1. Impactos represa Hidrosogamoso
BY AGUASPARALAVIDA ENERO 22, 2013
La mala hora de El Llanito
Los pescadores del El Llanito se han mudado al río Sogamoso y al
Magdalena, mientras las mujeres la ‘guerrean’ por conseguir agua para
sus casas. La sequía parece secar de a poco a la vitrina turística de
Barrancabermeja.
El corregimiento El Llanito pasa días amargos. La sequía tiene en jaque a
este pueblito de pescadores, que de a poco parece ‘achicharrarse’ ante la
crudeza de la temporada de calor.
Quienes basan su sustento en la pesca se han tenido que mudar, y las
mujeres, que cuidan del hogar, pasan apuros por falta de agua potable.
Vanguardia Liberal visitó la puerta turística de Barrancabermeja y fue
testigo de la mala hora que se vive allí.
El diablo sabe más por viejo…
Si de algo saben los hombres llaniteros es de pesca. Y más en temporada
seca que es cuando sacan todo su conocimiento a relucir pues las
posibilidades de coger algo se vuelven tan escasas como el agua.
Y si no que lo diga Carlos Arias, quien lleva 30 años en el oficio, y que
todavía confía en las pocas aguas que le quedan a la Ciénaga Llanito para
pescar uno que otro blanquillo.

2. “Las cabañuelas mostraron que febrero iba a ser verano. Ya en marzo sí
va a llover. Si la ciénaga se seca más pues me tocará recurrir a lo que mis
hijos me puedan dar mientras tanto”, afirmó el experimentado pescador,
que ayer hizo otro intento en una canoa arrendada.
Jorge Medina, otro ‘duro’ de la pesca y quien hace algunos años fue el
presidente de la Asociación de Pescadores y Acuicultores de El Llanito,
Apall, esta semana está relajado pues con lo del pescado no le está yendo
bien y, además, tiene otra entrada, la venta de pimpinas de agua.
“Aquí en el corregimiento casi el 30% de las casas tiene pozo, como en la
mía. Como mis vecinos necesitan yo se las vendo a $200, hay partes que
la venden a $400”, dijo el líder.
Sin embargo, muy cerca del muelle, lugar en el que en vez de ciénaga
sólo se divisa un extenso potrero, hay un pozo comunal provisto de una
pequeña bomba. ‘Cualquiera puede venir a sacar de aquí”, advirtió Jorge.
En otro lado del casco urbano de El Llanito, cerca del cementerio, el agua
se distribuye a través de una manguera que sale del pozo de la casa de
Edwin Arango.
“Hace tres años vendemos agua. Primero teníamos una bomba pequeña y
luego pudimos conseguir una más grande. La media hora de bombeo de
agua se vende a $4.000”, aseguró el comerciante de agua, un oficio que
por estos días es tan popular como el de pescador.
Para resumir, la comunidad del corregimiento El Llanito se ve afectada con
o sin agua. En temporada invernal uno de los primeros sectores rurales de
Barrancabermeja que se inundan son sus habitantes. A falta de lluvias,
también los primeros que sienten las consecuencias del tiempo seco son
los llaniteros.
Otros corregimientos
Aunque la falta de lluvias afecta por igual a todos los sectores rurales de
Barrancabermeja, debido a las altas temperaturas, en sectores como San
Rafael de Chucurí y Ciénaga del Opón, la actividad pesquera no ha sufrido
mayores percances.
Según Hober Torres, presidente de Asorural, los bajos niveles del río
Magdalena y los afluentes cercanos a estos corregimientos favorece, por
ahora, la recolección de pescado es más sencilla aunque si el agua sigue
bajando se hará complicada la situación.

3. “En materia de agua potable en estos corregimientos tomamos el agua de
pozos artesanales, porque no contamos con acueducto. Hasta el momento
los pozos no se han secado aunque sí le pedimos a la población hacer uso
eficiente del agua”, dijo el líder comunal.
Falta de agua los tiene en jaque
Los pescadores del El Llanito se han mudado al río Sogamoso y al
Magdalena, mientras las mujeres la ‘guerrean’ por conseguir agua para
sus casas. La sequía parece secar de a poco a la vitrina turística de
Barrancabermeja.
Un acueducto en proyecto
Uno de los problemas que más se evidencian cuando hay falta de agua es
también la falta de acueducto en el corregimiento El Llanito. Más aún
porque su infraestructura ya se construyó y sus habitantes se quedaron
esperando su puesta en funcionamiento.
Según el funcionario de la Secretaría de Infraestructura Mario Daniel
Hernández, el bombeo de agua se tuvo que suspender pues los pozos de
los que se proveía el acueducto se secaron.
“Lo que hicimos fue un convenio con Isagen para sacar el agua de la
Ciénaga Guadualito. Isagén ya nos entregó los estudios y los estamos
analizando para mirar si son viables y cuánto dinero necesitaríamos para
ejecutarlo”, explicó.
A pescar a otra parte
Para el presidente de Apall (Asociación de Pescadores y Acuicultores de El
Llanito), Juan Tercero Gamarra, la mejor alternativa para los miembros de
la asociación es la de irse al río Magdalena ante la poco agua que tiene la
Ciénaga El Llanito.
“Hay 120 miembros de la Asociación que son mujeres y están dedicadas al
hogar por ahora. Otro grupo trabaja como mano de obra no calificada en
las empresas de la industria del petróleo”, indicó el representante.
Muchos pescadores se han ido para el río Sogamoso porque ahí les va
mejor. Pero Gamarra expresó su preocupación ya que no se ha dado una
solución a largo plazo para enfrentar las temporadas secas.

4. “En época invernal entró mucho sedimento cuando se rompió el dique por
el lado de la vereda La Hortensia. Eso contribuye hoy a que la ciénaga se
haya secado más rápido”, explicó el líder.
opine
¿Cómo enfrentan los llaniteros la temporada seca?
Luis Flórez
Pescador
“Toca ir al río Magdalena que allá nos va mejor. Ahora estoy herido porque
me picó una raya pero en pocos días cojo para allá”.
Rosiris Contreras
Ama de casa
Me toca comprar todos los días los veinte minutos de agua que me
cuestan $3.000 para lavar, hacer la comida y porque estamos
construyendo”.
Yahaira Díaz
Ama de casa
“A veces nos toca rogarle al señor dueño del pozo para que nos venda
agua. Ahora entraron los niños a estudiar y hay que lavarles el uniforme
todos los días”.
http://www.vanguardia.com/santander/barrancabermeja/191490-la-
mala-hora-de-el-llanito
¿Hidrosogamoso desecará Ciénaga Llanito?
Autor: Jairo Puentes Bruges
Miércoles 17 de Agosto de 2011
La semana pasada me reuní con representantes de la comunidad de
pescadores del corregimiento El Llanito de Barrancabermeja. Se trata de
“un conglomerado de cerca de 3000 personas, cuya principal fuente de
sustento es la pesca artesanal en la Ciénaga El Llanito. Los problemas en
esta y otras ciénagas del Magdalena Medio empezaron hace muchos años;
como quedó reseñado en el libro La Crisis del Agua en Santander (Puente
y asociados, Inderena, 1993). Sin embargo, en todos estos años que han
pasado no hemos hecho nada para recuperar este y otros sistemas
amenazados. Todo lo contrario, estamos empeñados en su destrucción
total. Los pescadores advierten que son dos factores los que amenazan la
“única fuente de sustento y supervivencia de nuestras familias”. Y sí, para
ellos, es cuestión de supervivencia. Estos factores son: 1) “Graves

5. problemas de contaminación asociados a la industria petrolera”, es decir,
vertimientos petroleros que afectan la calidad del agua de la ciénaga. 2)
“Inminente riesgo de desecación de la ciénaga a causa del represamiento
del Río Sogamoso”.
De estos dos problemas, el primero podría ser más fácil de solucionar;
siempre y cuando exista la voluntad de las petroleras y la decisión de las
autoridades ambientales para exigirles un plan de manejo ambiental a los
responsables. En el caso del represamiento parcial del Sogamoso, debido
a su desvió en el sitio de construcción de la represa, la cosa parece más
complicada. Después de este desvío en enero, se han presentado
desbordamientos que sugieren que los túneles instalados no son
suficientes para evacuar todo el caudal del Sogamoso. Y si ya hay
problemas en la Ciénaga con este represamiento parcial ¿qué ocurrirá
durante el llenado de la represa cuando la retención de agua sea mucho
más importante?
Esta ciénaga se abastece de las aguas del río Sogamoso; por lo mismo
menos agua le llegará al Llanito al bajar el nivel del río cuando la represa
entre en operación. Esto en una ciénaga que ya tiene problemas de
sedimentación y pérdida de profundidad. Así que Hidrosogamoso podría
“asestarle un golpe mortal a la ya agonizante ciénaga” escribí en una
columna de febrero 2009.
Si la ciénaga desaparece ¿qué será de los pescadores de El Llanito? ¿Más
desplazados en un país que ya cuenta con el vergonzoso título de
subcampeón mundial de desplazamiento interno?