Gijón tiene las condiciones y la oportunidad de construirse como ciudad innovadora. Para conseguirlo necesitará movilizar las capacidades y las energÃas de sus ciudadanos diversos. La participación ciudadana es un asunto candente en un entorno caracterizado por la crisis del sistema polÃtico y por nuevos valores que caracterizan un nuevo modelo de sociedad. El sistema polÃtico atraviesa una crisis de legitimidad y representatividad, de imagen de los polÃticos, de convivencia entre partidos y del propio modelo de gestión. Como consecuencia el gobierno se vuelve ingobernable y la transparencia decae. Entre tanto, la sociedad se está estructurando en torno a nuevos valores. La sociedad-red da protagonismo al individuo, que establece lazos múltiples ad hoc. Internet es la gran plaza pública donde se produce la gran conversación, a este lado de la brecha digital. La gobernanza pública aparece como intento de regeneración polÃtica para sellar la separación entre polÃticos y ciudadanÃa, con énfasis en la transparencia, la participación y la innovación. La participaci�n se contempla diferente desde las alturas de la pol�tica que desde la base ciudadana. Desde lo alto de la torre, son posibles los roles de muec�n y de vig�a, pero es mucho m�s dif�cil implicar a la ciudadan�a para participar. En la base, se da una rica conversaci�n entre iguales, sin centro, con abundancia de entusiasmo. Traigo dos propuestas para la participaci�n. La primera consiste en un giro de 180� al papel de los pol�ticos: que desciendan de la torre y salgan a buscar la participaci�n all� donde se produce. La secuencia es (1)escucha, (2)enlaza, (3)enreda. El pol�tico puede convertirse en un nodo significativo en la construcci�n de comunidades c�vicas. La segunda recibe el nombre de �administraci�n experimental�. Se puede entender como un agregado de tres corrientes: descentralizaci�n, ciudadan�a c�vica y metodolog�a cient�fica. Por fin, la participaci�n ciudadana precisa de buenos ciudadanos y de pol�ticos que est�n dispuestos a asumir nuevas conductas.