1. Cultura musical en Bogotá
La música ha ocupado un lugar central tanto en el ocio como en la identidad individual y
colectiva de los jóvenes. Este hecho alcanzó su máximo exponente con el concepto de "tribus
urbanas" en las décadas de 1970 y 1980. Sin embargo, el modo de consumir música y la
valoración que de ella hacen los jóvenes ha cambiado, tanto debido a transformaciones
internas en la música como a la irrupción de las TIC y de internet, que genera un nuevo
modelo de relación con la música. De hecho, su vinculación con música se hace a través de
canciones sueltas y no tanto de discos completos, ni grupos ni estilos musicales concretos.
dentro de una comunidad específica, (3) idoneidad de la metodología e (4) impacto de la
investigación dentro de una audiencia académica (Bigss y Buchler 2008).
Dentro de las actividades cotidianas de la creación y montaje de obras musicales es
frecuente que se den procesos de reflexión e incluso de documentación que pocas veces son
sistematizados de manera consciente. Por ejemplo, es usual que los músicos tomen
anotaciones en la partitura que muestran decisiones técnicas o estéticas que son parte
fundamental del proceso de interpretación. De la misma manera, muchos músicos utilizan la
grabación en audio o en video para probar cómo sonaría un pasaje de una manera u otra;
los ensambles con frecuencia se reúnen después de un concierto para reflexionar y poner en
común las fallas y los propósitos alcanzados; los compositores pueden recoger y reorganizar
sus bocetos para ver los cambios en el proceso de creación.
La música tiene el poder especial de transportarnos en el tiempo, estimular nuestros
sentimientos más profundos, las emociones, evocar recuerdos y brindarnos compañía fiel
toda la vida. ¿Quien no se ha sentido cautivado por el esplendor, la musicalidad virtuosa,
apacible y majestuosa de las sinfonías de Mozart, Beethoven, Händel, Bach o Vivaldi, por
ejemplo?
2. Estos himnos a la paz y el reposo interior son solo un pequeñísimo ejemplo de los millones
de melodías, armonías y ritmos que cada amanecer, atardecer y anochecer han acompañado
la cotidianidad, alegrías, festejos, amores, desamores, angustias y tristezas de la humanidad
durante siglos.
Y en nuestro cálido ambiente tropical, no hay nada más emocionante que sentir el amor de
patria, a través de las notas de un bambuco, un pasillo, una cumbia, o un joropo. La
expresión musical folclórica nos transporta al campo, a su agricultura, al olor de la tierra,
al aire puro y saludable, a nuestro terruño, y nos evoca momentos inolvidables.
Estudios internacionales recientes abordan las siguientes reflexiones, basadas en estudios
clínicos y entrevistas, para desentrañar el papel que juega la música en nuestra salud
mental: ¿Sabe que nuestra música preferida tiene mucho que ver con nuestro estado anímico,
identidad, manera de ver la vida, salud mental y realidad espiritual? ¿Por qué nos gusta
determinado tipo de música? ¿Cómo nos sentimos al escuchar música? ¿Cuál es nuestro
estado anímico cuando escuchamos música en momentos de soledad? ¿Por qué la música a
veces nos trae recuerdos del pasado o nos deprime? ¿Es bueno buscar refugio en la música
en momentos de crisis?
Muchas ciudades han encontrado en la música un camino para cumplir algunos de sus
objetivos socioeconómicos, además de los específicamente culturales. Por ejemplo, Austin
(Texas, USA) o Adelaida (Australia) se han proclamado ciudades musicales y han
desarrollado estrategias innovadoras y creativas para potenciar las posibilidades que el
sector musical ofrece.
Otras ciudades y organizaciones han seguido este ejemplo, convirtiendo a la música en un
eje de progreso en todo el mundo:
Ámsterdam fue la primera ciudad en escoger a un alcalde nocturno, una figura responsable
por coordinar y potenciar la actividad nocturna y la escena musical de la capital holandesa.
En Nueva York, el alcalde Bill de Blasio anunció el año pasado un plan para
construir viviendas de bajo costo para músicos y artistas, con miras de preservar este sector
que tiene grandes contribuciones para la ciudad.
En Sudáfrica, la organización Bridges for Music usa la música como medio para la
integración social y para crear conciencia sobre problemas de desarrollo.
En el Reino Unido, UK Music produce informes anuales sobre el impacto del turismo
musical en la economía del país.
3. En 2004, la UNESCO creó la Red de Ciudades Creativas con el objetivo de promover la
cooperación internacional entre ciudades que ven en la creatividad una fuente de desarrollo
y progreso urbano sostenibles, así como un medio para la integración social y la
preservación de la diversidad cultural. Desde entonces, cerca de 20 ciudades han sido
nombradas ciudades musicales por la UNESCO, entre ellas Bogotá, Medellín, Kingston y
Salvador de Bahía.
Bogotá fue la quinta ciudad y la primera en América Latina en sumarse a esta red. En una
ciudad con una escena musical tan activa y próspera, este nombramiento promovió un mayor
esfuerzo en la creación e implementación de políticas dedicadas a poner la música al centro
de la vida de la ciudad. Con el objetivo de generar un sentido de pertenencia y crear un
mayor diálogo intercultural, Bogotá ha desarrollado y llevado a cabo una serie de políticas
públicas, consiguiendo superar algunos de sus desafíos utilizando la música como
herramienta de transformación social.
Ejemplo de estas políticas es el Plan Distrital de Música, creado con la colaboración de
varios agentes del sector, tanto públicos como privados. Este plan se fija en temas como la
formación, la creación de circuitos musicales y la defensa de los espacios dedicados a la
música en vivo. Entre las medidas tomadas a partir del plan se destaca la creación
del Clúster de Música de Bogotá en febrero de 2015 para reforzar los pilares estratégicos
que afectan directamente la competitividad de la industria: investigación, desarrollo e
innovación, promoción y mercadeo, normatividad y talento humano; buscando de este modo
convertir a la ciudad en el principal centro de negocios de la música en América Latina.
La creación de empleo
El aumento de la recaudación sin incrementar los impuestos
La racionalización y promoción del transporte público
La gestión del turismo
La regeneración urbanística
La retención y atracción de talento e inversiones
4. La integración social o el uso y racionalización de las infraestructuras urbanas.
Una solución para los músicos bogotanos
El Instituto Distrital de las Artes (Idartes) está lanzando una iniciativa para integrar a los
artistas con los bares y sitios públicos de la ciudad.
En tiempos en que los bares están en el ojo del huracán a raíz de lo sucedido el domingo
pasado en el bar Night Club, el Distrito lanza una propuesta para un adecuado
aprovechamiento de los establecimientos y sitios públicos de la ciudad, con el aliciente de un
consumo cultural responsable y la tolerancia entre los capitalinos.
"La propuesta busca la circulación de artistas por Bogotá y fortalecer los establecimientos
que le han apostado a las presentaciones culturales", dice Alix Lesmes, representante de la
Corporación Clepsidra, aliado administrativo del Idartes.
¿Cómo inscribir su banda o grupo artístico?
ÇJames Ortega dice que "en Bogotá hay una gran cantidad de talento. Hay guitarristas,
bateristas, bandas que llevan hasta 10 años y no ha podido surgir y no ha podido grabar su
primer trabajo discográfico. Van a tener accesibilidad al arte en vivo".
Para hacer parte de Arte Conexión los artistas deben crear un usuario en la página web de
'Arte Conexión', agregar un perfil, completar una descripción y finalmente incluir enlaces a
redes sociales, imágenes del artista o banda y un demo. (Link
http://beta.arteconexion.com/%C2%BFc%C3%B3mo-ser-un-artista-de-la-red-
arteconexi%C3%B3n#.UjtEE9R3CpA )