2. Factores situacionales que determinan el registro:
a. EL TEMA. Es la esfera de la realidad a la que se refiere el texto, la temática
tratada. No utilizamos las mismas palabras para hablar de un tema o de otro.
Del mismo modo, las estructuras sintácticas tampoco son las mismas.
Ej: Hablamos sobre fútbol o sobre energía nuclear.
b. EL MODO. La relación que se establece entre los interlocutores determina
el nivel de formalidad de los textos. Atendiendo al nivel de confianza de los
interlocutores, la jerarquía que se establece entre ellos y la situación en que
se produce la comunicación, el texto puede ser más o menos formal.
Ej: no hablamos igual con un amigo nuestro y con el director de un
banco.
c. EL CANAL. El canal de transmisión (oral o escrito) puede determinar
también el nivel de espontaneidad o preparación de un texto. En términos
generales se puede decir que los usos orales son más espontáneos que los
escritos, si bien hay manifestaciones orales (un recitado, una conferencia…)
que presentan un alto grado de preparación.
Ej: No utilizamos el mismo lenguaje para quedar con un amigo si lo
hacemos por SMS o cara a cara.
3. El registro de los medios de comunicación.
Los distintos géneros periodísticos de opinión
suelen utilizar el registro estándar. No
obstante, podemos encontrar, por
ejemplo, artículos de opinión que presenten un
mayor grado de especialización léxica, que nunca
llega a ser incomprensible par un lector medio. De
la misma manera, no es infrecuente encontrar
giros o expresiones coloquiales en algunos
artículos o columnas que no llegan a neutralizar el
registro estándar en que suelen estar escritos.
4. ¿Cómo responder a la pregunta del examen?
Justificación del registro utilizado atendiendo al
tema, al modo y al canal.
Ejemplos de cultismos presentes en el texto.
Ejemplos de coloquialismos del texto.
Ejemplos de vulgarismos, si los hay, del texto.
5. Ejemplo de respuesta: La media naranja
Para exponer sus ideas, el autor del texto utiliza un registro
estándar como corresponde al ámbito periodístico en el que se
inscribe, puesto que se trata de un artículo de opinión.
El tema es de carácter general, con presencia de un léxico
propio de la materia pero sin excesivos tecnicismos ni
coloquialismos. El modo es formal, como lo exige el hecho de que
exista distancia física y personal entre el emisor y el receptor. Y el
canal, al tratarse de un texto escrito, determina cierta
preparación y un menor grado de espontaneidad.
El registro estándar es el propio de los medios de
comunicación. Pero el uso de dicho registro no impide la
presencia de palabras propias de un registro culto (“metafórica”,
línea 1; “indigente”, l. 12; “cónyuges”, l. 25…), ni de otras voces
más coloquiales (“media naranja”, l. 1; “lo más profundo de sus
entrañas”…).
6. 1. Explica el significado de Discos, ajo y agua, Javier Ortiz.
las palabras subrayadas.
2. El registro del texto Gran indignación músico-industrial por el pirateo de discos
podemos caracterizarlo No tienen razón. No, al menos, toda la razón.
globalmente como estándar
de acuerdo a las
Si la gente no compra más discos originales es porque son carísimos. Y son carísimos
convenciones establecidas porque el margen de beneficio de las grandes compañías discográficas es escandaloso.
para los textos Yo comprendo que sean caros los discos minoritarios en los que hay que prorratear
periodísticos. Sin embargo, un montón de gastos fijos. Pero que cedés que se venden como churros tengan los precios que tienen
al lado de un léxico general es, sencillamente, un abuso.
en relación con el tema de
la música, se observa la
Hay diversos géneros de copia de discos. Uno es el que se hace con fines comerciales. Ese
presencia de varias voces es lógico que se persiga. Y además no es tan difícil: basta con seguir la cadena de la venta
coloquiales, plenamente ambulante hasta sus orígenes.
justificadas porque Pero hay otras copisterías que no tienen nada que ver con eso.
reproducen el habla Por ejemplo, algunos fabrican copias de discos que han comprado, pagando religiosamente
coloquial de los jóvenes
consumidores de música.
su precio, porque no quieren andar paseándolos por ahí. Se hacen una copia para el reproductor del
Localiza algunas de estas coche, o para el del trabajo, o para el de su segunda residencia. O como mera copia de seguridad,
palabras o expresiones. para no estropear el original: ¿Qué pretenden, que se compren cuatro veces el mismo disco?.
Es igualmente frecuente el intercambio de discos entre amigos. Ahí volvemos a lo del
3. Sustitúyelas por otras que precio. Me sé de melómanos que quieren estar más o menos al día, y que por ello, y no sin
se acerquen más al léxico
propio de la lengua
sacrificio, están dispuestos a dejarse hasta 10.000 pesetas mensuales en discos. Pero no 30.000 ni
estándar. 50.000. Sencillamente porque entonces tendrían que prescindir de comer. Así que se conchaban
entre varios para comprar cada uno dos o tres discos e intercambiar novedades.
4. Del mismo modo que en el Luego está lo del Emule. Es una pasada. Primero, porque ir contra el intercambio de música
texto aparecen voces por Internet es tratar de poner puertas al campo. Pero es que, además, Emule también ayuda a los
coloquiales, tienen
presencia los términos
ingresos de la industria discográfica. Ha habido autores cuya existencia he conocido –y de los que
propios de un registro más luego he comprado discos- porque me he topado con alguna de sus canciones en los archivos del
culto. Localiza ejemplos. Emule.
Lo que las discográficas tienen que hacer es renunciar a los beneficios astronómicos que
5. Escribe una conclusión en venían obteniendo y ofrecer productos más elaborados. Algunas ya han empezado a hacerlo: sus
la que caracterices el
registro atendiendo al tema
discos adjuntan folletos primorosamente realizados, cuando no auténticos minilibros, que ninguna
que trata, al modo, al canal copia puede proporcionar. Claro que eso implica ganar menos. Oye: pues ajo y agua.
y a la finalidad del texto
7. Registro: Discos, ajo y agua
Para exponer sus ideas, el autor del texto utiliza un registro
estándar como corresponde al ámbito periodístico en el que se
inscribe, puesto que se trata de un artículo de opinión.
El tema es de carácter general, con presencia de un léxico
propio de la materia pero sin excesivos tecnicismos ni
coloquialismos. El modo es formal, como lo exige el hecho de que
exista distancia física y personal entre el emisor y el receptor. Y el
canal, al tratarse de un texto escrito, determina cierta preparación y
un menor grado de espontaneidad.
El registro estándar es el propio de los medios de comunicación.
Pero el uso de dicho registro no impide la presencia de palabras
propias de un registro culto (“prorratear”, línea 5; “indignación”,
línea 1; “melómanos”, línea 18; “primorosamente”, l. 29), ni de otras
voces más coloquiales (“ajo y agua”, en el título; “pirateo”, l. 1;
“vender como churros”, l. 6; “montón”, l.6; “andar paseándolos”, l.
15, “se conchaban”, l. 21; “es una pasada”, l. 22; “poner puertas al
campo”, l. 23, “he topado”, l. 25).
8. Nace la generación de la crisis, Pepa Bueno.
Hace unos meses, la veterana presidenta de una asociación de discapacitados de una
localidad de la periferia de Madrid me contaba preocupada que algunos padres jóvenes de niños
con problemas son poco batalladores. Dan por supuesto que la atención extra a sus hijos, los
talleres ocupacionales, las terapias novedosas, los pisos para cuando se emancipen los que
puedan hacerlo..., que todo eso está garantizado. Que no hay que luchar, solicitar la subvención,
pelear euro a euro, convenio a convenio. Y me recordaba que ella y otros pocos, tuvieron que
crear de la nada la asociación cuando la democracia sacó de casa a los distintos. Y que no han
parado de trabajar hasta hoy. Por sus hijos, que ahora se acercan a los 30 años, y por los que
han venido detrás.
Me viene a la memoria aquella conversación cuando escucho el clamor airado de los
que le piden directamente al Gobierno un puesto de trabajo. Como hasta hace unos meses
pedíamos un piso en propiedad. O los que esperan que haya una máquina dispuesta a quitarle la
nieve de la rampa de su garaje tras cada nevada. La vivienda, el trabajo y la seguridad son
derechos constitucionales, y a las administraciones hay que exigirles que creen las condiciones
para que todos podamos ejercer esos derechos con dignidad. Exigir y reivindicar como
ciudadanos de una sociedad civil adulta, no como niños que le piden a papá que haga magia
para que desaparezca el dolor de tripa.
Pero buena parte de culpa la tiene la clase política dirigente. Nos tratan como si
fuéramos inmaduros a los que engatusar con promesas que parecen cartas a los Reyes Magos.
Unos nos prometen el pleno empleo dos minutos antes de que estalle la locomotora de nuestra
economía. Otros nos prometen la mínima fiscalidad y el tope de servicios sociales. Como si
fuéramos incapaces de comprender la complejidad del mundo en el que vivimos.
Existe toda una generación que va a crecer de golpe con esta crisis económica. Así que,
por favor, que nos hablen claro, porque ya sabemos quiénes van a pagar los platos rotos de la
fiesta que se acaba.
El Periódico, 5 de febrero de 2009.
9. IDEAS PRINCIPALES:
Nace la generación de la crisis, Pepa Bueno.
•Cada vez somos menos
reivindicativos y
Hace unos meses, la veterana presidenta de una asociación de discapacitados de una
luchamos menos por lo
localidad de la periferia de Madrid me contaba preocupada que algunos padres jóvenes de niños
que queremos, creemos
con problemas son poco batalladores. Dan por supuesto que la atención extra a sus hijos, los
que son cosas que se nos
talleres ocupacionales, las terapias novedosas, los pisos para cuando se emancipen los que
tienen que dar sin más.
puedan hacerlo..., que todo eso está garantizado. Que no hay que luchar, solicitar la subvención,
pelear euro a euro, convenio a convenio. Y me recordaba que ella y otros pocos, tuvieron que
•No se le pueden pedir al
crear de la nada la asociación cuando la democracia sacó de casa a los distintos. Y que no han
Estado bienes
parado de trabajar hasta hoy. Por sus hijos, que ahora se acercan a los 30 años, y por los que
materiales, sino las
han venido detrás.1
condiciones para que
Me viene a la memoria aquella conversación cuando escucho el clamor airado de los
nosotros podamos
que le piden directamente al Gobierno un puesto de trabajo. Como hasta hace unos meses
conseguirlos.
pedíamos un piso en propiedad. O los que esperan que haya una máquina dispuesta a quitarle la
nieve de la rampa de su garaje tras cada nevada. La vivienda, el trabajo y la seguridad son
•En estos momentos de
derechos constitucionales, y a las administraciones hay que exigirles que creen las condiciones
crisis, nuestros dirigentes
para que todos podamos ejercer esos derechos con dignidad. Exigir y reivindicar como
nos engañan, nos
ciudadanos de una sociedad civil adulta, no como niños que le piden a papá que haga magia
prometen cosas
para que desaparezca el dolor de tripa.2
imposibles de cumplir.
Pero buena parte de culpa la tiene la clase política dirigente. Nos tratan como si
fuéramos inmaduros a los que engatusar con promesas que parecen cartas a los Reyes Magos.
•Necesitamos que
Unos nos prometen el pleno empleo dos minutos antes de que estalle la locomotora de nuestra
nuestros políticos sean
economía. Otros nos prometen la mínima fiscalidad y el tope de servicios sociales. Como si
serios y honestos con esta
fuéramos incapaces de comprender la complejidad del mundo en el que vivimos.3
generación que va a
Existe toda una generación que va a crecer de golpe con esta crisis económica. Así que,
sufrir, más que ninguna
por favor, que nos hablen claro, porque ya sabemos quiénes van a pagar los platos rotos de la
otra, la crisis económica
fiesta que se acaba.4
que vivimos.
El Periódico, 5 de febrero de 2009.
10. IDEAS PRINCIPALES:
•Cada vez somos menos reivindicativos Nace la generación de la crisis, Pepa Bueno.
y luchamos menos por lo que queremos,
creemos que son cosas que se nos tienen
que dar sin más.
•No se le pueden pedir al Estado bienes
Hace unos meses, la veterana presidenta de una asociación de discapacitados de una
materiales, sino las condiciones para que localidad de la periferia de Madrid me contaba preocupada que algunos padres jóvenes de niños
nosotros podamos conseguirlos.
•En estos momentos de crisis, nuestros
con problemas son poco batalladores. Dan por supuesto que la atención extra a sus hijos, los
dirigentes nos engañan, nos prometen talleres ocupacionales, las terapias novedosas, los pisos para cuando se emancipen los que
cosas imposibles de cumplir.
•Necesitamos que nuestros políticos puedan hacerlo..., que todo eso está garantizado. Que no hay que luchar, solicitar la subvención,
sean serios y honestos con esta pelear euro a euro, convenio a convenio. Y me recordaba que ella y otros pocos, tuvieron que
generación que va a sufrir, más que
ninguna otra, la crisis económica que crear de la nada la asociación cuando la democracia sacó de casa a los distintos. Y que no han
vivimos. parado de trabajar hasta hoy. Por sus hijos, que ahora se acercan a los 30 años, y por los que
han venido detrás.
IDEAS SECUNDARIAS:
Me viene a la memoria aquella conversación cuando escucho el clamor airado de los
•Referencias a la
que le piden directamente al Gobierno un puesto de trabajo. Como hasta hace unos meses
conversación mantenida
pedíamos un piso en propiedad. O los que esperan que haya una máquina dispuesta a quitarle la
entre Pepa Bueno, autora
nieve de la rampa de su garaje tras cada nevada. La vivienda, el trabajo y la seguridad son
del artículo, y la
derechos constitucionales, y a las administraciones hay que exigirles que creen las condiciones
presidenta de una
para que todos podamos ejercer esos derechos con dignidad. Exigir y reivindicar como
asociación de
ciudadanos de una sociedad civil adulta, no como niños que le piden a papá que haga magia
discapacitados.
para que desaparezca el dolor de tripa.
•Comparación entre la
Pero buena parte de culpa la tiene la clase política dirigente. Nos tratan como si
actitud que tienen los
fuéramos inmaduros a los que engatusar con promesas que parecen cartas a los Reyes Magos.
españoles con el Estado y
Unos nos prometen el pleno empleo dos minutos antes de que estalle la locomotora de nuestra
la que tienen los niños
economía. Otros nos prometen la mínima fiscalidad y el tope de servicios sociales. Como si
pequeños con sus padres.
fuéramos incapaces de comprender la complejidad del mundo en el que vivimos.
•Ejemplos de promesas
Existe toda una generación que va a crecer de golpe con esta crisis económica. Así que,
que nos hacen los
por favor, que nos hablen claro, porque ya sabemos quiénes van a pagar los platos rotos de la
políticos.
fiesta que se acaba.
El Periódico, 5 de febrero de 2009.
11. Estamos acostumbrados a
pedir y que se nos dé, y eso Nace la generación de la crisis, Pepa Bueno.
nos ha hecho ser menos
reivindicativos que antaño.
No luchamos por nuestros Hace unos meses, la veterana presidenta de una asociación de discapacitados de una
derechos como lo localidad de la periferia de Madrid me contaba preocupada que algunos padres jóvenes de niños
hacíamos antes, y exigimos con problemas son poco batalladores. Dan por supuesto que la atención extra a sus hijos, los
a nuestros políticos que nos talleres ocupacionales, las terapias novedosas, los pisos para cuando se emancipen los que
den una vivienda, un puedan hacerlo..., que todo eso está garantizado. Que no hay que luchar, solicitar la subvención,
trabajo… cuando
pelear euro a euro, convenio a convenio. Y me recordaba que ella y otros pocos, tuvieron que
realmente no debemos
pedir esas cosas materiales. crear de la nada la asociación cuando la democracia sacó de casa a los distintos. Y que no han
A nuestros dirigentes hay parado de trabajar hasta hoy. Por sus hijos, que ahora se acercan a los 30 años, y por los que
que obligarlos a que doten han venido detrás.
a nuestro estado de todo Me viene a la memoria aquella conversación cuando escucho el clamor airado de los
aquello que garantice que le piden directamente al Gobierno un puesto de trabajo. Como hasta hace unos meses
nuestros derechos
pedíamos un piso en propiedad. O los que esperan que haya una máquina dispuesta a quitarle la
y, luego, ser nosotros los
que luchemos por esas nieve de la rampa de su garaje tras cada nevada. La vivienda, el trabajo y la seguridad son
posesiones. Sin derechos constitucionales, y a las administraciones hay que exigirles que creen las condiciones
embargo, la culpa de esta para que todos podamos ejercer esos derechos con dignidad. Exigir y reivindicar como
actitud no es sólo nuestra. ciudadanos de una sociedad civil adulta, no como niños que le piden a papá que haga magia
Los políticos, con sus para que desaparezca el dolor de tripa.
mentiras, nos han llevado a
Pero buena parte de culpa la tiene la clase política dirigente. Nos tratan como si
pensar que la vida es así.
Ahora sólo nos queda fuéramos inmaduros a los que engatusar con promesas que parecen cartas a los Reyes Magos.
pedirles honestidad y Unos nos prometen el pleno empleo dos minutos antes de que estalle la locomotora de nuestra
responsabilidad hacia una economía. Otros nos prometen la mínima fiscalidad y el tope de servicios sociales. Como si
generación que sufre la fuéramos incapaces de comprender la complejidad del mundo en el que vivimos.
crisis económica. Existe toda una generación que va a crecer de golpe con esta crisis económica. Así que,
por favor, que nos hablen claro, porque ya sabemos quiénes van a pagar los platos rotos de la
fiesta que se acaba.
El Periódico, 5 de febrero de 2009.
12. TEMA:
Nace la generación de la crisis, Pepa Bueno.
· La necesidad Hace unos meses, la veterana presidenta de una asociación de discapacitados de una
de una localidad de la periferia de Madrid me contaba preocupada que algunos padres jóvenes de niños
actuación con problemas son poco batalladores. Dan por supuesto que la atención extra a sus hijos, los
talleres ocupacionales, las terapias novedosas, los pisos para cuando se emancipen los que
política puedan hacerlo..., que todo eso está garantizado. Que no hay que luchar, solicitar la subvención,
honesta frente pelear euro a euro, convenio a convenio. Y me recordaba que ella y otros pocos, tuvieron que
a la crisis. crear de la nada la asociación cuando la democracia sacó de casa a los distintos. Y que no han
parado de trabajar hasta hoy. Por sus hijos, que ahora se acercan a los 30 años, y por los que
han venido detrás.
Me viene a la memoria aquella conversación cuando escucho el clamor airado de los
que le piden directamente al Gobierno un puesto de trabajo. Como hasta hace unos meses
pedíamos un piso en propiedad. O los que esperan que haya una máquina dispuesta a quitarle la
nieve de la rampa de su garaje tras cada nevada. La vivienda, el trabajo y la seguridad son
derechos constitucionales, y a las administraciones hay que exigirles que creen las condiciones
para que todos podamos ejercer esos derechos con dignidad. Exigir y reivindicar como
ciudadanos de una sociedad civil adulta, no como niños que le piden a papá que haga magia
para que desaparezca el dolor de tripa.
Pero buena parte de culpa la tiene la clase política dirigente. Nos tratan como si
fuéramos inmaduros a los que engatusar con promesas que parecen cartas a los Reyes Magos.
Unos nos prometen el pleno empleo dos minutos antes de que estalle la locomotora de nuestra
economía. Otros nos prometen la mínima fiscalidad y el tope de servicios sociales. Como si
fuéramos incapaces de comprender la complejidad del mundo en el que vivimos.
Existe toda una generación que va a crecer de golpe con esta crisis económica. Así que,
por favor, que nos hablen claro, porque ya sabemos quiénes van a pagar los platos rotos de la
fiesta que se acaba.
El Periódico, 5 de febrero de 2009.
13. TESIS Y
ESTRUCTURA Nace la generación de la crisis, Pepa Bueno.
TEXTUAL.
Hace unos meses, la veterana presidenta de una asociación de discapacitados de una
La tesis aparece localidad de la periferia de Madrid me contaba preocupada que algunos padres jóvenes de niños
explícita en el último con problemas son poco batalladores. Dan por supuesto que la atención extra a sus hijos, los
párrafo. En él se nos talleres ocupacionales, las terapias novedosas, los pisos para cuando se emancipen los que
dice que los jóvenes de
puedan hacerlo..., que todo eso está garantizado. Que no hay que luchar, solicitar la subvención,
hoy van a ser aquellos
que sufran esta crisis pelear euro a euro, convenio a convenio. Y me recordaba que ella y otros pocos, tuvieron que
económica que vivimos crear de la nada la asociación cuando la democracia sacó de casa a los distintos. Y que no han
y, por eso, ellos parado de trabajar hasta hoy. Por sus hijos, que ahora se acercan a los 30 años, y por los que
merecen la honestidad han venido detrás.
de sus políticos, que Me viene a la memoria aquella conversación cuando escucho el clamor airado de los
sean claros con
que le piden directamente al Gobierno un puesto de trabajo. Como hasta hace unos meses
respecto a lo que está
sucediendo, a las pedíamos un piso en propiedad. O los que esperan que haya una máquina dispuesta a quitarle la
medidas a adoptar, al nieve de la rampa de su garaje tras cada nevada. La vivienda, el trabajo y la seguridad son
futuro que se derechos constitucionales, y a las administraciones hay que exigirles que creen las condiciones
presenta… que no se le para que todos podamos ejercer esos derechos con dignidad. Exigir y reivindicar como
intente engañar con ciudadanos de una sociedad civil adulta, no como niños que le piden a papá que haga magia
promesas que no lleven
para que desaparezca el dolor de tripa.
a ningún sitio.
Pero buena parte de culpa la tiene la clase política dirigente. Nos tratan como si
Dado que la tesis fuéramos inmaduros a los que engatusar con promesas que parecen cartas a los Reyes Magos.
aparece al final del Unos nos prometen el pleno empleo dos minutos antes de que estalle la locomotora de nuestra
texto, estamos ante una economía. Otros nos prometen la mínima fiscalidad y el tope de servicios sociales. Como si
estructura sintetizante. fuéramos incapaces de comprender la complejidad del mundo en el que vivimos.
Primero se dan las
Existe toda una generación que va a crecer de golpe con esta crisis económica. Así que,
razones que le llevan a
tener la opinión que se por favor, que nos hablen claro, porque ya sabemos quiénes van a pagar los platos rotos de la
muestra finalmente. fiesta que se acaba.
El Periódico, 5 de febrero de 2009.
14. En el texto se observan las
siguientes partes temáticas:
· Introducción o parte
expositiva. Se corresponde
Nace la generación de la crisis, Pepa Bueno.
con el primer párrafo. En él la
autora reflexiona sobre la Hace unos meses, la veterana presidenta de una asociación de discapacitados de una
escasa capacidad de lucha que localidad de la periferia de Madrid me contaba preocupada que algunos padres jóvenes de niños
tenemos hoy en día, haciendo
una referencia a una
con problemas son poco batalladores. Dan por supuesto que la atención extra a sus hijos, los
conversación que mantuvo talleres ocupacionales, las terapias novedosas, los pisos para cuando se emancipen los que
con una presidenta de una puedan hacerlo..., que todo eso está garantizado. Que no hay que luchar, solicitar la subvención,
asociación de discapacitados pelear euro a euro, convenio a convenio. Y me recordaba que ella y otros pocos, tuvieron que
sobre la escasa capacidad
reivindicativa de los padres de crear de la nada la asociación cuando la democracia sacó de casa a los distintos. Y que no han
hoy. parado de trabajar hasta hoy. Por sus hijos, que ahora se acercan a los 30 años, y por los que
· Cuerpo argumentativo. Se han venido detrás.
sitúa en el segundo y tercer
párrafo, donde desarrolla la
Me viene a la memoria aquella conversación cuando escucho el clamor airado de los
idea de que al Estado no se le que le piden directamente al Gobierno un puesto de trabajo. Como hasta hace unos meses
pueden pedir cosas, sino los pedíamos un piso en propiedad. O los que esperan que haya una máquina dispuesta a quitarle la
medios para poder ejercer nieve de la rampa de su garaje tras cada nevada. La vivienda, el trabajo y la seguridad son
nuestros derechos y tener así
esas cosas. Para eso es
derechos constitucionales, y a las administraciones hay que exigirles que creen las condiciones
imprescindible que nuestros para que todos podamos ejercer esos derechos con dignidad. Exigir y reivindicar como
políticos sean honestos con ciudadanos de una sociedad civil adulta, no como niños que le piden a papá que haga magia
nosotros. para que desaparezca el dolor de tripa.
· Conclusión. Coincide con
la tesis y se encuentra en el Pero buena parte de culpa la tiene la clase política dirigente. Nos tratan como si
último párrafo: Es justo que fuéramos inmaduros a los que engatusar con promesas que parecen cartas a los Reyes Magos.
aquellos que van a sufrir las Unos nos prometen el pleno empleo dos minutos antes de que estalle la locomotora de nuestra
consecuencias de esta crisis no
sean engañados por aquellos
economía. Otros nos prometen la mínima fiscalidad y el tope de servicios sociales. Como si
que nos pueden sacar de ella. fuéramos incapaces de comprender la complejidad del mundo en el que vivimos.
Existe toda una generación que va a crecer de golpe con esta crisis económica. Así que,
por favor, que nos hablen claro, porque ya sabemos quiénes van a pagar los platos rotos de la
fiesta que se acaba.
El Periódico, 5 de febrero de 2009.
15. REGISTRO
Para exponer sus ideas, el autor
del texto utiliza un registro Nace la generación de la crisis, Pepa Bueno.
estándar como corresponde al
ámbito periodístico en el que se
inscribe, puesto que se trata de Hace unos meses, la veterana presidenta de una asociación de discapacitados de una
un artículo de opinión. localidad de la periferia de Madrid me contaba preocupada que algunos padres jóvenes de niños
El tema es de carácter con problemas son poco batalladores. Dan por supuesto que la atención extra a sus hijos, los
general, con presencia de un
léxico propio de la materia. El talleres ocupacionales, las terapias novedosas, los pisos para cuando se emancipen los que
modo es formal, como lo exige puedan hacerlo..., que todo eso está garantizado. Que no hay que luchar, solicitar la subvención,
el hecho de que exista distancia pelear euro a euro, convenio a convenio. Y me recordaba que ella y otros pocos, tuvieron que
física y personal entre el emisor crear de la nada la asociación cuando la democracia sacó de casa a los distintos. Y que no han
y el receptor. Y el canal, al
tratarse de un texto parado de trabajar hasta hoy. Por sus hijos, que ahora se acercan a los 30 años, y por los que
escrito, determina cierta han venido detrás.
preparación y un menor grado Me viene a la memoria aquella conversación cuando escucho el clamor airado de los
de espontaneidad.
El registro estándar es el propio
que le piden directamente al Gobierno un puesto de trabajo. Como hasta hace unos meses
de los medios de comunicación. pedíamos un piso en propiedad. O los que esperan que haya una máquina dispuesta a quitarle la
Pero el uso de dicho registro no nieve de la rampa de su garaje tras cada nevada. La vivienda, el trabajo y la seguridad son
impide la presencia de palabras derechos constitucionales, y a las administraciones hay que exigirles que creen las condiciones
propias de un registro culto
(“emancipen”, l. 4, “clamor”, l. para que todos podamos ejercer esos derechos con dignidad. Exigir y reivindicar como
10, “constitucionales”, l. ciudadanos de una sociedad civil adulta, no como niños que le piden a papá que haga magia
16, “dirigente”, l. 18…), ni de para que desaparezca el dolor de tripa.
otras voces más coloquiales Pero buena parte de culpa la tiene la clase política dirigente. Nos tratan como si
(“engatusar”, l. 19, “dolor de
tripa”, l. 17, “papá”, l. 16, “de fuéramos inmaduros a los que engatusar con promesas que parecen cartas a los Reyes Magos.
golpe”, l. 23, “la fiesta que se Unos nos prometen el pleno empleo dos minutos antes de que estalle la locomotora de nuestra
acaba”, l. 24…). economía. Otros nos prometen la mínima fiscalidad y el tope de servicios sociales. Como si
fuéramos incapaces de comprender la complejidad del mundo en el que vivimos.
Existe toda una generación que va a crecer de golpe con esta crisis económica. Así que,
por favor, que nos hablen claro, porque ya sabemos quiénes van a pagar los platos rotos de la
fiesta que se acaba.
El Periódico, 5 de febrero de 2009.