La Unión Europea ha declarado 2015 como Año Europeo del Desarrollo. Es la primera vez que se consagra a la acción exterior de la Unión Europea y el papel de Europa en el mundo. Se trata de una apuesta para dar a conocer los compromisos comunitarios con la erradicación de la pobreza y para animar a la ciudadanía a que participe y coopere a favor del desarrollo.