1. GUAYAQUIL
Un Oasis de Progreso

2. Fundada en 1534, la ciudad conocida oficialmente como Santiago de Guayaquil lleva
veinte años haciendo realidad el sueño de convertirse en un destino de inversión y
turismo reconocido a nivel mundial.
Guayaquil es considerada la capital económica de Ecuador por su espíritu
emprendedor y vocación comercial.
En los últimos años, tras una profunda regeneración de su tejido urbano y de la red de
infraestructuras, ha relanzado su vocación de ciudad abierta al turismo y los
negocios.
Situada en la costa del Pacífico y a orillas del río Guayas, a pocos kilómetros de su
desembocadura en el Océano Pacífico, Guayaquil – oficialmente Santiago de
Guayaquil – es la mayor y más poblada ciudad de la República del Ecuador.

3. La "regeneración urbana" de Guayaquil ha sido la iniciativa más
importante emprendida por la ciudad en los últimos años para afrontar
su futuro de ciudad abierta y global, de vibrante actividad en el
movimiento de personas y mercancías.
"Antes se venía a Guayaquil a visitar a un amigo, a estudiar o a hacer
negocios. Nadie venía a hacer turismo. Hoy, entre visitantes nacionales
y extranjeros, Guayaquil es la ciudad que recibe más visitantes de todo
Ecuador y esto tiene que ser por algo”, afirma el alcalde la ciudad,
Jaime Nebot Saadi.
Visitar Guayaquil es vivir la experiencia criolla ecuatoriana: el dinamismo y
vitalidad de sus calles y avenidas, la hospitalidad de sus vecinos y una
oportunidad para hacer negocios.

4. Los planes de regeneración urbana emprendidos por las autoridades locales para
modernizar Guayaquil han supuesto un cambio radical en su fisonomía, reforzando
su imagen como destino turístico y empresarial, e impulsando la actividad
económica con proyectos inmobiliarios residenciales o relacionados con el medio
ambiente y los servicios sociales que consolidan la ciudad como centro estratégico
de negocios.

5. Dos son los motores fundamentales de la vibrante vitalidad comercial de Guayaquil: el
primero, el puerto fluvial, el más importante del país y uno de los más activos de la
costa del Pacífico. El otro motor es el pequeño comercio, desarrollado por PYMES y
microempresas, que constituye la base del carácter emprendedor de sus gentes.
Los casi 90.000 pequeños negocios censados en el Cantón de Guayaquil forman parte
consustancial del paisaje de la economía guayaquileña y un ejemplo que se repite
constantemente por sus calles y avenidas, una corriente generadora de riqueza y
crecimiento.
Ernesto Murrieta Jordán, experto en pymes, señala que la razón por la cual las
pequeñas empresas tienen un relativo éxito se debe a que Guayaquil está formado
por un conglomerado de personas que demanda todo tipo de productos, es una
sociedad de consumismo continuo.

6. La Cámara de Industrias de Guayaquil es uno de los foros empresariales más
influyentes de Ecuador.
Fundada en 1936 para promover el empleo productivo y proteger la seguridad
jurídica, sus miembros generan el 37% del PIB no petrolero del país. Su Presidente,
Henry Kronfle, se muestra especialmente optimista ante el presente y futuro de la
economía de Guayaquil, donde el tirón de la actividad económica ha reducido la
tasa de paro en 2011 en casi dos puntos porcentuales hasta el 5,9% de la
población activa.
Uno de los grandes ausentes del mercado ecuatoriano es el sector bancario español.
Ninguno de los dos líderes –Santander y BBVA – está presente. Kronfle, Presidente de
la Cámara de Industrias de Guayaquil. les manda un mensaje: “Ecuador se puede
volver un país atractivo, ya que el sector [bancario] esta creciendo a un promedio
del 9% anual”, y sugiere como una posible vía de entrada operaciones de fusiones
o compras.

7. Las relaciones entre Ecuador y España han registrado en los últimos años un fuerte
impulso por los importantes intereses comerciales españoles en el país y la
corriente migratoria que ha llevado a miles de ecuatorianos a asentarse entre la
sociedad española.
Un vuelo diario de Iberia Guayaquil-Madrid quizá sea un indicador de que las
relaciones hispano-ecuatorianas pasan por uno de sus mejores momentos.
El 60% de la inversión extranjera en Ecuador es española. Empresas como
Telefónica, Mapfre Seguros, Repsol o el Grupo Santillana tienen presencia en el
país, y unas perspectivas favorables en sectores como el turismo y la construcción
residencial y de infraestructuras podrían atraer a muchas más.
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