2. Hablo… luego existo
• Cuando hablamos (sea cual fuere el contenido de lo dicho) las
palabras nos dicen algunas cosas sobre quiénes somos, cuál es
nuestro origen geográfico, cuál es nuestro sexo y edad, a qué grupo
social pertenecemos, cuánto capital cultural poseemos, cómo
entendemos y designamos el mundo...
• Los usos del lenguaje constituyen un espejo diáfano de la identidad
sociocultural de las personas ya que, al ser usadas, las palabras
reflejan cómo somos, cómo pensamos y cómo es y cómo está
organizada la vida cotidiana en una cultura y en una época
determinadas.
3. Hablo… luego existo
• Somos lo que decimos y hacemos
al decir. Y somos lo que nos dicen y
nos hacen al decirnos cosas.
• Las palabras importan. Aunque
creamos que estamos utilizando el
lenguaje, es el lenguaje quien nos
utiliza. De forma invisible moldea
nuestra forma de pensar sobre las
demás personas, sus acciones y el
mundo en general.
4. Hablo… luego existo
• La lengua es un medio a través del cual
las personas se relacionan consigo
mismas, con el mundo y con las demás
personas. El lenguaje es el medio de
comunicación que debe permitirnos
expresar lo que pensamos y sentimos.
Cuanto mejor nos expresemos, mejor
nos comunicaremos.
5. Hablo… luego existo
• Llamamos lenguaje sexista a todas aquellas expresiones del lenguaje
y la comunicación humana que invisibilizan a las mujeres, las
subordinan, o incluso, las humillan y estereotipan. La Lengua es una
expresión del pensamiento, y por tanto cada persona habla y se
expresa como piensa. Si se expresa de una manera machista y sexista
es porque piensa así, ya sea porque expresamente opina de esa
manera, ya sea porque ha interiorizado el estilo de vida
androcentrista y patriarcal (que tiene al hombre como eje del
universo), o ya sea porque no se ha parado a reflexionar que los
cambios van por delante de los diccionarios, que también son
sexistas. El sexismo sobrevalora todo lo masculino e invisibiliza lo
femenino.
7. Lenguaje sexista
• La sociedad está compuesta por
aproximadamente igual número de
mujeres que de hombres. No
nombrar a las mujeres en discursos,
textos e ilustraciones que hacen
referencia al quehacer humano, a
grupos sociales o a la sociedad, es
invisibilizarlas. Esta acción es sexista
porque sobrevalora lo masculino, a la
vez que desvaloriza lo femenino y a
las mujeres. Las desconoce como
personas.
8. Concepto de Sexismo
• Es el “conjunto de todos y cada
uno de los métodos empleados
en el seno del patriarcado para
poder mantener en situación de
inferioridad, subordinación y
explotación al sexo dominado: el
femenino” (Victoria Sau; 2000).
9. Lenguaje sexista
• El lenguaje sexista lo encontramos en muchas partes. No hace falta sino
mirar a nuestro alrededor para observar imágenes, palabras, mensajes…,
que siguen discriminando a la mujer.
• La lengua contribuye, involuntariamente, a elaborar una imagen negativa
de la mujer y a perpetuar la situación de postergación del sexo femenino.
La lengua española sigue transmitiendo mensajes que refuerzan la
posición tradicional de la mujer, reproduciendo y reforzando la
discriminación a través de los estereotipos y los clichés.
10. Lenguaje sexista
• El lenguaje sexista excluye a las mujeres,
dificulta su identificación o las asocia a
valoraciones peyorativas. Su uso es
discriminatorio y parcial e impone barreras
arbitrarias e injustas al desarrollo personal y
colectivo. Si tenemos en cuenta que
hombres y mujeres tenemos el mismo
derecho a ser y a existir, el hecho de no
“nombrar” esta diferencia, es no respetar
uno de los derechos fundamentales: el de la
existencia y la representación de esa
existencia en el lenguaje.
11. El sexismo y la exclusión en el lenguaje
• Son expresiones de convenciones
sociales construidas en torno a las
experiencias, mensajes y discursos que
se gestan en una sociedad y
estigmatizan las formas de ser y actuar
de mujeres y hombres. Tales
concepciones son recreadas en la
comunicación cotidiana, generalmente
sin tener conciencia de ello, por lo que
circulan como expresiones del sentido
común. Por ello, es necesario cobrar
conciencia de los usos sexistas y
excluyentes del lenguaje y promover
formas alternativas de expresión y
comunicación
12. Aclaremos que…
• En el lenguaje, la distinción entre lo
femenino y masculino, por defecto,
no es indicativa de sexismo ni de
discriminación, ya que en ocasiones
resulta necesario nombrar
separadamente a las mujeres de los
hombres. El sexismo se produce
cuando estas distinciones se tornan
jerárquicas y excluyentes, valorando
a una de las partes sobre la otra por
su sexo.
14. Las siguientes recomendaciones tienen la intención de
transformar los usos sexistas del lenguaje, e introducir nuevas
formas de comunicación, afines con las nuevas realidades de
hombres y mujeres del siglo XXI