3. 1- Muchos países decidieron prestar más atención a
averiguar qué hace sentir bien y en plenitud a su población,
más allá de las tradicionales variables económicas. A pesar
de que su éxito sea relativo. Una de las formas para medir
la felicidad son las encuestas. También hay que tener en
cuenta que se sumaron experimentos más complejos que
miden la felicidad con más precisión: las neurociencias, que
analizan como se desarrollan y organizan los sistemas
nerviosos humanos para generar diversos
comportamientos. La felicidad es una cuestión mucho más
compleja que la acumulación de billetes. Ni siquiera quienes
se dedican a entenderla la tienen garantizada. La alegría se
diluye a medida que nos acostumbramos a su presencia.
4. 2- Hay quienes opinan que un escueto recuadro conceptual o
meras recetas matemáticas pueden vislumbrar la totalidad de lo
que ocurre siempre y en cualquier circunstancia. Y hasta ser
capaces de proveer recetas inmutables. Lamentablemente
todavía hay quienes piensan que su el modelo no se ajusta a la
realidad, es que la realidad se equivoca. Cuando el capital se
desplaza más expeditamente, es capaz de seleccionar a los
trabajadores de cualquier país. Eso hace que el poder del
capital crezca con respecto al de los trabajadores, y que los
salarios pierdan peso relativo. Para mantener su nivel de
consumo, a los trabajadores se les facilita el acceso a los
préstamos y consiguen una deuda hipotecaria. Dentro de este
capitulo podemos encontrar a Krugman quien busca conducir la
crisis y luego en medio de ella. Por el contrario, el gobernó
Kirchner busca la solución de ciertas crisis con respuestas
rápidas para calmar a las actividades comerciales.
5. 3- Con respecto a la tecnología, la inmensa
mayoría de los inventos vienen condicionados
por otros que ya existían. Esta dependencia del
sendero existe en general, pero es un
fenómeno fundamental en aquellos procesos
tecnológicos que conllevan altísimas barreras
de entrada una vez que se adopta una norma
determinada. Los Bitcoins son el primer intento
exitoso por popularizar el dinero virtual,
dejando al margen a bancos y sistemas
financieros. Su introducción ha generado un
formidable debate en el ámbito de la teoría
económica, tecnológica y filosófica, y plantea
futuros desafíos para los gobiernos.
6. 4- La atención y la memoria son recursos mucho más escasos de
lo que tendemos a considerar. Y que cuando las enfocamos en
algo, nos perdemos mucho de lo que está ocurriendo. La atención
es un recurso de “suma cero”: cuando la centras en algo, ya no
podes usarla para otras cosas. La mayoría de las veces no somos
siquiera conscientes de ello, lo cual nos lleva a metidas de pata
bastante generalizadas. El exceso de confianza nos vuelve más
jugados y propensos a tomar riesgos grande se innecesarios. En el
mundo de las finanzas – personales y profesionales – creer que
sabemos más que el resto del mercado genera decisiones
temerarias y eleva la probabilidad de terminar a la bancarrota.
7. 5- Las neurociencias tienen mucho para aportar al campo de la economía, los negocios, en
cuestiones como liderazgo toma de decisiones. El cerebro es extraordinario, es capaz de
sopesar una cantidad abrumadora de datos, y determinar y controlar las respuestas a
distintos estímulos. La oxitocina y las neuronas espejo pueden colaborar en hacer más unida
a una sociedad, pocas cosas nos alejan más del verdadero contacto con el otro como la
ansiedad. Si somos impacientes, desdeñamos el esfuerzo, la educación, la inversión, el
cumplimiento de normas. Y esto se traduce en una peor y más inestable economía.
6- El libre mercado es tan políticamente correcto que resuelve
otras cuestiones y por ello parece peligroso. No sólo porque
deja de lado otros factores importantes sino porque traduce
cierta despreocupación por los tiempos y hasta las prioridades.
Lo que suele suceder es que los ciudadanos de un mismo
grupo étnico no se juntan con personas de similares ingresos,
en lugar de construir barrios identificados con el grupo en
cuestión. Esto podría ocurrir con un problema de discriminación
agudo o por una leve preferencia a favor de juntarse con
personas de su mismo grupo étnico que los lleve a la formación
de guetos .La discriminación no siempre es negativa. A veces lo
que ocurre es que se tiene un favoritismo por un grupo
determinado.
8. 7- Los economistas han detectado situaciones del mundo real – y
fuera de cualquier laboratorio – en las que algún evento azaroso
plantea un antes y un después o bien diferencias entre grupos
muy marcados. Y luego aprovecha la comparación para medir con
mayor precisión el impacto de ciertas prácticas. No todo es tan
sencillo, sin embargo para que las conclusiones sean válidas, es
vital que los grupos a comprar sean similares en todo menos en lo
que se desea testear.
8- El impacto del aumento poblacional está teniendo un lugar muy
significativo. El número de habitantes seguirá creciendo y se calcula que
para 2100 ascenderá a10.125 millones. La tasa de natalidad se irá
reduciendo mientras que la gente irá viviendo más y más años, piensan
ciertos autores. La población tendrá distintos consumos que los actuales
y la oferta se irá adecuando a ellos. Los países no crecerán
demográficamente a igual ritmo. Si no se toman medidas para modificar
nuestro comportamiento hacia un menos consumo y un mayor ahorro
hoy, la calidad de vida a futuro se resentirá significativamente.
9. 9- Hacer más fáciles las buenas acciones suele incentivarlas y tornar los
malos hábitos un poco más difíciles o costosos puede ayudar a cambiarlos.
O al menos, a controlarlos. No se trata de decirle a la gente que debe
hacer o de prohibir las opciones más nocivas, sino de diseñar esquemas
de opciones que las releguen a un segunda plano y bajen su posibilidad de
ser elegidas. La escuela del comportamiento en las políticas públicas
prefiere describir sus ideas utilizando lo que parece un “oxímoron” y hablar
de “paternalismo libertario”.
10- Negar la existencia del azar y de la suerte surge de una necesidad humana de
controlar la mayor cantidad de aspectos posibles de nuestra vida, una neurosis
extendida que niega que todos somos, hasta cierto punto, victimas y beneficiarios
de las circunstancias. Aceptarlo no implica tomar una actitud fatalista.
10. 9- Hacer más fáciles las buenas acciones suele incentivarlas y tornar los
malos hábitos un poco más difíciles o costosos puede ayudar a cambiarlos.
O al menos, a controlarlos. No se trata de decirle a la gente que debe
hacer o de prohibir las opciones más nocivas, sino de diseñar esquemas
de opciones que las releguen a un segunda plano y bajen su posibilidad de
ser elegidas. La escuela del comportamiento en las políticas públicas
prefiere describir sus ideas utilizando lo que parece un “oxímoron” y hablar
de “paternalismo libertario”.
10- Negar la existencia del azar y de la suerte surge de una necesidad humana de
controlar la mayor cantidad de aspectos posibles de nuestra vida, una neurosis
extendida que niega que todos somos, hasta cierto punto, victimas y beneficiarios
de las circunstancias. Aceptarlo no implica tomar una actitud fatalista.