Religion la resucitacion de Jesus y la vida de una mariposa.pdf
El imprudente y el fantasma
1. EL IMPRUDENTE Y EL FANTASMA
Vivía en una ciudad un joven que se lo pasaba observando la vida de los
demás. Una noche en que se hallaba en pleno ejercicio de esa mala
costumbre, se encontró con un hombre alto, delgado y de raro aspecto. El
joven impertinente trato disimuladamente de pasar por su lado y observarlo con
detenimiento, pero el desconocido se atravesó en la acera y le dijo:
- Ud., jovencito, que es hijo de buena familia, ¡como es posible que se
ponga a husmear en la vida ajena a estas horas de la noche?
El joven, sin saber que decirle, sorprendido con las manos en la masa,
temerosamente le repuso:
_ No, señor, yo no ando husmeando en la vida ajena; yo vengo de la
casa de mi madrina, quien se encuentra muy enferma y me mando a
buscar para que la acompañara.
Como me encontraba un poco fastidiado de tanto hablar con ella, a coger un
poco de aire para volver después a la casa de la comadre de mis padres.
_ Si es verdad todo lo que me a dicho, entonces venga conmigo….
El joven, asustado, pregunto al desconocido:
_ ¡Venga conmigo y no haga tantas preguntas!
El muchacho sospechando que se trataba de un ser sobrenatural y
maligno, haciendo de tripa corazones, sin perdida de tiempo, escapo a todo
correr. Pero al llegar al otro callejón de la ciudad, el fantasma volvió a salir a su
encuentro, pero ahora en forma de un gigante, y le grito:
_ ¿Como me vas a dejar abandonado, querido amigo?
El joven impertinente no pudo resistir aquel susto, y cayo al suelo sin
sentido. Al día siguiente lo recogieron unos vecinos medio muerto y lo llevaron
a su casa.
Cuando el joven volvió en si pudo darse cuenta de que estaba
acompañado de sus padres. Entonces no volvió a fisgonear en la vida ajena,
porque en este mundo todos somos pecadores y nadie es mejor que los
demás.