Virginia-Satir (1).pptx Autoestima y desarrollo personal
18-Apropiándonos de las Bendiciones.doc
1. Apropiándonos de las Bendiciones
1.- Versículo para Memorizar:
"Acontecerá que si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra sus
mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones
de la tierra" (Deuteronomio 28:1)
2.- Enseñanza Bíblica:
Dios no creó para ser bendecidos. Es un principio que aprendemos cada vez que vamos a las
Escrituras. Quienes finalmente decidimos romper esas Bendiciones y mantenernos en un estado de
Maldición, somos usted y yo cuando nos dejamos arrastrar por las trampas del mundo y de Satanás.
Sin embargo cuando renunciamos a los factores de Maldición, vienen las Bendiciones. Es un hecho.
Así lo podemos comprobar cuando leemos el capítulo 28 del libro del Deuteronomio, especialmente
los versículos desde el 2 al 18.
Ahora le invito para que juntos estudiemos el siguiente texto: "Acontecerá que si oyeres
atentamente la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra sus mandamientos
que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la
tierra" (Deuteronomio 28:1)
Si analiza cuidadosamente descubrirá que se nos llama a estar, número uno, atentos a la voz de
Dios; número dos, volvernos a Dios—lo que implica renunciar a toda atadura con el ocultismo--, y
número tres, tener una disposición de corazón para cumplir los mandamientos, preceptos que
hallamos en la Palabra.
Cuando obramos en consonancia con lo dispuesto por el Señor para nosotros, las circunstancias
que nos fueron adversas, inmediatamente cambiarán tal como lo enseña el capítulo 28 del
Deuteronomio. Leemos allí que:
a.- Vendrán las Bendiciones (versículo 1)
b.- Vendrá la prosperidad (versículos 3-5, 8, 11)
c.- Dios peleará nuestras batallas (versículo 7)
2.1.- ¿Cómo es posible que vengan las Bendiciones?
Romper con la cadena de Maldición y abrirnos para que vengan las Bendiciones es posible gracias a
la obra que hizo el Señor Jesús en la cruz. Por Su sacrificio vicario podemos gozar de las
Bendiciones.
Ahora, hay algo interesante aquí: Quien ha estado por años sumido en ataduras, posiblemente no
tome conciencia rápido acerca de la realidad de ser bendecido cuando se somete a Dios. Es más,
puede que le tome tiempo acostumbrarse a la libertad a la que fue llamado. A este hecho debemos
sumar el que Satanás sembrar en su mente la idea de que aún se encuentra maldecido y que no
importa lo que haga, deberá acarrear con las consecuencias.
En todos los casos es necesario que la persona recuerde una y otra vez, y de ser necesario lo repita
en voz alta, que es libre de las Maldiciones por el sacrificio del Señor Jesús en la cruz.
2.2.- Herederos de las Bendiciones
Aunque no percibimos las Bendiciones de inmediato, es necesario conservar la plena confianza en
el Señor. No podemos olvidar que Jesucristo nos redimió de toda Maldición (Gálatas 3:13, 14).
Por esta razón y como lo leemos en la Biblia, somos herederos de las Bendiciones que Dios
derramó para Abraham. Son para nosotros--. Génesis 24:1.
El propio Abraham representa un poderoso ejemplo para nosotros. Si leemos Hebreos 11:8,
descubrimos que él demostró:
a.- Obediencia.
b.- Confianza en la Palabra expresada por Dios.
c.- Perseverancia.
Levante una oración de gratitud a Dios. ¡Usted fue llamado a romper toda atadura a las Maldiciones
y abrirse a las Bendiciones! Hoy es el día para que inicie este proceso...