1. Angiospermas.
Las Plantas Angiospermas forman el grupo más extenso del reino
de las Plantas. Tienen flores y producen frutos con semillas. Las
Angiospermas pueden ser árboles, como el roble, arbustos, como el
tomillo, o hierbas, como el trigo. Son las únicas plantas que se han
adaptado a vivir en todos los ecosistemas de la Tierra, salvo en las
regiones polares; los cactus viven en los desiertos, las posidonias
en el fondo del mar y los edelweiss en las cumbres de las montañas.
Gimnospermas.
Las gimnospermas son un filo de plantas fanerógamas o
espermafitas, que tienen el óvulo desnudo, es decir. Sin proteger
el interior de un ovario; por lo tanto, no tienen frutos, ya que los
frutos se forman a partir de las paredes de un ovario.
Las gimnospermas forman un grupo muy primitivo de plantas,
pues aparecieron hace unos 350 millones de años. Actualmente
hay unas 700 especies, casi todas agrupadas en la clase de las
coníferas.
2. Helechos.
Los helechos tienen fama de delicados, pero no es así, ya que tan
sólo con un poco de luz indirecta, elevada humedad ambiental y
buena tierra, la mayoría se desarrollan muy bien. Los helechos
son plantas muy primitivas que no producen flores y que por ello
para reproducirse utilizan unas partículas diminutas que se
denominan esporas. Se conocen unas 10.000 especies
distribuidas por todo el mundo, pero en mayor medida en zonas
cálidas y húmedas. En la Península ibérica y Baleares se
encuentran 111 especies. Se pueden encontrar desde el nivel del
mar hasta grandes altitudes.}
Musgos.
Los musgos son una clase de plantas briofitas con hojas bien
desarrolladas y provistas de pelos rizoides o absorbentes, que
tienen un tallo parenquimatoso, en el cual se inicia una
diferenciación en dos regiones: central y periférica.
Estas plantas crecen abundantemente en lugares sombríos sobre
las piedras, cortezas de árboles, el suelo y aun dentro del agua
corriente o estancada.