La arquitectura indígena venezolana incluía viviendas construidas en el agua y la selva. Las viviendas Piaroa eran circulares y hechas de palma y varas delgadas formando una gran cubierta, mientras que las viviendas Warao en el Delta del Orinoco eran de palmas y varas de mangle de dos o cuatro aguas y flotaban en el río. Las viviendas Pemona tenían una estructura cónica central pero no llegaban hasta el suelo.