El documento describe el seguimiento prenatal, el cual incluye la vigilancia y evaluación integral de la gestante y el feto realizada por un profesional de salud para lograr un nacimiento sano. Se recomienda identificar signos de alarma, promover el apoyo familiar y la lactancia materna, y realizar controles mensuales hasta las 32 semanas y luego controles quincenales y semanales hasta el parto. También se mencionan malas posiciones del feto y el parto de nalgas.