2. Aunque comienza por estudiar en el Taller de
Thomas Couture de la Escuela de Bellas Artes, fue
en el Louvre y durante sus viajas a la
Haya, Florencia y Madrid que pudo renovar su
pensamiento.
Poseedor de una visión artística insolente y
provocadora que desafía la perspectiva, modelado
y acabado, a la manera de pintar (con respecto al
movimiento y vida) y a la elección de temas
populares tratados de forma ambiciosa.
3. De su primera etapa resalta:
Almuerzo campestre, expuesto en Salón de los
rechazados de 1863.
Olympia, de 1865. En este mismo año pinta
cuadros de temas españoles: gitanos, toreros
o guitarristas. Resaltando un violento
contraste de luz y sombra.
4. Para 1870 y 1880 los colores de su paleta se
vuelven más claros trabajando a la par y margen
del movimiento impresionista. Sus obras más
importantes son:
La vía del tren.
Nana.
En el invernadero.
Un bar en Folies Bergéres.
5. Es considerado entonces como pintor de la vida
parisina dotado de gran virtuosismo poético y
familiar. Es reconocido como jefe de las filas de
la revolución artística en 1860 y 1870.
También conquista a autores como
Zolá, Baudelaire y Mallarme.
Muere a los cincuenta años dejando una
profunda comprensión de la pintura occidental
así como el camino a la pintura moderna.
6. Eduard Manet, El almuerzo en el campo 1863, óleo sobre
lienzo, 108x264cm. Paris, Mueso d´Orsay.