caer de rodillas bajo el frío intenso de Dios sólo al olerle a él,
Grenouille!” (Süskind, Patrick. El Perfume; la historia de un asesino. Página 137. Barcelona;
RBA editores).
15. “El inhumano Grenouille que nunca había sentido amor y nunca podría
inspirarlo, aquel día de marzo, ante la muralla de Grasse, amó y fuer invadido por la
bienaventura de su amor”. (Süskind, Patrick. El Perfume; la historia de un asesino.
Página 164. Barcelona;
RBA editores).
“Sólo podía soportar este odioso ruido con los dientes apretados y cuando se
hubo extinguido continuó todavía un rato inmóvil […] cómo si temiera que el
ruido pudiese volver del alguna parte”. (Süskind, Patrick. El Perfume; la historia de
un asesino. Página 164. Barcelona;
RBA editores).
17. Cuando despertó, el dinosaurio todavía
estaba allí.
-¿Olvida usted algo?
-¡Ojalá!
20. La uña del meñique derecho de Pedro Pérez, enterrado
ayer, empezó a crecer tan pronto como colocaron la losa. Como
el féretro era de mala calidad (pidieron el ataúd más barato) la
garfa no tuvo dificultad para despuntar deslizándose hacia la
pared de la casa.
21. Casi de un salto atravesó la garganta de Lucía, que
ni ¡ay! dijo, para tirarse hacia la de
Miguel, traspasándola.
Fue lo menos que pudo hacer el difunto: también es
cuerno la uña.
27. “El olor bajaba por la Rue
de la Seine”
(Süskind, 1987, p. 36)
“A los cincuenta metros
[el olor] dobló a la
derecha la esquina de la
Rue de Marais”
(Süskind, 1987, p. 36)