Preguntas y respuestas sobre el noviazgo católico

Preguntas y Respuestas
Sobre el Noviazgo Católico
Rey David Garcia y María José Tuarez

Copyright © 2012 Rey David Garcia
DEUS VULT
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ISBN: 9781707735945
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CONTENIDO
¿Qué es el noviazgo? ..............................................................10
¿Qué debo hacer si la persona que me gusta es de otra
religión?.....................................................................................11
¿Cuál es la diferencia entre castidad y virginidad? .............11
¿Cuáles son las heridas del pecado original en el hombre y
cuáles en la mujer? ..................................................................12
¿Cómo ha herido el pecado original al varón? ...................13
¿Cómo ayudarse mutuamente en las heridas del pecado
original?.....................................................................................18
De tu error otra puede sacar partido ...................................19
¿El matrimonio es un sacramento de sanación? ................21
¿Cómo obedecer a un varón que no sabe gobernarse a sí
mismo y a sus pasiones?.........................................................22
¿Por qué las parejas actuales no duran?...............................23
¿Cuáles son las muestras de aprecio y cariño que se pueden
hacer en el noviazgo sin que haya pecado?.........................25
¿Qué tips servirían para llevar un noviazgo santo?............25
¿Cómo sanar los errores del pasado?...................................26
¿Se deben de hablar sobre los errores del pasado con la
pareja? .......................................................................................27
¿Cómo saber si mi pareja es la que Dios quiere para mí?.28
¿Cómo manejar los celos en mi relación? ...........................29
¿Algún papel juega la pareja para corregir los celos?.........31

vi
¿Cómo llevar una relación a distancia?................................33
¿Cómo debe ser el noviazgo católico?.................................33
¿En el noviazgo podemos tener sexo si nos amamos y
tenemos planes de casarnos?.................................................37
¿Qué es licito hacer y que no es licito en el noviazgo? .....38
¿Por qué no se deben tener relaciones sexuales antes del
matrimonio?.............................................................................39
¿Qué es lo que nos santifica en el noviazgo y
posteriormente en el matrimonio? .......................................41
¿Cómo reparar las heridas que personas del pasado dejan
en la presente relación? ..........................................................42
¿Debería aceptar el único hombre que me pretende si no
aparece ningún otro? ..............................................................42
¿Cuál es la diferencia entre enamorado y novio?...............43
¿Qué hacer para que Dios sea el centro de la relación?....43
¿Cómo encontrar una pareja que ame a Dios y a la Iglesia?
....................................................................................................44
¿En qué me debo guiar para elegir un buen novio y futuro
esposo?......................................................................................45
¿Cuáles son los pilares fundamentales para un noviazgo
santo? ........................................................................................46
¿Cómo mantener vivo el amor de pareja?...........................47
¿Cómo hacer entender a mi pareja que debemos esperar al
matrimonio para tener relaciones sexuales?........................48
¿Se puede vivir en castidad después de haber faltado a esta
virtud muchas veces?..............................................................49
¿Qué es lo más importante en el noviazgo?........................49

vii
¿Qué puedo hacer si dañe a mi pareja y ahora quiero
volver a esa relación?..............................................................50
¿Se deben perdonar infidelidades en el noviazgo?.............51
¿Cuánto tiempo debería durar un noviazgo?......................51

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práctica de una auténtica vida cristiana.

10
¿Qué es el noviazgo?
En un nivel puramente natural, el noviazgo es una
relación de amistad especial que tiene como fin el
matrimonio. El noviazgo católico es una relación de amistad
entre dos personas de distinto sexo que profesan la religión
católica: hombre y mujer, y que tienen el deseo de alcanzar
su fin que es el sacramento del matrimonio.
Se debe considerar de manera muy breve lo que es el
matrimonio. “El matrimonio es una alianza por la que el
varón y la mujer constituyen entre sí un consorcio de toda
la vida, ordenado por su misma índole natural al bien de los
cónyuges y a la generación y educación de la prole, fue
elevada por Cristo Nuestro Señor a la dignidad de
sacramento entre bautizados" 1
Teniendo en cuenta las características del matrimonio
1 (CIC, can. 1055,1)

PREGUNTAS Y RESPUESTAS SOBRE EL NOVIAZGO CATÓLICO
11
cristiano se hace evidente que es necesaria una preparación,
esa preparación se debe dar justamente el noviazgo.
¿Qué debo hacer si la persona que me gusta es de otra
religión?
Si eres una persona muy firme en tu fe, que conoces la
historia de la Iglesia, las Sagradas Escrituras, tienes noción,
al menos básica, de lo que es la apologética y estás dispuesto
o dispuesta a aprender más aun y aparte de todo lo
mencionado amas sobre todas las cosas a Dios y a su Iglesia
entonces puedes tener una relación con alguna persona de
otro credo, siempre que la otra persona se comprometa a
que los hijos frutos de este matrimonio sean educados en la
fe católica.
De no ser como acabamos de decir no conviene la
relación.
¿Cuál es la diferencia entre castidad y virginidad?
Virgen es la persona que no ha tenido experiencia sexual,
pero sólo será virtud cristiana cuando se guarda por amor al
Reino de los cielos. Está compuesta por dos aspectos, el
físico y el espiritual.

12
El aspecto físico es cuando la persona no ha tenido
ningún acto sexual. El aspecto espiritual es la resolución de
abstenerse de todo acto sexual hasta el matrimonio o la vida
consagrada y va más allá de la integridad corporal porque es
un acto de la voluntad. La virginidad es un estado natural.
Se nace virgen, se debe crecer virgen y se puede vivir virgen
toda la vida.
Por otro lado, la castidad es la virtud que gobierna y
modera el deseo del placer sexual según los principios de la
ley natural, de la ley de Dios y del respeto hacia el otro. Es
el hábito de usar del sexo correctamente, moderando y
ordenando las apetencias sexuales para que sean razonables.
¿Cuáles son las heridas del pecado original en el
hombre y cuáles en la mujer?
La naturaleza humana es buena por ser creada por Dios.
Pero que ha quedado herida a causa del pecado original.
Nos enseña que nuestra naturaleza necesita ser sanada. Y
que, si no es sanada por la Gracia de la fe y por los
sacramentos, que son los medios de Gracia que Jesús nos
vino a traer, va a seguir siempre herida y esas llagas se van a
ir infectando cada vez más.
La principal herida del pecado original consiste en que la
inteligencia ya no conoce bien a Dios como su bien

13
principal; el bien que haría feliz al Hombre. Entonces, los
instintos animales y los deseos del alma se desordenan y ya
no obedecen a la razón.
El pecado original ha herido al varón de una manera y a
la mujer de otra. Y es bueno que la mujer sepa cómo está
herido el varón y que el varón sepa cómo está herida la
mujer para que se puedan entender. Porque de esa
ignorancia nace el desencuentro entre ambos.
¿Cómo ha herido el pecado original al varón?
Lo ha herido precisamente en la esfera instintiva, en lo
que tiene de común con los animales, en el desequilibrio de
la concupiscencia de la carne: la gula y la lujuria. Esto quiere
decir que la fuerza sexual, el instinto sexual del varón no
obedece ya a su razón, se descontrola. Por la lujuria el varón
pierde la cabeza: se enceguece o juzga precipitadamente,
puede quemar el rancho, hace cualquier desastre, no piensa,
se hace imprudente, no escucha consejo, se hace infiel.
¿Por qué? Porque la pasión no se deja gobernar por la
razón. Pero ¿cómo es posible lograr el dominio de la pasión,
el dominio de sí mismo? Por un amor muy grande, que le
permita sacrificar su pasión, en aras de un amor mayor: por
el amor de amistad a la esposa, pero fundamentalmente por
el amor a Dios, que purifica el amor a la esposa.

14
Cuando se ama a Dios como Padre, cuando se aspira a
vivir como hijo; cuando se sabe, porque lo enseñó Jesús, que
al Padre le desagrada mucho el desorden sexual del varón:
no sólo el adulterio, sino aún la mirada lujuriosa sobre una
hija de Dios, que por lo tanto es su hermana, se establece en
el corazón, como una gracia, el autodominio.
Desde la fe, por la gracia, el varón tiene los mejores
motivos y los resortes más firmes para adquirir la virtud de
la castidad, que le da el dominio de su pasión sexual y lo
libera de su tiránica servidumbre. Porque la pasión sexual
desordenada, se hace obsesiva y se convierte en una
verdadera esclavitud; en una cárcel en que queda prisionero
el varón.
Hasta piensan algunos que el varón no puede sustraerse
de ningún modo al imperio del instinto sexual. Y es verdad,
si se ignora que la situación de la naturaleza humana herida
por el pecado original es sanable por la gracia. No ven salida
porque piensan que ante esta pasión el varón no tiene
libertad. Nos miran a los que hablamos del pecado original,
de gracia y de castidad, como a loquitos. "¿Pero de qué está
hablando este cura represor? Esto es imperioso. La
naturaleza del varón es así. Es buena. No la tiene que
reprimir". Pregúntenle a la esposa abusada o a la traicionada,
si eso la hace feliz. ¡No, señor! La naturaleza no es así, la
naturaleza herida es así. Pero la naturaleza sanada por la

15
gracia es muy distinta. Y la naturaleza sanada le da al varón
una libertad inmensa, el dominio de sí mismo, el gobierno
de todas las cosas de su vida, de su familia, del hogar, de la
educación de sus hijos, del trabajo… un autodominio y una
libertad de juicio, propios del hijo de Dios. Lo constituye en
caballero, dueño de sí, generoso y prudente; en patriarca, en
hombre sano, justo, en varón casto. Esto no es una fantasía.
Ha sido el tipo de varón que generó la fe católica.
Ese es, por otro lado, el verdadero compañero y amigo
que la mujer anhela. Porque a la mujer sana no la hace feliz
el varón lujurioso. A la larga la decepciona y termina
fastidiándola e inspirándole desprecio. Cuando ella no
alcanza a comprender que se trata de una verdadera herida
del pecado original en el varón, se inclina a irritarse con él,
como si fuera culpable de lo que, en su raíz, es una pena
inculpable del pecado original, una herida en la naturaleza
viril, digna de misericordia y no de ira. Pero que exige ser
sanada. A la mujer le cuesta comprender lo que le pasa al
varón, porque ella no ha sido herida de la misma manera.
En ella la instintividad no eclipsa el afecto ni las capacidades
del alma. En la mujer la sexualidad y el afecto están unidos
armónicamente. El hachazo del pecado original en la
instintividad fue en el varón. En éste la sexualidad puede
deshumanizarse, despersonalizarse, separarse de la amistad
esponsal.

16
En el varón, a consecuencia del pecado original, la
sexualidad tiende a recaer en lo instintivo y a disociarse del
afecto, eclipsando o interponiéndose en la comunicación
espiritual, personal, con la mujer. El varón se queda en el
cuerpo y no llega al alma. Su afán posesivo apunta al cuerpo
de ella.
Esta herida en la sexualidad del varón, si no se sana,
empieza a despersonalizar a la mujer. De modo que el novio
ya va al encuentro con su novia obsesionado con el cuerpo
de la novia y tiende a perder progresivamente de vista el
alma de la novia, a medida que pierde pie en la lujuria. Por
eso, la relación sexual tiende a despersonalizarse aunque, al
comienzo, la novia pueda no darse cuenta de lo que le está
sucediendo al novio.
Ella se ilusiona. Herida por el pecado original
precisamente en las facultades del alma, en la imaginación,
no lo advierte. Confunde lo que el novio es, con lo que ella
quiere que sea y se imagina que él es. Por lo general la chica
enamorada es una mujer ilusionada: idealiza al varón…
¡Cuántas mujeres se dieron cuenta que se casaron con el
hombre equivocado, porque cuando despiertan de su sueño
advierten que lo habían idealizado! La mujer, herida en el
afecto, suele idealizar a los que ama y engañarse.
Las mujeres están llamadas a ser maestras de la amistad.
La mujer tiene una vida interior rica, compleja. Y como el

17
matrimonio es un camino de amistad, a ella le toca en esto
el rol principal. Pero a causa del pecado original, su
posesividad aspira a apoderarse del afecto del varón, a
dominarlo, a tener acceso al alma de él y a controlarla. Y el
varón teme entregársela por temor a ser controlado. Es
debido a eso que la que debiera ser maestra de amistad a
menudo se equivoca. Sus sombras la traicionan.
Es que a la mujer, el pecado original la hiere
precisamente en los apetitos del alma. Se los exagera y
descontrola. Como Eva está inclinada a desear la ciencia del
bien y del mal y a adquirir el poder divino, que le permita
realizar el bien y conjurar los males que teme. La mujer peca
por exceso de deseo del bien y por temor de los males.
Tiende al ejercicio ilegal de la divinidad y a la usurpación de
la divina Providencia. Ella quisiera tenerlo todo bajo su
control: su novio, su esposo y sus hijos. El presente y el
futuro.
Nuera y suegra chocan porque no puede haber dos
mujeres mandando en la misma casa como no puede haber
un auto con dos volantes ni dos caracoles en la misma
cáscara ni dos dioses en el cielo. Para ella su casa es una
prolongación de sí misma. Hasta la hija cuando se hace
mujercita, empieza a forcejear con su mamá. La mujer deja
de ser maestra de amistad cuando su afán de control la lleva
a rivalizar dentro de su territorio.

18
En cambio, los varones son compinches. Si son buenos
hacen un club. Si malos una manada. Se asocian para el
deporte, para divertirse, para pecar. Hay que levantarlos con
amores e ideales grandes, que los motiven para dar la vida
por ellos... y por ella; que está llamada a ser ‘la dama´: el ideal
encarnado de un ‘buen caballero´.
¿Cómo ayudarse mutuamente en las heridas del
pecado original?
Lo que da duración a la relación matrimonial y a la
amistad matrimonial es precisamente esa amistad. La
pasión, el apetito posesivo, no sirve, no fundamenta nada
en forma duradera y es la causa principal de las infidelidades
del varón, y después, de ella.
La joven que se entrega a su novio lo hace por lo general
como una concesión, con el fin de profundizar la intimidad
de la relación. Otras veces para adquirir dominio y asegurar
la posesión del novio. Otras veces, cediendo, por temor al
abandono. No lo haría si supiese el mal que le hace tanto a
su novio como a la futura relación esponsal entre ambos. Al
condescender con la lujuria del varón o al instrumentarla
más o menos conscientemente, no advierte que lo está
sumergiendo, muy a menudo, en una obsesión física y
orgánica que tiende a enturbiar las demás dimensiones de la

19
relación interpersonal y pone las causas de futuras
infidelidades.
La lujuria lo fija al varón con una fuerza obsesiva muy
grande al cuerpo de la mujer, el cual se convierte en un
obstáculo para que él pueda atender y al alma de ella. El Don
Juan, personaje lamentable de la literatura castellana, dio
nombre a un tipo de varón que va de una mujer a otra,
porque no puede entablar amistad estable, con ninguna.
Seduce y luego abandona porque no sabe atarse por amistad
fiel. Y no lo puede porque no es dueño de sí. Va de cuerpo
en cuerpo porque nunca puede asomarse al alma para
establecer un vínculo personal con la mujer. Es el varón no
redimido de la herida del pecado original.
De tu error otra puede sacar partido
Ustedes me disculpan si yo repito aquí ciertos términos
que uso en el Confesionario. Cuando ellas me dicen que han
tenido relaciones con su novio, les digo: "¡No sabés el daño
que le hiciste! Cebaste al tigre con carne. Después va a ir
donde encuentre carne. Estás sembrando la infidelidad en
él. Le pusiste un collarcito y ahora cualquiera va y le pone la
cadena." Alguna se asusta y empieza a reflexionar. La
mayoría, ya lo presentía vagamente y no les cuesta reconocer
en mis dichos la formulación clara de lo que intuían. ¡Es así!

20
Condescendiendo con la lujuria varonil, la mujer siembra la
infidelidad. Después vienen los dramas: ¡Infiel! Pero ella ha
vivido no solo el noviazgo sino después también largos años
de matrimonio cediendo a la lujuria del esposo, en vez de
ayudarlo a superarla. A veces hasta fomentándosela,
manipulándolo mediante ella; ilusionándose con que era una
forma de atárselo, controlarlo, dominarlo. No ha hecho
nada por sanarlo.
Alguna ha esperado ganarse a la larga el amor de él
aceptando jugar a su manera. A ella le pareció - o le dijeron
otras - que eso es así, que es natural. "Ellos son así. Todos
piensan en lo mismo. Todos quieren lo mismo". Ella
incurrió en el fatalismo de creer que la lujuria varonil es un
hecho irremediable, una condena. ¡No, señor! No es un
hecho irremediable. ¡Es un grave daño, una tremenda herida
en la naturaleza del varón!
¿Nadie le ha dicho nunca, ni ha advertido que eso no
sólo podía no ser así, sino que hubiera debido no ser así?
¡Dios y la Iglesia se lo decían! Se lo decía la historia: los
creyentes vivieron, históricamente, sobre la tierra, el
verdadero amor conyugal.
Hay que abrir los ojos a la disimetría interior del varón y
la mujer. He dicho en otro lugar que: "El varón quiere una
casa para tener una mujer y la mujer quiere tener un hombre
para tener una casa" [El lazo se rompió y volamos p. 31].

21
Los dos quieren las mismas cosas pero de diversa manera.
Los dos padecen también los mismos vicios capitales, pero
de forma disimétrica. La gula del varón es diferente de la
gula de la mujer: él tiende a ser comilón y ella a ser golosa.
La lujuria los afecta a los dos, pero de diversa manera: él
quiere poseer el cuerpo de la mujer, ella quiere poseer el
alma del varón. Y así podríamos recorrer la lista de los
pecados capitales.
A causa de esa disimetría de las heridas del pecado
original, en vez de procurar el bien del otro, cada uno
instrumenta o trata de aprovecharse de la debilidad del otro.
Y en todo caso, como no se comprende que se trate de una
herida, digna de misericordia, cada uno termina irritándose
con la herida del otro. La mujer se irrita con la posesividad
física del varón y el varón con la posesividad afectiva de la
mujer.
¿El matrimonio es un sacramento de sanación?
El sacramento del matrimonio ha sido instituido como
un sacramento de sanación de las heridas del pecado original
en el varón y la mujer. Y los esposos han de ser, el uno para
el otro, ministros de esa sanación. Por eso, la esposa debe
colaborar a sanar en el esposo la herida de la lujuria, y el
esposo debe colaborar a sanar en la esposa la herida del

22
afecto insaciable, los deseos desorbitados del alma y los
terrores correlativos. Los efectos sanadores del sacramento
son respectivamente: la castidad y la obediencia.
Mortificación de los instintos en el varón y de los deseos de
la voluntad propia en la mujer.
Por eso se necesitaba un sacramento de sanación. Para
lograr que varón y mujer, heridos como vienen de
nacimiento por el pecado original; y condenados al
malentendido y al desencuentro perpetuo; pudieran sanarse
y vivir la felicidad conyugal a la que Dios Padre los había
destinado "en un principio". La historia demuestra que no
es utopía.
Jesús vino no solo a salvarnos como individuos, vino a
salvar nuestros amores, vino a salvar nuestras relaciones,
vino a salvar y a posibilitar que hubiera varones no sólo
capaces sino felices de morir a su pasión por amor a su
esposa; que le infundieran a la esposa una confianza tal, que
ellas fueran capaces de confiarse en su juicio y obedecerle.
Cosa que para la mujer es más difícil que para morir.
¿Cómo obedecer a un varón que no sabe gobernarse a
sí mismo y a sus pasiones?
Puesto que la lujuria es un vicio que se opone a la
prudencia, cuando la mujer comprueba la imprudencia del

23
esposo ¿cómo le va a obedecer?¡ no se puede confiar de él!
Aunque ella no lo relacione con la lujuria, al fin se da cuenta
que es un varón que no se gobierna por su razón. ¡Claro! si
no gobierna su pasión, ¿cómo va a gobernar su casa? ¿Y
cómo va a confiar el corazón de la esposa en el juicio de un
hombre que no tiene juicio, porque actúa arrastrado por el
impulso de su pasión y no gobernándose con su razón y su
cabeza?
La sabiduría de los refranes populares reconoce que el
hombre pierde la cabeza por dos motivos: la ira y la lujuria.
El varón se ciega, pierde la cabeza, de bronca o por una
mujer. También se dice que se descontrola en la comida y la
bebida.
Frente a esta debilidad del varón para frenar sus
instintos: ¿Qué tiene que hacer la joven? La joven se tiene
que sentir capaz de formar a su novio para ser amigo,
mediante una amorosa exigencia. No ha de temer pedir ella
¡a él! la prueba de amor: "probá que me querés siendo casto,
tratame como amiga". Ella lo sanará fomentando la amistad
primero.
¿Por qué las parejas actuales no duran?
Porque la sexualidad, mejor dicho, la reducción de la
sexualidad a lo genital, no es cemento que pegue bien. Una

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sexualidad genitalizada y despersonalizada, no une
duraderamente. Al contrario, al varón lo puede llevar de una
en otra. El varón tiene que asumir, que encontrará su
felicidad entregando su vida por amor, muriendo. Y sólo
puede hacerlo si su corazón está animado por un gran amor,
por el amor del Padre, por el amor de Dios, y de la esposa
que le dio.
Son admirables esos padres de familia que, sin saber o
sin declamar la teoría, dan su vida en el trabajo, mueren por
su familia, entregan su vida y se saben tragar humillaciones
de sus jefes. Están muriendo por amor. Son más numerosos
de lo que pensamos los varones cristianos que todavía, de
una manera u otra, o porque lo han aprendido del Espíritu
Santo, viven esta amistad matrimonial y gustan del vino
mejor que Jesús da a los matrimonios, como en las Bodas
de Caná.
En efecto, en el matrimonio, el vino mejor viene al final:
la amistad matrimonial. El agua significa el amor posesivo:
me tomo al otro para saciar mi sed. El vino mejor, el que
me alegra, significa la amistad: el otro me regocija con su
bien.
Ambos llegan a descubrirlo ayudados por Jesús. Ella
puede tener las cosas más claras y ayudarlo a él, por estar
llamada por naturaleza a ser la maestra, la cultivadora de la
amistad. Pero para no cometer errores fatales para su

25
alumno, ella tiene que sanarse de su posesividad y del miedo
a perderlo. No vacilar. Nada de: "¡Ah, todos lo hacen! Si no
cedés te deja" ¡No! A ella le corresponde poner las reglas y
condiciones: "No. Si querés, así. Y si no, no. Conmigo es
distinto". ¡Más vale soltera que mal casada y que te deje
ahora que casada y con hijos! El peor error de la maestra es
el deseo de conservarlo a toda costa; el miedo al abandono.
Es precisamente por su miedo a perderlo que lo echa a
perder.
¿Cuáles son las muestras de aprecio y cariño que se
pueden hacer en el noviazgo sin que haya pecado?
Se pueden dar abrazos y besos momentáneos, ligeros y,
rápidos, no prolongados, sin dejarse llevar por lo sensual.
¿Qué tips servirían para llevar un noviazgo santo?
Entre las cosas que más ayudan a llevar un noviazgo
santo es que ambos lleven una autentica vida de oración.
Cuando no es el caso las cosas son mucho más difíciles, las
cruces son más pesadas de llevar y en ocasiones casi
imposibles. Por eso es fundamental que ambos tengan el
deseo común de llevar una autentica vida cristiana.

26
En el caso de que uno de los dos no tenga deseo de vivir
santamente es aún posible vivir santamente si el que desea
vivir santamente es firme en sus principios.
No es sano y de ninguna forma recomendable el entablar
una relación con una persona que no solo no tiene un deseo
de vivir en santidad sino muy al contrario, desea vivir de
modo pecaminoso, y esto no es necesario que sea declarado,
con la forma de vida y falta de enmienda es suficiente para
darse cuenta de que el futuro no será diferente si no hay ni
un mínimo esfuerzo por mejorar.
¿Cómo sanar los errores del pasado?
La mejor forma de sanar es empezar de nuevo, suena
irónico, pero no hay otra mejor forma de sanar sino
empezar de nuevo. Cuando digo empezar de nuevo quiero
decir perdonar y tomar la decisión de empezar una vez más.
Dos elementos fundamentales para ser eficaces en su nuevo
comienzo serían los sacramentos y la vida de oración de
forma intensa y constante. Si queremos la gracia y ayuda de
Dios solo la obtendremos si a través de los canales de su
gracia, estos son los sacramentos y la oración.

27
¿Se deben de hablar sobre los errores del pasado con
la pareja?
Ambos deben de estar conscientes de que los errores del
pasado pueden hacer dos cosas, una destruirlos, la otra
hacerlos más fuertes. Al decir que los errores del pasado los
hace más fuertes de ninguna manera recomiendo cometer
errores y afectar a sus relaciones presentes con el “fin” de
fortalecer su relación. No aquí me refiero a los errores que
ya sucedieron y que se supone están a nunca mas
cometerlos.
Los errores del pasado se pueden calificar en dos:
Aquellos que se cometieron antes de conocer a su presente
pareja y aquellos que se cometieron con la pareja presente,
por la razón que haya sido. Al hablar de los errores que se
cometieron antes de conocer a la pareja no deberían de
ocultarse si de una o de otra forma la pareja conocerá esos
errores. Para esto debemos cultivar una confianza desde la
amistad, y antes de aceptar la pareja o antes de pedir
formalizar el noviazgo se deberían de hablar de esas cosas,
más tarde pueden ocasionar gran daño, y será más difícil de
superar por que se sentirá engañado o burlado si es hombre,
si es mujer se sentirá mal también, y no es saludable ni para
uno ni para el otro.
Por otro lado, los errores que no podrá de ninguna

28
forma nuestra pareja y que no necesita saberlos no hay
obligación de hablarlos si no afectara la relación de ninguna
forma. No hay obligación de hablarlos no quiere decir que
si desean hacerlo no deben de hacerlo, si tienen el deseo y
la confianza para confesar esos errores adelante. Sin
embargo, al hacerlo deben estar conscientes que abrirán
heridas en sus parejas que les podría tomar mucho tiempo
sanar.
¿Cómo saber si mi pareja es la que Dios quiere para
mí?
Esta pregunta es difícil de contestar y a la misma vez
fácil. En primer lugar, difícil porque la mujer o el hombre
son seres humanos que como todo ser humano pueden
cambiar su conducta para bien o para mal. Sin embargo,
teniendo en cuenta las reglas de discernimiento de San
Ignacio de Loyola seria la persona correcta si no acerca a
Dios e incorrecta si nos aleja de Dios. A partir de esta regla
podemos ver que tan conveniente o nociva es la persona
para nuestra amistad con Dios, si la persona afecta para mal
mi relación con Dios esa persona no puede ser buena para
mí, para mi salvación. Si la persona aporta bondad a mi
relación con Dios esa persona es buena para mí. Dios la
aprueba. Ahora debemos tener en cuenta que puede haber

29
muchas personas buenas del sexo opuesto que aportan
bondad a mi relación con Dios y en ese caso se puede hacer
lo que recomienda san Ignacio, entre más a Dios me lleve
es mejor. Sin embargo, algunas veces debemos elegir no
solo basados en este aspecto, sino en muchos otros que son
de suma importancia para una relación equilibrada.
¿Cómo manejar los celos en mi relación?
Los celos ordenados son buenos, de ahí que Dios sea
celoso y en muchos pasajes de las Sagradas Escrituras repita
constantemente que Él es un Dios Celoso.
Jesucristo sintió celos por la Casa de Dios, el Templo de
Jerusalén, y por eso hizo un látigo y sacó a latigazos a los
vendedores del templo y arrojó al piso las mesas.
Admiramos mucho el celo de los apóstoles y santos. Por esa
razón los celos rectamente ordenados son buenos.
Los celos, del mismo modo que la violencia es
indiferente ni buena ni mala, pero así puede llegar a ser
bueno o malo según estén ordenados o no.
Los celos desordenados pueden ocasionar grandes
daños a la relación de pareja, especialmente cuando los celos
son excesivos e irracionales. En este caso la persona que los
tenga debe de trabajar arduamente por ordenarlos antes de
arruinar la relación. Los celos desordenados pueden acabar

30
con la relación cuando uno de la pareja no coopera para la
corrección de tal defecto. Los celos como cualquier otro
defecto lo deben de combatir en pareja.
Algunos medios que son de gran ayuda son:
• Ser crítico con su percepción. Es decir, analizar
si son justificados o no tienen ni base ni
fundamento. Si no se tiene ni base ni
fundamento es necesario ser muy juicioso y
hacerse a la idea que no hay razón para celar de
forma desordenada.
• Procurar ver todos los detalles y muestras de
aprecio que nuestra pareja hace por nosotros.
• Si los celos fueran excesivos y no controlables
se debería buscar ayuda espiritual y psicológica,
pues sería un desorden grave en la persona.
• Sobre todo, para superar cualquier desorden hay
que acudir al auxilio del Cielo, acudir a Dios en
la oración.

31
¿Algún papel juega la pareja para corregir los celos?
Los celos muchas veces nacen de la inseguridad propia,
pero no en pocas ocasiones nacen de la forma de ser de la
pareja, es decir de su actitud, de su forma de pensar, de
actuar, y de su pasado. Por esta razón el papel de la pareja
es importantísimo, porque si no se dan razones es menos
probable que existan los celos.
Para ordenar los celos se necesita ayuda de la pareja. Si
la pareja no ayuda en dar seguridad, demuestra que ama y
respeta el varón o la mujer, nunca habrá de superar los celos,
sino que se desordenarán aún más.
La persona puede ayudar y de una forma muy efectiva a
su pareja a no tener ni sentir celos de la siguiente forma:
• Teniendo mucha delicadeza en su trato con la
pareja, así como con los demás.
• Vestir modestamente, esto vale tanto para los
hombres como para las mujeres.
• Demostrar el amor que se tiene con hechos, así
como con palabras.
• No dar ocasión a celos, es decir, ser muy
respetuosa o respetuoso con el trato a los

32
demás.
• No dando espacio a bromas fuera de lugar con
la pareja o con terceros. No tener ni tolerar
conversaciones ni en la presencia ni en la
ausencia de la pareja.
• Y ser muy cuidadoso o cuidadosa con estos
detalles que, aunque parezcan pequeños son los
que hacen la diferencia.
• Mantener a la pareja informada de las cosas que
se hacen, así como de con quienes se realizan,
esto es gran caridad para la pareja que padece
este particular defecto. En última instancia no
es otra cosa que una forma de demostrar el
amor que se tiene y el gusto por compartir su
vida y cada cosa con la persona a la cual se ama.
• La mayor caridad es orar por la persona amada
cuya cruz es pesada, encomendarlo mucho a
Dios.
Cuando se inicia una relación con fines al matrimonio
no pueden simplemente ver los defectos o flaquezas de la
pareja y dejarle a su suerte con sus luchas, no, la pareja debe
luchar unida contra los defectos del uno como del otro,

33
deben tomar conciencia de que serán uno y no dos. Por
tanto, las cruces de uno son las cruces del otro, así como las
fortalezas de uno son también del otro. No se puede de
ninguna forma abandonar a la pareja con sus luchas, se le
debe ayudar.
¿Cómo llevar una relación a distancia?
Una relación a distancia es un reto. Es un tipo de relación
muy difícil, muy doloroso, y será un tema que abordaremos
con mayor detalle en otro libro por la razón que es tan
delicado el tema, en el cual compartiremos nuestro
testimonio. Por ahora solo se puede decir que iniciar una
relación a distancia puede ser muy bueno, así como puede
ser muy peligroso. Peligroso porque las personas se
exponen a grandes peligros como extorción, robo,
secuestro, entre otros peligros. Pero puede ser bueno si se
inicia con el pie derecho y no se dan pasos en falso. Es decir,
siendo sumamente prudente en todo el sentido de la palabra.
¿Cómo debe ser el noviazgo católico?
El noviazgo debe ser vivido en amor y caridad el uno
por el otro. El noviazgo es para conocerse, pero ese

34
conocerse tiene ciertos límites que se deben respetar para
que el noviazgo tenga frutos buenos. En el noviazgo no son
licitas las demostraciones de amor propias de los cónyuges
que han sido bendecidos con el sacramento del matrimonio.
Estas demostraciones de amor, propias de los cónyuges son
el acto sexual que une a la pareja tanto física como
espiritualmente. Entre las demostraciones de amor propias
de los cónyuges están también las caricias y besos de
carácter sensual.
Por otro lado, es bueno traer a punto algunos
pensamientos del libro Para Salvarte, del P. Jorge Loring:
Para los dos: El noviazgo es querido por Dios, pues Dios ha
hecho el matrimonio indisoluble, y esa persona a la que vas
a unirte para toda la vida, debes conocerla bien antes de
casarte con ella. Por lo tanto, es natural -y así lo quiere Dios-
que durante cierto tiempo tengáis más confianza entre
vosotros y un trato más íntimo para conoceros mejor. Pero
debéis ser muy discretos en las manifestaciones de amor, si
no queréis manchar vuestras relaciones. No podéis
permitirle a vuestro cariño muchas de las cosas que él os
pide con fuerza. Es necesario que aprendáis a llevar vuestro
noviazgo con la austeridad que exige el Evangelio. Si
sembráis de pecados el camino del matrimonio, ¿podréis
esperar con confianza que Dios os bendiga después?
¡Cuántos matrimonios lloran los pecados que cometieron de

35
solteros!
Hay que llegar «puros» al matrimonio. El mejor regalo
de bodas que espera una persona es la virginidad de su
pareja. Toma este precioso lema: «Fieles hasta la muerte y
puros hasta el altar». Algunas veces las chicas ceden ante las
exigencias inmorales del hombre a quien aman; no se
atreven a resistirle. El muchacho te quiere pura, fragante
como una flor. Si te marchitas pierdes tu atractivo. Mi
experiencia sacerdotal me ha hecho conocer varios casos
que se decidieron a elegir a una chica antes que a otra,
atraídos precisamente por la intransigencia en la pureza que
en ellas habían observado. Y es que los varones cuando
buscan una «chica-plan» para divertirse y aprovecharse, la
quieren fresca; pero cuando lo que buscan es una novia en
serio, la quieren de una pureza intachable. A nadie le gusta
comerse las sobras que otro dejó en el plato. Por eso la
pureza es uno de los mayores tesoros de una muchacha. Un
hombre, como Dios manda, se avergüenza de que su mujer
haya sido una aventurera. Mira lo que decía un joven en una
carta: «¿Cómo me gustaría mi futura esposa? Más bonita de
alma que de cuerpo, aunque sin descuidar esto último. Más
piadosa que rezadora. Con más cultura religiosa que de
cualquier otro tipo, aunque no desdeñe la cultura general».
No he añadido ni una palabra. Así piensan los jóvenes
formales cuando hablan en serio. ¿Quieres en resumen unas

36
cualidades femeninas que cautivan a los muchachos? La
sencillez, el encanto, la sonrisa, la delicadeza, la amabilidad,
la servicialidad, la dulzura, el candor, unidas todas a una
sólida piedad y a una pureza intachable.
Quien profanó tu cuerpo no tiene dificultad en profanar
tu fama: ¡Lo que hizo contigo se lo contará a sus amigos!
¿Puedes imaginarte los comentarios que harán de ti? ¡Qué
vergüenza! Esto ocurre con mucha frecuencia; créeme. El
hombre que pide libertades impropias a una mujer antes de
la boda, puede hacerlo porque la desea con violencia, con
pasión desenfrenada, pero ten por cierto que no la ama
bastante para protegerla contra el animal que hay en la
propia naturaleza masculina. Si tu novio pretende de ti cosas
que no admite tu conciencia, recházalo, y cuanto antes,
mejor. No te hará feliz. Lo que tiene no es amor a ti, sino a
sí mismo, a su concupiscencia y a su egoísmo. Si te amara a
ti, buscaría tu bien por encima de sus apetencias. Y si
prefiere sacrificar tu pureza, tu conciencia y tu alma a su
apetito desordenado, ¿cómo vamos a creernos que te ama a
ti? Quien te ame únicamente podrá cegarse en un momento
de pasión, pero al chocar con tu rectitud intransigente,
reconoce su falta, te pide perdón y se siente orgulloso de tu
virtud.
No lo olvides. Los pecados impuros con tu novio te
hunden a ti y le hunden a él. Por eso es mentira cuando te

37
dice para que cedas: «es que no me quieres; parece que no
te intereso; qué fría eres». Ataca tus sentimientos para
rendirte. Pero esto es un truco muy viejo; si caes en la
trampa, te arrepentirás. Y si él te quiere de verdad, también
se arrepentirá de haberte hecho caer, pues, te repito, los
varones no quieren casarse con las libertinas. Esto ocurre
siempre entre los muchachos que valen. Y si algún
muchacho prefiere casarse con una desvergonzada, porque
es bonita o tiene buen tipo, ese muchacho es tonto. Creer
que la belleza de su mujer le va a hacer feliz en el matrimonio
por encima de otras cosas, es no tener cabeza. Y desgraciada
la que se casa con un tonto. Pero en fin, tonto él y tonta ella:
¡Tal para cual!
Si Dios pide pureza a las chicas, no es por capricho; sino
porque es necesario para la felicidad de su matrimonio. No
me digas que cedes por amor a él. Todo lo contrario. Si le
amas, no puedes ceder; pues pecando le haces el peor de los
daños: le condenas al infierno. Si le amas, sálvale. Aunque
esto exija sacrificios. Dejarle pecar no es amarle, es matarle.
¿En el noviazgo podemos tener sexo si nos amamos y
tenemos planes de casarnos?
En el noviazgo no se deben de tener sexo, el sexo o
relaciones sexuales son exclusivas de los matrimonios, el

38
sexo o las llamadas relaciones sexuales fuera del matrimonio
es fornicación. El catecismo de la Iglesia Católica en el
numeral 2353 dice al respecto: “La fornicación es la unión
carnal entre un hombre y una mujer fuera del matrimonio.
Es gravemente contraria a la dignidad de las personas y de
la sexualidad humana, naturalmente ordenada al bien de los
esposos, así como a la generación y educación de los hijos”.
Así mismo en la Iglesia aconseja de los novios a
guardarse intactos para sus cónyuges a los cuales se habrán
de donar en su totalidad y en toda su pureza. En el
catecismo dice “Los novios están llamados a vivir la castidad
en la continencia. En esta prueba han de ver un
descubrimiento del mutuo respeto, un aprendizaje de la
fidelidad y de la esperanza de recibirse el uno y el otro de
Dios. Reservarán para el tiempo del matrimonio las
manifestaciones de ternura específicas del amor conyugal.
Deben ayudarse mutuamente a crecer en la castidad.”
¿Qué es licito hacer y que no es licito en el noviazgo?
En respuesta a esta pregunta nos limitaremos a
responder con una síntesis que hace el P. Miguel Fuentes de
un artículo del P. Buela. Y dice así: “Podemos sintetizar la
doctrina moral sobre las afectuosidades en general diciendo
lo siguiente:

39
• son lícitas las demostraciones de afecto,
aceptadas por las costumbres y usansas, que son
signo de cortesía, urbanidad y educación;
• son ilícitas las expresiones púdicas (abrazos,
besos, miradas, pensamientos, deseos) con la
intención expresa y deliberada de placer venéreo
o sexual, aunque no se tenga voluntad de llegar
a la relación sexual completa;
• también son ilícitas cuando, aun sin tener
intención deliberada de placer venéro o sexual,
son ocasión próxima de actos pecaminosos
internos (malos pensamientos, deseos, etc.);
• con más razón son ilícitas las relaciones sexuales
completas.
En resumen: ‘reservarán para el tiempo del matrimonio
las manifestaciones de ternura específicas del amor
conyugal’ (Catecismo de la Iglesia Católica, nº 2350).”
¿Por qué no se deben tener relaciones sexuales antes
del matrimonio?
Dentro del noviazgo no se debe tener relaciones sexuales

40
por varios motivos:
• Primero: porque es un pecado, las relaciones
sexuales entre el hombre y la mujer que no son
marido y mujer y que tienen planes serios de
casarse se le llama fornicación. La fornicación es
un pecado mortal. Por esta razón no deberían
de tener relaciones sexuales antes del
matrimonio.
• Segundo: Porque ninguna persona que en
realidad ama a su pareja la llevaría a pecar de tal
modo que si esa persona muriera en ese estado
terminaría inevitablemente en el infierno por
toda la eternidad. Nadie que ame de verdad
desea el infierno o quiere el infierno para su
pareja.
• Tercero: Porque aún no son marido y mujer. De
las relaciones sexuales puede resultar un bebe,
ese bebe nacería fuera de un matrimonio si bien
le va, y si no pueden ser lo suficientemente
responsables como para hacer las cosas como se
deben de hacer entonces es muy posible que la
vida de ese bebe corra peligro.

41
• Cuarto: Porque el verdadero amor sabe esperar.
La prueba más grande de amor es la espera. Los
que no saben esperar no saben amar, saben
darse al placer, no al amor.
Se podrían enumerar más, pero no hay necesidad, con
las ya mencionadas es suficiente para un entendimiento
honesto.
¿Qué es lo que nos santifica en el noviazgo y
posteriormente en el matrimonio?
Lo que santifica el noviazgo y posteriormente el
matrimonio es el amor. El amor de Dios en nosotros. La
persona se santifica viviendo en gracia y haciendo sus
deberes por amor y con amor. La persona que más ama más
se santifica, el amor ciertamente no es solo un sentimiento,
es más una decisión, un acto de la voluntad guiado por la
inteligencia. En esto consiste el amor humano, el amor es
alimentado por la gracia de Dios y la propia voluntad y a la
vez es cuidado por la inteligencia.

42
¿Cómo reparar las heridas que personas del pasado
dejan en la presente relación?
La forma de reparar las heridas que las personas del
pasado dejan en la presente relación no se reparan sino con
el tiempo, la oración y los actos de amor por parte de ambos.
No es un trabajo de uno solo, es de ambos. Puede ser un
tiempo breve, o puede tardar mucho tiempo según la
persona y el hecho que abrió la herida. Pero se puede, solo
que no hay que olvidar que es un proceso, no es un acto
instantáneo o de la noche a la mañana.
La oración juega un papel muy importante, en última
instancia es Dios que sana los corazones, por esto se debe
de pedir de forma constante y sin desfallecer la sanación de
ambos corazones.
¿Debería aceptar el único hombre que me pretende si
no aparece ningún otro?
Si, pero la razón no sería la correcta aceptarlo porque no
hay más. Puede que la razón por la que solamente sea ese
hombre pretendiéndote sea porque es el hombre correcto
para ti y para que tu puedas darte la oportunidad de
conocerlo, quizás si no fuera el único no te darías esa
oportunidad. Y el hecho de darte la oportunidad de

43
conocerlo no significa que irremediablemente será tu pareja,
sino que te darás un tiempo de conocerlo y saber si
realmente ese hombre no es tu alma gemela. El hombre de
tu vida.
¿Cuál es la diferencia entre enamorado y novio?
En algunos lugares hay una diferencia en otros no lo hay,
por ejemplo, en Ecuador enamorado es sinónimo de novio
y en México no necesariamente es el novio sino un hombre
al cual se ama y cuyo amor es correspondido. Sin embargo,
no necesariamente es el novio de manera formal, aunque
existe un deseo de que lleguen a serlo.
¿Qué hacer para que Dios sea el centro de la relación?
Para que Dios sea el centro de la relación deben de
ambos vivir una autentica vida de gracia, frecuentar los
sacramentos, especialmente la Eucaristía y la reconciliación.
Esos dos sacramentos son fundamentales para que Dios
siempre tenga primacía en la relación, que todo gire en torno
a Él.
Muchas veces pasa que, si bien ambos quieren vivir
agradando a Dios, se exponen a las ocasiones de pecado y

44
ahí no se puede decir que realmente quieran tener a Dios
como el centro de la relación. Evitar las ocasiones es otro
elemento fundamental ´para vivir un auténtico noviazgo
católico.
¿Cómo encontrar una pareja que ame a Dios y a la
Iglesia?
La forma más eficaz para encontrar una pareja que ame
a Dios y a su Iglesia es amándolo nosotros a Dios y a su
Iglesia. Cuando nosotros amamos a Dios y a su Iglesia nos
moverá a hacer cosas que hacen los que aman a Dios y a
decir cosas que hacen los que aman a Dios y entonces será
fácil reconocer a la persona que ama a Dios y a su Iglesia,
las personas que aman a Dios buscan exactamente lo
mismo. Una persona que ame a Dios y por consiguiente a
su Iglesia. Los amadores de Dios buscan hacer amado a
Dios. Integrarse a un grupo de la parroquia, algún grupo de
internet, con los mismos intereses podría ayudar mucho. Al
final cada persona encuentra su pareja de una forma distinta,
no hay un receta perfecta o mágica, pide a Dios. Siempre
hay que recordad que el tiempo de Dios es perfecto.

45
¿En qué me debo guiar para elegir un buen novio y
futuro esposo?
Hay muchas cosas que se deben de tener en cuenta tanto
el hombre como la mujer para elegir una buena persona del
sexo opuesto como compañero o compañera de vida.
Cuando una persona busca novia o novio es porque ya esta
preparada para formar una familia, en esta etapa la persona
ya ha discernido la vocación propia. Esta consciente de que
no es llamada a la vida consagrada. (Si aun esta en proceso
recomendamos un libro al respecto, el libro lleva por titulo
Camino al Altar, Sobre el discernimiento vocacional de Rey
David Garcia.)
Una vez se esta seguro de la vocación al matrimonio es
el momento de buscar o elegir la persona correcta. Aquí
mencionaremos solo algunas cosas a las que deben prestar
atención para tomar una buena decisión.
Es altamente recomendable que la persona comparta la
misma fe, esto es algo que recomienda la Iglesia para el bien
del matrimonio, así como la educación en la fe de los futuros
hijos.
Es sumamente importante que la persona comparta un
mismo anhelo de alcanzar la santidad, si no podría llegar a
ser un obstáculo para el progreso espiritual, la pareja debe
ser un apoyo en todo y especialmente en el camino al cielo,

46
no un obstáculo.
Es importante que la persona sea madura y este
consiente de las responsabilidades de una relación, así como
estar seguro o segura de su propia vocación.
Es menester que ambos se esfuercen por ser virtuosos,
en el caso de la mujer que sea modesta, recatada, prudente
en su hablar, vestir y actuar.
En el caso del varón es importante que sea maduro,
respetuoso, caballero, y sobre todo honesto y trabajador.
Por otro lado, es importante que ambos estén dispuestos
a seguir mejorando y nunca creer que son perfectos o que
no tienen cosas que deban de corregir.
También es importante que ambos tengan un deseo de
formar una familia según el plan de Dios.
Algunas otras cosas se deben de ir viendo y trabajando
poco a poco, conocerse es un trabajo de toda la vida, pero
si no se empieza con el pie derecho se pueden llevar
sorpresas muy dolorosas después de un tiempo. Es
indispensable ser honestos ambos, sin apariencias
superficiales.
¿Cuáles son los pilares fundamentales para un
noviazgo santo?
Los pilares fundamentales para un noviazgo santo son

47
los sacramentos y la vida de oración. Estos son los canales
de la gracia, si queremos estar en amistad con Dios y recibir
constantemente su auxilio es menester frecuentar los
sacramentos y la oración.
Consideramos que los pilares fundamentales para un
noviazgo santo son los sacramentos y la vida de oración. Sin
estos dos elementos sería muy difícil, por no decir
imposible, vivir un noviazgo santo. Los sacramentos.
¿Cómo mantener vivo el amor de pareja?
El amor se mantiene vivo haciendo cosas buenas el uno
por el otro y sobre todo haciendo sacrificios por la persona
amada. Pero eso no es suficiente, se hace menester el valorar
los detalles que tiene la pareja con uno, se debe de apreciar
y agradecer no solo las cosas grandes, sino los pequeños
detalles, esos detalles cotidianos, que muchas veces se
vuelven monótonos. Es ahí donde uno debe de tener
cuidado de pasar por alto esos pequeños detalles y ser
agradecido. Si son novios, nunca despedirse con algún
descontento o algún malentendido. Y si son matrimonio
nunca dormir sin decirse palabras de agradecimiento por
esos pequeños detalles.
Nunca ir a dormir con alguna riña sin solucionar. Esas
riñas, aun siendo pequeñas hacen mucho daño, en especial

48
a la mujer. Por eso no es bueno que el varón deje pasar una
noche a su pareja con pensamientos torpes en su cabeza, le
haría mucho daño.
Por eso, en la pareja despertar siempre en harmonía y
dormir siempre en paz mutua es clave para mantener
siempre vivo el amor.
Pero sobre todas las cosas es fundamental pedir
constantemente a Dios les conceda un amor de pareja, un
amor puro y eterno, según el amor de Dios.
¿Cómo hacer entender a mi pareja que debemos
esperar al matrimonio para tener relaciones sexuales?
Hablar con la pareja desde un principio sobre el trato
mutuo es fundamental para que exista un limite de trato y
un respeto mutuo. Cuando no existe un dialogo claro y
honesto desde un principio tienden, especialmente los
varones a ir marcando los limites según sus pasiones y eso
no es saludable para la relación.
La relación debe de estar basada en el amor y el respeto,
no en el placer. El placer es fugaz y engañoso, el verdadero
amor es por su misma naturaleza eterno y total. Total, en
cuanto exige todo, y ese todo debe reservarse hasta después
del sacramento del matrimonio. Es ahí donde se
compromete todo, ante Dios y ante la sociedad. Antes del

49
sacramento ni se a hecho un compromiso ni ante la sociedad
y mucho menos ante Dios.
Si se aman deben de amarse de forma ordenada, dando
a cada cosa su lugar, su tiempo.
Vale de mucho, leer junto algún libro sobre el noviazgo
católico, o algún libro de preparación matrimonial de algún
buen sacerdote.
En el final de este libro recomendaremos algunos libros
para una buena formación preparación para el matrimonio.
¿Se puede vivir en castidad después de haber faltado a
esta virtud muchas veces?
No solo se puede, sino que se debe de vivir en castidad.
Y aun después de caer se debe de levantarse, una y mil veces
si es necesario. Santo no es solamente el que nunca cometió
pecado sino también aquel que arrepentido de su pecado
busco a Dios con un corazón contrito y persevero buscando
agradarle en todo, tanto como le era posible.
¿Qué es lo más importante en el noviazgo?
En el noviazgo hay muchas cosas importantes, sin
embargo, una de las mas importantes es que los novios

50
deben ser conscientes de que el noviazgo es un camino para
el matrimonio. No es un juego, un pasatiempo, un
compañerismo eterno, o algo por el estilo. El noviazgo es
temporal, se acaba y la idea es que se acabe en el
matrimonio.
¿Qué puedo hacer si dañe a mi pareja y ahora quiero
volver a esa relación?
Lo principal es dar muestra de arrepentimiento
verdadero. Aquí no basta con pedir perdón, hay mucho mas
que hacer. Sobre todo, si esa persona está muy dañada por
lo sucedido. Que los hombres olvidamos rápido y nos
arrepentimos tarde y con las mujeres es lo opuesto, asimilan
tarde, pero una vez que asimilan ya no hay mucho por hacer.
Solo la constancia y perseverancia en las muestras de
arrepentimiento y demostración de que es amada de verdad
y se esta dispuesto a compensar las faltas cometidas.
En este proceso es muy importante pedir perdón a Dios
antes que nada y pedir que sane el corazón de la persona
amada. La verdadera sanación viene de Dios, solamente
Dios puede sanar de verdad un corazón quebrantado.
Solamente Dios tiene el poder sobre el corazón del hombre
y de la mujer.
Por esta razón hay que acudir a Dios por la gracia y la

51
sanación. Orar por la pareja es una gran caridad. De hecho,
muy grande caridad.
¿Se deben perdonar infidelidades en el noviazgo?
En el noviazgo se pueden perdonar infidelidades, pero
solamente si hay un arrepentimiento sincero y señales de
verdadero arrepentimiento. Perdonar infidelidades y volver
con alguien que no esta verdaderamente arrepentido de sus
faltas no es algo bueno, ni para el que perdona ni para el que
ha faltado. En todo caso se puede perdonar la falta, pero no
se debe de regresar a esa relación si la persona que falto no
esta de verdad arrepentida y dispuesta a enmendar sus faltas
cometidas.
¿Cuánto tiempo debería durar un noviazgo?
El noviazgo puede durar poco o mucho según la
necesidad de cada pareja. Las necesidades varían, pueden ser
desde falta de madurez hasta cuestiones económicas. Cada
pareja tiene su propio proceso.

52

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LIBROS Y DOCUMENTOS DE
REFERENCIA
Catecismo de la Iglesia Católica
La Casa sobre la roca
del padre Horacio Bojorge
Los Hizo Varón y Mujer
del padre Miguel Ángel Fuentes
Ataques modernos contra la familia
del Padre Carlos Miguel Buela
Guía del Noviazgo Católico
por Rey David Garcia y María José Tuarez
Camino al Altar, Sobre el discernimiento vocacional
Por Rey David Garcia

55
OTROS LIBROS ESCRITOS POR LOS
MISMOS AUTORES
Guía del Noviazgo Católico
Por Rey David Garcia y María José Tuarez
Camino al Altar, Sobre el discernimiento vocacional
Por Rey David Garcia
Camino al Altar, Librito de oraciones para novios y
prometidos
Por María José Tuarez
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países vecinos pueden contactarnos a través de la pagina
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