5. Conforme pasaba el tiempo,
el Águila recuperó sus alas
y fue puesta en libertad.
6. Al pasar unos días,
el Águila llevó a su salvador
una Liebre
como muestra de su gratitud.
7. Una Zorra que vio esta acción,
sermoneo al Águila diciendo:
8. "Amiga Águila, que tonta eres.
Yo le hubiera llevado tal obsequio
al cazador que te atrapó
para ganarme su voluntad.
Ahora, volverá tras de ti
para encadenarte."
9. El Águila muy molesta le dijo:
"Es de esperar que una Zorra
se conforme con servir a los malvados
para ganarse su voluntad.
Por lo que a mi respecta,
siempre serviré y atenderé a los buenos."