1. COMENTARIO DE “El martirio de San Felipe”
• IDENTIFICACIÓN: El martirio de San Felipe
• AUTOR: José de Ribera
• ESTILO:Arte barroco
• CRONOLOGÍA: 1639. Siglo XVII
• TIPOLOGÍA:Pintura religiosa
• DESCRIPCIÓN: Óleo sobre lienzo. Representa el martirio de San Felipe, que murió crucificado,
pero en lugar de clavado, fue atado. La composición se realiza utilizando líneas verticales y
horizontales (la cruz), más otras diagonales, como el cuerpo del santo y las que agrupan a los
distintos personajes. La luz la recibe directamente San Felipe en su cuerpo, en el que destaca el
estudio anatómico y la expresión serena del rostro, dando a entender que acepta el martirio al que
está siendo sometido.
El cuerpo del santo, así como los de sus verdugos, cuyos músculos resaltan por el esfuerzo de elevar
al santo en la cruz, están tratados con gran naturalismo. Muchos de los personajes aparecen en
escorzo.
El cuadro pertenece a la segunda etapa de la obra de Ribera, a partir de 1631, cuando abandona los
fondos negros de influencia caravaggiesca de su primera etapa, y los sustituye por cielos plateados
de influencia veneciana. Además, observamos los estudios de luces y sombras y el naturalismo
propios del pintor.
• CONTEXTO HISTÓRICO: El siglo XVII en España fue un periodo de decadencia y debilidad. La
mala gestión de los monarcas Felipe III, Felipe IV y Carlos II (Austrias menores) hizo que se viviera
una crisis tanto política, como económica y social.
Sin embargo, en este contexto de crisis generalizada, hubo un ámbito que brilló con luz propia: la
cultura. De hecho, el siglo XVII es considerado como el Siglo de Oro de la cultura española.
En el ámbito pictórico, la corte, ubicada en Madrid, fue el núcleo de máximo interés, en torno al cual
se agruparon los más geniales pintores de este momento, y en donde confluyeron todas las
aportaciones llegadas de otros países europeos, ya que los Habsburgo tenían una importante
colección de pintura que siguió creciendo a lo largo de este siglo.
• VALORACIÓN PERSONAL
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2. COMENTARIO DE “El patizambo”
• IDENTIFICACIÓN: El patizambo
• AUTOR: José de Ribera
• ESTILO:Arte barroco
• CRONOLOGÍA: 1642. Siglo XVII
• TIPOLOGÍA:Pintura
• DESCRIPCIÓN: Óleo sobre lienzo. Es un retrato. Esta obra muestra una búsqueda del realismo.
Representa a un niño tullido que se dirige al espectador, pícaramente, con un ligero escorzo, sin
ocultar su deformidad física y sonriendo mostrando sus dientes ennegrecidos. El fondo un paisaje.
Este cuadro refleja la evolución de la pintura de Ribera, que ha pasado de fondos oscuros del
tenebrismo a los paisajes luminosos. Recuerda a lo que hará Velázquez con sus bufones,
representando gente con deficiencias psíquicas o físicas con la mayor dignidad posible.
• CONTEXTO HISTÓRICO: El siglo XVII en España fue un periodo de decadencia y debilidad. La
mala gestión de los monarcas Felipe III, Felipe IV y Carlos II (Austrias menores) hizo que se viviera
una crisis tanto política, como económica y social.
Sin embargo, en este contexto de crisis generalizada, hubo un ámbito que brilló con luz propia: la
cultura. De hecho, el siglo XVII es considerado como el Siglo de Oro de la cultura española.
En el ámbito pictórico, la corte, ubicada en Madrid, fue el núcleo de máximo interés, en torno al cual
se agruparon los más geniales pintores de este momento, y en donde confluyeron todas las
aportaciones llegadas de otros países europeos, ya que los Habsburgo tenían una importante
colección de pintura que siguió creciendo a lo largo de este siglo.
• VALORACIÓN PERSONAL
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3. COMENTARIO DE “El triunfo de Baco o Los Borrachos”
• IDENTIFICACIÓN: El triunfo de Baco o Los Borrachos
• AUTOR: Diego de Velázquez
• ESTILO:Arte barroco
• CRONOLOGÍA: 1628-29. Siglo XVII
• TIPOLOGÍA:Pintura
• DESCRIPCIÓN: Óleo sobre lienzo. Aquí, Velázquez, funde el mundo mitológico con el de
los personajes más populares, demostrando que conoce la mitológica y el tratamiento del
desnudo clásico, y por otro recrea el mundo de los pícaros. Deja atrás el tenebrismo.
Continúa el interés por los objetos cotidianos: cacharros, vasijas, etc. La única concesión al
mundo clásico está en los desnidos del dios y en uno de sus acompañantes.
Desde el punto de vista estructural, este cuadro aparece dividido en partes desiguales, pero
armónicas, un grupo a la izquierda integrado por cinco figuras, en cuyo centro está Baco, y
otras cuatro a la derecha, en rombo.
Se ha dicho que el verdadero protagonista del cuadro es el vino y la alegría que provoca el
ingerirlo.
• CONTEXTO HISTÓRICO: El siglo XVII en España fue un periodo de decadencia y
debilidad. La mala gestión de los monarcas Felipe III, Felipe IV y Carlos II (Austrias
menores) hizo que se viviera una crisis tanto política, como económica y social.
Sin embargo, en este contexto de crisis generalizada, hubo un ámbito que brilló con luz
propia: la cultura. De hecho, el siglo XVII es considerado como el Siglo de Oro de la cultura
española.
En el ámbito pictórico, la corte, ubicada en Madrid, fue el núcleo de máximo interés, en
torno al cual se agruparon los más geniales pintores de este momento, y en donde
confluyeron todas las aportaciones llegadas de otros países europeos, ya que los Habsburgo
tenían una importante colección de pintura que siguió creciendo a lo largo de este siglo.
• VALORACIÓN PERSONAL
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4. • COMENTARIO DE “La fragua de Vulcano”
• IDENTIFICACIÓN: La fragua de Vulcano
• AUTOR: Diego de Velázquez
• ESTILO:Arte barroco
• CRONOLOGÍA: 1630. Siglo XVII
• TIPOLOGÍA:Pintura mitológica.
• DESCRIPCIÓN: Óleo sobre lienzo. Obra mitológica. Capta el instante en que Vulcano,
dios del fuego y de la metalurgia, es interrumpido por Apolo para comunicarle la infidelidad
de que es objeto por parte de Venus. Velázquez elige el momento de mayor tensión y
dramatismo. Todos los personajes muestran en sus rostros la sorpresa que les causa la
noticia. Su paleta de colores se ha aclarado. Da los primeros pasos hacia la construcción de
la perspectiva aérea (el joven del fondo se le representa más impreciso, en contraste con los
personajes del primer plano más nítidos) Destaca el tratamiento del hierro candente y el
brillo metálico de la corza.
En la realización de esta obra, Velázquez aplicó todo lo aprendido durante un viaje a Italia
(1629-31), donde conoció las obras de Miguel Ángel, Rafael, etc. Se puso en contacto con el
clasicismo y se interesó por la pintura veneciana. Abandonó los tonos oscuros y se interesó
por el estudio del paisaje, la captación de la atmósfera, el desnudo y su pincelada se hizo
más fluida.
• CONTEXTO HISTÓRICO: El siglo XVII en España fue un periodo de decadencia y
debilidad. La mala gestión de los monarcas Felipe III, Felipe IV y Carlos II (Austrias
menores) hizo que se viviera una crisis tanto política, como económica y social.
Sin embargo, en este contexto de crisis generalizada, hubo un ámbito que brilló con luz
propia: la cultura. De hecho, el siglo XVII es considerado como el Siglo de Oro de la cultura
española.
En el ámbito pictórico, la corte, ubicada en Madrid, fue el núcleo de máximo interés, en
4

5. torno al cual se agruparon los más geniales pintores de este momento, y en donde
confluyeron todas las aportaciones llegadas de otros países europeos, ya que los Habsburgo
tenían una importante colección de pintura que siguió creciendo a lo largo de este siglo.
• VALORACIÓN PERSONAL
COMENTARIO DE “Las Meninas”
• IDENTIFICACIÓN: Las Meninas
• AUTOR: Diego de Velázquez
• ESTILO:Arte barroco
• CRONOLOGÍA: 1656. Siglo XVII
• TIPOLOGÍA:Pintura
• DESCRIPCIÓN: Óleo sobre lienzo. Cuadro de gran formato, como todas las últimas obras
de Velázquez. La pincelada es totalmente suelta. Si nos aproximamos mucho al lienzo sólo
vemos una maraña de colores y manchas que cobran vida a medida que nos alejamos de él.
Es un retrato colectivo. Es su obra cumbre y más celebre.
Consiguió reflejar, casi de forma fotográfica, una escena de movimiento paralizado, como se
refleja en las miradas y actitudes de los retratados. Casi todos los personajes miran hacia los
reyes. El espectador se sitúa en el lugar que teóricamente ocupa la pareja real.
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6. En primer plano, aparece la infanta Margarita acompañada por dos de sus meninas
(Agustina Sarmiento e Isabel de Velasco), y dos enanos (Maribárbola y Nicolás Pertusato)
con el perro. Posteriormente se encuentra Velázquez, con la paleta en la mano.
En un nivel más alejado están la camarera mayor y un guardadamas.
Más al fondo se encuentran el aposentador de la Corte y el espejo en que se reflejan los
reyes (Felipe IV y Mariana de Austria)
La disposición escalonada de las figuras crean una sensación de profundidad espacial, que
también es acentuada por la puerta abierta al fondo dando sensación de continuidad. La
figura del aposentador es el punto de fuga.
Velázquez también utiliza la perspectiva aérea, así, difumina los contornos de las figuras
según se alejan de los retratados.
Para unos, Velázquez pinta a los reyes que son interrumpidos por la infanta; para otros, son
los monarcas los que interrumpen. La pincelada es suelta.
Los focos de luz son dos: el procedente de la ventana que se encuentra a la derecha y el que
llega desde la puerta abierta en la que se recorta la figura del aposentador del palacio.
Aunque juega con los contrastes lumínicos no podemos hablar de tenebrismo, ya que las
transiciones son más suaves.
La aparición de Velázquez en el cuadro se ha interpretado, como el triunfo de la pintura y el
reconocimiento social del artista. En el pecho aparece la cruz de la Orden de Santiago, que
según la leyenda fue pintada por el propio rey.
• CONTEXTO HISTÓRICO: El siglo XVII en España fue un periodo de decadencia y
debilidad. La mala gestión de los monarcas Felipe III, Felipe IV y Carlos II (Austrias
menores) hizo que se viviera una crisis tanto política, como económica y social.
Sin embargo, en este contexto de crisis generalizada, hubo un ámbito que brilló con luz
propia: la cultura. De hecho, el siglo XVII es considerado como el Siglo de Oro de la cultura
española.
En el ámbito pictórico, la corte, ubicada en Madrid, fue el núcleo de máximo interés, en
torno al cual se agruparon los más geniales pintores de este momento, y en donde
confluyeron todas las aportaciones llegadas de otros países europeos, ya que los Habsburgo
tenían una importante colección de pintura que siguió creciendo a lo largo de este siglo.
• VALORACIÓN PERSONAL
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7. COMENTARIO DE “La Sagrada Familia del pajarito”
• IDENTIFICACIÓN: La Sagrada Familia del pajarito
• AUTOR: Bartolomé Esteban Murillo
• ESTILO:Arte barroco
• CRONOLOGÍA: Hacia 1650 Siglo XVII
• TIPOLOGÍA:Pintura religiosa
• DESCRIPCIÓN: Óleo sobre lienzo. Destaca el tratamiento del tema, pues se representa a la
Sagrada Familia como si fuera gente corriente (sin atributos sagrados que los identifiquen),
del pueblo en una escena de género. La Virgen aparece tejiendo, y la manera de representar
la velocidad del huso, recordaría a la rueca de Las Hilanderas de Velázquez. San José
aparece jugando con el Niño Jesús, que sostiene en su mano un pajarito (de ahí el nombre
del cuadro).
El fondo también es sencillo, prácticamente neutro, es decir, sin referencias espaciales.
La luz incide sobre el Niño y el perro, quedando el resto más oscuro.
• CONTEXTO HISTÓRICO: El siglo XVII en España fue un periodo de decadencia y
debilidad. La mala gestión de los monarcas Felipe III, Felipe IV y Carlos II (Austrias
menores) hizo que se viviera una crisis tanto política, como económica y social.
Sin embargo, en este contexto de crisis generalizada, hubo un ámbito que brilló con luz
propia: la cultura. De hecho, el siglo XVII es considerado como el Siglo de Oro de la cultura
española.
En el ámbito pictórico, la corte, ubicada en Madrid, fue el núcleo de máximo interés, en
torno al cual se agruparon los más geniales pintores de este momento, y en donde
confluyeron todas las aportaciones llegadas de otros países europeos, ya que los Habsburgo
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8. tenían una importante colección de pintura que siguió creciendo a lo largo de este siglo.
• VALORACIÓN PERSONAL
COMENTARIO DE “Niño espulgándose”
• IDENTIFICACIÓN: Niño espulgándose
• AUTOR: Bartolomé Esteban Murillo
• ESTILO:Arte barroco
• CRONOLOGÍA: 1645-50. Siglo XVII
• TIPOLOGÍA:Pintura
• DESCRIPCIÓN: Óleo sobre lienzo. Es una obra realista que retrata a un joven harapiento,
espulgándose. A pesar de la crudeza del tema, Murillo lo trata evitando ahondar en la
pobreza, la soledad o el dolor. Alrededor del joven se despliegan objetos de uso cotidiano y
restos de comida que, en sí mismos, componen un bodegón. La luz que recibe el cuadro
procede directamente de la ventana situada a la izquierda e incide sobre el mendigo,
quedando el resto de la estancia en la oscuridad.
• CONTEXTO HISTÓRICO: El siglo XVII en España fue un periodo de decadencia y
debilidad. La mala gestión de los monarcas Felipe III, Felipe IV y Carlos II (Austrias
menores) hizo que se viviera una crisis tanto política, como económica y social.
Sin embargo, en este contexto de crisis generalizada, hubo un ámbito que brilló con luz
propia: la cultura. De hecho, el siglo XVII es considerado como el Siglo de Oro de la cultura
española.
En el ámbito pictórico, la corte, ubicada en Madrid, fue el núcleo de máximo interés, en
torno al cual se agruparon los más geniales pintores de este momento, y en donde
confluyeron todas las aportaciones llegadas de otros países europeos, ya que los Habsburgo
tenían una importante colección de pintura que siguió creciendo a lo largo de este siglo.
• VALORACIÓN PERSONAL
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