La germinación de una planta comienza cuando una semilla absorbe agua del suelo y se hincha. Luego, una pequeña raíz emerge de la semilla, seguida por el tallo y las primeras hojas. La germinación completa el proceso por el cual el embrión contenido en la semilla pasa de la vida latente a la vida activa a medida que las reservas nutritivas son movilizadas por las enzimas.
2. Cuando la semilla cae al suelo.
Primero absorbe el agua del suelo y se hincha.
Luego se abre y sale una pequeña raíz.
Por último, aparece el tallo, que lleva las primeras hojas de la nueva planta.
Después de todo esto, la planta crece toda su vida.
La germinación es el conjunto de fenómenos que ocurren cuando el embrión contenido
de la semilla pasa de la vida latente a la vida activa. Ocurre cuando las reservas nutritivas
son movilizadas por la acción de las diastasas, al ser puesta la semilla en condiciones de
temperatura y humedad adecuadas.
El embrión y el endosperma se hinchan; la gémula y la radícula comienzan su desarrollo:
la gémula se hunde en la tierra y la radícula se eleva por encima del suelo hasta ponerse
en contacto con la luz, con la atmósfera, y entonces forma la clorofila.
3. Importancia de las plantas!
Las plantas son la base de la pirámide alimenticia de todos los seres vivos. Desde hace mucho
tiempo la vida de los pueblos antiguos dependía de ellas. De las plantas conseguimos
alimentos, medicinas, fibras, colorantes y utensilios.
Los pueblos primitivos reconocían a las plantas por su olor y su sabor, ahora las podemos
observar, describir y clasificar; la ciencia que se dedica a eso es la botánica. En ella se estudia
su clasificación y ésta les da un nombre. Esto es porque no existe ningún ser vivo exactamente
igual a otro, pero sí hay muchos parecidos.
Con estos datos podemos agrupar las diferentes formas de vida que se relacionan entre sí y a
este grupo se le llama especie.
La especie es la unidad básica empleada en la clasificación de formas vivientes y está
constituida por los organismos que se parecen mucho entre ellos.
Si agrupamos a las especies semejantes obtenemos el género y la familia a los que
pertenecen; los géneros similares constituyen grupos mayores que se llaman órdenes, que
juntos forman las clases.
4. Proceso de Germinación.
Las semillas pueden mantenerse dormidas o inactivas hasta que las condiciones sean apropiadas para
germinar. Todas las semillas necesitan agua, oxígeno, y una temperatura apropiada para germinar. Algunas
semillas también requieren luz apropiada. Algunas germinan mejor con luz total mientras que otras
requieren oscuridad para germinar.
Cuando una semilla se expone a las condiciones apropiadas, agua y oxígeno son tomados a través de la
cáscara de la semilla. Las células del embrión comienzan a agrandarse. Entonces la cáscara de la semilla
empieza a abrirse y la raíz oradícula emerge primero, seguido por la plúmula que es como un brote muy
pequeño que contiene hojas y tallo.
Muchas cosas pueden causar una pobre germinación. Un riego muy frecuente hace que la planta no tenga
suficiente oxígeno. Plantar semillas demasiado profundo puede causar que la planta utilice toda su energía
almacenada, antes de alcanzar la superficie del suelo. Las condiciones secas causan que la planta no tenga
suficiente humedad para comenzar el proceso de germinación y para su crecimiento.
Algunas cáscaras de semillas son tan duras, que el agua y el oxígeno no pueden pasar a través de ellas
hasta que la capa se rompa. Humedecer o raspar las semillas ayudará a romper la cáscara de la semilla. Las
campanillas moradas y las semillas de acacia son ejemplos. Otras semillas necesitan ser expuestas a
temperaturas apropiadas. La semilla de manzana no germinará a menos que tenga temperaturas frías por
un período de tiempo.