1. RETIRO ALTAGRACIANAS
Sábado 14 de diciembre 2019
« Si quieres venir al santo recogimiento,
no has de venir admitiendo sino negando.»
San Juan de la Cruz
Con María a la Espera
CANTO
El Dios de paz, Verbo divino,
quiso nacer en un portal
El es la luz, vida y camino.
Gracia y perdón trajo al mortal.
CORO
Ven, Salvador, ven sin tardar,
Tu pueblo santo esperando está.
Vino a enseñamos el sendero,
vino a traernos el perdón.
Vino a morir en un madero,
precio de nuestra redención.
CORO
Por una senda oscurecida,
vamos en busca de la luz.
Luz y alegría sin medida
encontraremos en Jesús.
CORO
Nuestro Señor vendrá un día,
lleno de gracias y majestad.
De nuestro pueblo El será guía
juntos iremos a reinar.
CORO
Cuando Dios se nos atraviesa en el camino no nos deja indiferentes.
Nos pone en movimiento. Allí dónde no hay movimiento es como si
estuviese ausente la vida. No digo esto contra la quietud de un rato de
oración, de algún momento de descanso necesario... Me refiero a cierta
pasividad espiritual que puede ir apropiándose de nuestra rutina
diaria, de hacer muchas cosas por el Señor, pero tal vez queriendo
evitar escuchar por dónde nos quiere mover el Señor…
Por eso, María nos da un buen ejemplo de escucha, de quietud atenta
(se puso en camino María y se dirigió con prontitud), pero antes fue
remecida por la visita inesperada de Dios. María se conturba por las
palabras del ángel y se preguntaba qué podría significar eso en su vida,
en su íntima relación con Dios.
Esperar con María esta venida del Salvador, nos puede ayudar a
escuchar ese saludo del Señor a nuestras vidas. Siempre hay
precursores en nuestra vida. Isabel que pasa 5 meses recluida y en ese
mes de espera no podía imaginar qué gran noticia vería: «ver que la
Madre de su Señor viene a mí». Así nos prepara Dios en este tiempo
de Adviento, nos prepara a recibir a nuestro Señor en el corazón en
brazos de su Madre.
Hay tres puntos principales de contacto entre la espiritualidad del
Adviento y la vida consagrada:
• Conciencia de los bienes que sólo Jesucristo puede traernos.
• Conocimiento de uno mismo, que nos lleva a prepararnos
para recibir al Señor y que nos invita a ser coherentes con
nuestros compromisos.
• Certeza de que no vamos solos: como creyentes nuestra
peregrinación es comunitaria.
Solamente Cristo es el que puede saciar nuestras ansias de infinito,
sólo el. Por muchas cosas que podamos hacer para el Señor, puede
dejarnos vacío y seco si no las hacemos con el Señor. Y esto en
comunidad, no entendida como regla de vida, sino que nos
necesitamos unos a otros; los cristianos nos salvamos personal y
comunitariamente.
2. RETIRO ALTAGRACIANAS
Sábado 14 de diciembre 2019
« Si quieres venir al santo recogimiento,
no has de venir admitiendo sino negando.»
San Juan de la Cruz
Con María a la Espera
Propongo dividir en dos momentos
de oración, contemplando cómo
Isabel es en este caso la beneficiaria
de la prontitud de María, del sí de
María. Cómo se refleja esto en estar
llena del Espíritu Santo y aclamar
con alegría, y resuena el salmo 84
Justicia y Paz se besan Amor y
Verdad se han dado cita.
Lc 1, 39-45
En un segundo momento
contemplar como ese sí de María es
el que trae toda esta gran alegría.
Del mismo modo mi sí al Señor
puede llevar alegría a otros, puede
hacer nacer en mí al Salvador.
Lc 1, 26-38
San Ignacio nos propone
contemplar «como si presente me
hallase».
Pedir la gracia: «pedir conocimiento
interno del Señor, que por mí se ha
hecho hombre para que más le ame
y le siga».
«No el mucho saber harta y
satisface el alma sino el sentir y
gustar de las cosas internamente»
Algunos pensamiento de San Juan de la Cruz
***
• El alma enamorada es alma blanda, mansa, humilde y
paciente.
• No pienses que el agradar a Dios está tanto en obrar mucho
como en obrarlo con buena voluntad, sin propiedad y respetos.
• A la tarde te examinarán en el amor; aprende a amar como
Dios quiere ser amado y deja tu condición.
• Calle lo que Dios le diere y acuérdese de aquel dicho de la
esposa: Mi secreto para mí (Is. 24, 16).
• « ...cuando estás cargado, estás junto a Dios, que es tu
fortaleza, el cual está con los atribulados; cuando estás
aliviado, estás junto a ti, que eres tu misma flaqueza...»
***
Como busca la cierva corrientes de agua, así, Dios mío, te busca todo
mi ser. Tengo sed de Dios, del Dios vivo, ¿cuándo entraré a ver el
rostro de Dios? Las lágrimas son mi alimento día y noche, mientras
me preguntan todo el día: ¿Dónde está tu Dios?
Salmo 42:2-4
Consuelen, consuelen a mi pueblo, dice tu Dios, hablen al corazón de
Jerusalén, grítenle que se ha cumplido su condena y que está
perdonada su culpa, pues ha recibido del Señor doble castigo por
todos sus pecados.
Una voz grita: Preparen en el desierto el camino del Señor, tracen en la
llanura una senda para nuestro Dios. Que se eleven todos los valles y
las montañas y colinas se abajen; que los barrancos se transformen en
llanuras y los cerros en planicies. Entonces se manifestará la gloria del
Señor y la verán juntos todos los pueblos, lo ha dicho la boca del
Señor.
Isaías 40:1-5