El esqueleto humano está compuesto de aproximadamente 206 huesos articulados que proporcionan estructura y soporte al cuerpo. El esqueleto participa en un 12% del peso total del cuerpo y cumple funciones como la locomoción, protección de órganos, y soporte del cuerpo. Los huesos del cráneo protegen el cerebro, mientras que las costillas, la columna vertebral y el esternón forman la caja torácica para proteger los pulmones y el corazón.