La historia trata de un ciego y un cojo que se encuentran en la orilla de un río. El ciego quería cruzar el río pero no podía ver por dónde ir, mientras que el cojo conocía el mejor lugar para cruzar pero le preocupaba resbalar con su única pierna. El cojo tuvo la idea de que cruzaran juntos, con el ciego apoyando al cojo y el cojo guiando al ciego, lo que les permitió cruzar el río sin problemas.