4. Versículos:
“No hay santo como Jehová…” (1 Samuel 2:2)
“Según nos escogió en Él antes de la fundación del
mundo, para que fuésemos santos y sin mancha
delante de Él.” (Efesios 1:4)
“Sino, como Aquel que os llamo es Santo, sed
también vosotros santos en toda vuestra manera de
vivir (1 Pedro 1:15)
5. Enfoque:
No hay nadie como Dios. Él es santo; esto es, único,
apartado, fuera de lo común, distinto de todo lo demás de una
forma especial.
Dios es santo y el pueblo de Dios fue escogido para ser
santo. Eso significa que somos apartados, fuera de lo común,
distintos de todo lo que nos rodea.
Dios es santo y todas las cosas relacionadas a Dios también
son santas. Por ejemplo, la palabra de Dios, el pueblo de Dios,
etc.
6. Como el pueblo de Dios, debemos ser santos y las cosas
con las que nos relacionamos deben ser santas también,
por ejemplo: lo que decimos, lo que hacemos, a donde
vamos, lo que queremos. Debemos darnos cuenta que
debemos ser como Dios es en todas los aspectos;
debemos ser apartados, diferentes de los demás.