Rosario

GUÍA PARA ROSARIO
Rosario a la luz del mensaje de Cuaresma 2012
INDICACIONES
1°. Reunidos en torno a una imagen de la Virgen María de Guadalupe y al lado una imagen del San-
to Padre Benedicto XVI con algunas velas o veladoras encendidas, el grupo de vecinos o familias
se disponen a rezar el santo rosario a María de Guadalupe. Para introducir en un clima de oración
es conveniente entonar un canto mariano.
2°. En el primer momento, leer la parte introductoria del resumen del mensaje para la Cuaresma
2012, en seguida se hace la proclamación de la palabra de Dios, siguiendo el esquema.
3°- Después de escuchar y reflexionar la Palabra, se leerá un número de la Exhortación Pastoral
Que en Cristo nuestra paz México tenga vida digna, luego se inicia el Santo Rosario como de cos-
tumbre, enunciando los misterios correspondientes (Ave María, Dios Salve y Padre Nuestro).
4° Se sugiere que entre los misterios se entonen un canto mariano.
5° Al término de los cinco misterios y de la salve, se hace la letanía.
6° Al terminar la letanía se sugiere que todos digan la oración por la paz.
Queridos y queridas hermanos y hermanos en Cristo, en el mensaje de cuaresma para este año
2012, el Santo padre Benedicto XVI nos invita reflexionar sobre el corazón de la vida cristiana: La
caridad. Tomando como base el texto bíblico “Fijémonos los unos a los otros para estímulo de la ca-
ridad y las buenas obras” (Hb 10, 24). Con ello, el Papa invita y motiva a todos los fieles a mantener
siempre la atención al otro, la reciprocidad y la santidad.
El Santo Padre propone algunas reflexiones a la luz de un breve texto bíblico tomado de la Carta a
los Hebreos: “Fijémonos los unos en los otros para estímulo de la caridad y las buenas obras” (10,
24). Y explica que el fruto de acoger a Cristo es una vida que se despliega según las tres virtudes
teologales: se trata de acercarse al Señor “con corazón sincero y llenos de fe” (v. 22), de mantener-
nos firmes “en la esperanza que profesamos” (v. 23), con una atención constante para realizar junto
con los hermanos “la caridad y las buenas obras” (v. 24). Mientras recuerda que para sostener esta
conducta evangélica es importante participar en los encuentros litúrgicos y de oración de la comuni-
dad, mirando a la meta escatológica: la comunión plena en Dios (v. 25).

En el primer punto subtitulado “Fijémonos”: la responsabilidad para con el hermano; Benedicto XVI
afirma que también hoy resuena con fuerza la voz del Señor que nos llama a cada uno de noso-
tros a hacernos cargo del otro. Hoy Dios nos sigue pidiendo que seamos “guardianes” de nuestros
hermanos (cf. Gn 4, 9), que entablemos relaciones caracterizadas por el cuidado recíproco, por la
atención al bien del otro y a todo su bien. Porque “el gran mandamiento del amor al prójimo exige y
urge a tomar conciencia de que tenemos una responsabilidad respecto a quien, como yo, es criatura
e hijo de Dios: el hecho de ser hermanos en humanidad y, en muchos casos, también en la fe, debe
llevarnos a ver en el otro a un verdadero alter ego, a quien el Señor ama infinitamente”.
Con motivo de su visita, vamos a unirnos a él en oración, invocando a María de Guadalupe con el
Santo rosario, para que su venida a México traiga mucha esperanza, paz y amor entre toda nuestra
Iglesia mexicana y que nuestra sociedad tan dañada por la violencia, en este tiempo de Cuaresma
se motive al perdón encaminándose a la reconciliación en comunión y unidad fraterna.

PRIMER MSITERIO
Se menciona el misterio correspondiente…
Texto bíblico Lc 6, 41-42.
¿Y por qué te fijas en la pelusa que tiene tu hermano en un ojo si no eres consciente de la viga que
tienes en el tuyo? Hipócrita, saca primero la vida de tu propio ojo, y entonces verás con claridad y
podrás sacar la pelusa del ojo de tu hermano.
Reflexión, y silencio
Exhortación Pastoral Que en Cristo nuestra paz, México tenga vida digna n° 189: Consideramos que
lo primero que hay que hacer para superar la crisis de inseguridad y de violencia es la renovación de
los mexicanos. México será nuevo sólo si nosotros nos renovamos. La novedad de nuestra vida en
Cristo dará origen a las formas nuevas de relacionarnos con las personas con las que convivimos
día a día, nos permitirán construir comunidades sanas y justas, nos capacitará para solucionar de
manera pacífica los conflictos y para ser misericordiosos con los que sufren.
Aves marías, Salves, padres nuestros y gloria al padre.
Canto Mariano
SEGUNDO MISTERIO
Se menciona el misterio correspondiente
Texto bíblico: Sal 119, 66-69.
Enséñame a conocer y a juzgar, porque confío en tus mandatos.
Antes de mis pruebas anduve errante, pero ahora guardo tus palabras.
Tú que eres bueno y haces beneficios, enséñame tus estatutos.
Los soberbios me han calumniado, pero de corazón sigo en tus mandamientos.
Reflexión y silencio
Exhortación Pastoral Que en Cristo nuestra paz, México tenga vida digna n° 190: Hoy como nunca
es una exigencia invertir todos los recursos a nuestro alcance en la formación de las personas y en
la promoción de condiciones de vida digna para todos.
Canto Mariano
TERCER MISTERIO
Texto bíblico: Lc 10 30-
Jesús empezó a decir: Bajó un hombre de Jerusalén Jericó, y cayó en manos de bandidos que lo
despojaron de todo. Y se fueron después de haberlo molido a golpes, dejándolo medio muerto. Por
casualidad bajaba por ese camino un sacerdote, quién al verlo pasó por el otro lado del camino y
pasó de largo. Lo mismo hizo un levita que llegó a ese lugar, lo vio, tomó el otro lado del camino y
pasó de largo. Pero llegó cerca de él un samaritano que iba de viaje, lo vio y se compadeció. Se le
acercó, curó sus heridas con aceite y vino y se las vendó. Después lo puso en el mismo animal que
él montaba, lo condujo a un hotel y se encargó de cuidarlo. Al día siguiente, sacó dos monedas y
se las dio al hotelero diciéndole: Cuídalo. Lo que gastes demás, yo te lo pagaré a mi vuelta. Jesús
entonces preguntó: Según tu parecer, ¿Cuál de estos tres se portó como prójimo del hombre que
cayó en manos de los salteadores? Él contestó: El que se mostró compasivo con él. Y Jesús le dijo,
vete y haz lo mismo.

Exhortación Pastoral Que en Cristo nuestra paz, México tenga vida digna n° 197: Las personas y las
familias no viven aisladas, viven en comunidad, compartiendo con otras familias y personas, no sólo
el tiempo, sino también el espacio. La vida comunitaria es el escenario concreto de la sociabilidad,
en ella se forja y se fortalece el tejido social, el sentido de pertenencia y se desarrollan también los
mecanismos de control social que se hacen cargo de las conductas discordantes con los grandes
ideales y aspiraciones de quienes comparten la existencia en los escenarios reales de la vida.
Canto Mariano
CUARTO MISTERIO
Texto bíblico: Ga 6, 1-2:
Hermanos, en el caso de que alguien caiga en alguna falta, ustedes, que son espirituales, ende-
récenlo con espíritu de bondad Cuídate: tú también puedes ser tentado. Ayúdense mutuamente a
llevar sus cargas y así cumplirán la ley de Cristo.
Exhortación Pastoral Que en Cristo nuestra paz, México tenga vida digna n° 195:
La formación de la persona, de su mente y de su corazón, necesaria para la erradicación de la vio-
lencia, requiere instituciones que expresen y consoliden los valores de la paz. La institución más
inmediata al ser humano es la familia; ella es el núcleo natural y fundamental de la sociedad.
Canto Mariano
QUINTO MISTERIO
Texto bíblico: Heb 10, 24-25
Sigamos profesando nuestra esperanza sin que nada nos pueda conmover, ya que es digno de
confianza Aquel que se comprometió. Que cada uno descubra en el ejemplo de los demás nuevos
motivos de amar y de hacer el bien.
Exhortación Pastoral Que en Cristo nuestra paz, México tenga vida digna n° 209:
La respuesta a los desafíos de la inseguridad y la violencia no puede ser sólo responsabilidad de
la autoridad pública, sino también de los ciudadanos que asumen su responsabilidad social y que,
de manera individual o asociados, asumen sus compromisos y obligaciones para con los miembros
de la sociedad a la que pertenecen constituyendo lo que llamamos la sociedad civil responsable.
Canto Mariano
Tres Aves Marías y la Salve
Letanía de todos los Santos Mexicanos
Santos Mexicanos, elegidos por la gracia de Dios para iluminar la Iglesia universal.
Rueguen por nosotros.
Santos Mexicanos, que ya como niños y jóvenes fueron dóciles a las inspiraciones del Espíritu San-
to.

Santos Mexicanos, que ya en su juventud tuvieron un gran amor a Jesús en la Eucaristía.
Santos Mexicanos, que purificaron sus almas por la frecuente confesión.
Santos Mexicanos, que vivieron en pobreza, buscando además voluntaria mortificación.
Santos Mexicanos, que se consagraron desde niños a María Santísima.
Santos Mexicanos, que en privado y en su comunidad parroquial rezaron devotamente el Santo
Rosario.
Santos Mexicanos, que con gran favor atendieron a los pobres y a los enfermos.
Santos Mártires Mexicanos, que promovieron con celo la Acción Católica Mexicana.
Santos Mártires Mexicanos, que siguieron con alegría y fidelidad la llamada de Cristo Rey a una
entrega total. Rueguen por nosotros.
Santos Mártires Mexicanos Sacerdotes, que después de la ordenación sacerdotal maduraron en su
amistad con Jesucristo.
Santos Mártires Mexicanos Sacerdotes y Seglares, que promovieron juntos el amor a Jesús, a María
y a la Iglesia. Rueguen por nosotros.
Santos Mártires Mexicanos, que con el inicio de la cruel persecución sufrieron penas espirituales y
físicas semejantes a las de Cristo.
Santos Mártires Mexicanos, que fueron perseguidos con sus Obispos, y a veces no tuvieron dónde
recostar su cabeza (cf.Mt. 8,20)
Santos Mártires Mexicanos, que por perseverar al lado de sus fieles estuvieron continuamente en
peligro de muerte. Rueguen por nosotros.
Santos Mártires Mexicanos, que pidieron de antemano la gracia del martirio por el bien de la Iglesia
y de la Patria. Rueguen por nosotros.
Santos Mártires Mexicanos, que venciendo las tentaciones del maligno permanecieron fieles al Papa
y a sus Obispos. Rueguen por nosotros.
Santos Mártires Mexicanos, de los que varios de ustedes fueron traicionados por alguno de los mis-
mos católicos. Rueguen por nosotros.
Santos Mártires Mexicanos Seglares, que defendieron a sus sacerdotes y al lado de ellos sufrieron
el martirio. Rueguen por nosotros.
Santos Mártires Mexicanos Seglares, que por su entrega generosa se han convertido en ejemplo
luminoso para la vida de todos los seglares mexicanos.
Santos Mártires Mexicanos, que fueron condenados sin juicio previo y sin ninguna culpa que mere-
ciera castigo. Rueguen por nosotros.
Santos Mártires Mexicanos, de los que varios de ustedes sufrieron antes del martirio injurias y tortu-
ras por odio a la fe. Rueguen por nosotros.

Santos Mártires Mexicanos, que antes de morir perdonaron a sus verdugos.
Santos Mártires Mexicanos, que no son sólo gloria de la Iglesia mexicana, sino también los verda-
deros héroes de la Patria.
Santos Mártires Mexicanos, para que sus vidas sean un elocuente ejemplo para nuestros jóvenes.
Santos Mártires Mexicanos, para que por su intercesión la Iglesia de México pueda esperar una
siempre mayor libertad religiosa.
Santos Mártires Mexicanos, para que en México y en toda América crezca el respeto a los derechos
divinos y humanos. Rueguen por nosotros.
Santos Mártires Mexicanos, para que en México y en toda América se respete el derecho a la vida
especialmente del niño no nacido.
Santos Mártires Mexicanos, para que en México y en toda América se respete el derecho primordial
de los padres de familia sobre la educación de sus hijos.
Santos Mártires Mexicanos, para que en las cuestiones económicas el criterio fundamental sea la
dignidad de la persona y la solidaridad.
Santos Mártires Mexicanos, para que todos los mexicanos compartamos generosamente nuestros
bienes con los hermanos que sufren.
Santos Mártires Mexicanos, para que en México y en toda América surjan fervorosas y fieles voca-
ciones al sacerdocio y a la vida consagrada.
Santos Mártires Mexicanos, para que por su intercesión crezca en todos el amor a Cristo Rey y a
Santa María de Guadalupe.
Santos Mártires Mexicanos, para que por este amor a Jesús y a María recibamos el don de una
muerte bendecida. Rueguen por nosotros.
Santos Mártires Mexicanos, para que en la presencia de Dios podamos gozar eternamente también
de su gloriosa compañía.
Todos los Santos y Beatos Mexicanos.
Reina del Santísimo Rosario.
TODOS: Ruega por nosotros.
GUÍA: ¡Viva la gracia!
TODOS:¡Muera el pecado!
GUÍA: Ave María Purísima.

TODOS: En gracia de Dios concebida.

GUÍA: Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo.
TODOS: Perdónanos Señor.
TODOS: Óyenos Señor.
TODOS: Ten piedad y misericordia de nosotros.
GUÍA: Bajo tu amparo nos acogemos, Santa Madre de Dios, no desprecies las súplicas que te di-
rigimos en nuestras necesidades, antes bien, líbranos de todos los peligros, Oh Virgen gloriosa y
bendita. Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios.
TODOS: Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.
GUÍA: Oh Dios, cuyo Unigénito Hijo, con su vida, muerte y resurrección, nos alcanzó el premio de
la vida eterna; concédenos, a los que recordamos estos misterios del Santo Rosario, imitar lo que
contienen y alcanzar lo que prometen. Por el mismo Jesucristo Nuestro Señor.
TODOS: Amén.
ORACIÓN POR LA PAZ
Señor Jesús, Tú eres nuestra paz,
mira nuestra Patria dañada por la violencia
y dispersa por el miedo y la inseguridad.
Consuela el dolor de quienes sufren.
Da acierto a las decisiones de quienes nos gobiernan.
Toca el corazón de quienes olvidan que somos hermanos
y provocan sufrimiento y muerte.
Dales el don de la conversión.
Protege a las familias,
a nuestros niños, adolescentes y jóvenes.
a nuestros pueblos y comunidades.
Que como discípulos misioneros tuyos,
ciudadanos responsables,
sepamos ser promotores de justicia y de paz,
para que en Ti, nuestro pueblo tenga vida digna. AMEN.
María, Reina de la paz, ruega por nosotros

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