Alimentando al uno por ciento: la incursión de un multimillonario informático en los agronegocios dibuja un inquietante cuadro sobre los actuales especuladores financieros del sector agrícola
Los actuales especuladores financieros del sector agrícola
1. Los actuales especuladores financieros del sector agrícola
Novedades de GRAIN | 22 de diciembre, 2014
Alimentando al uno por ciento: la incursión de un multimillonario
informático en los agronegocios dibuja un inquietante cuadro sobre
los actuales especuladores financieros del sector agrícola
Desde la crisis alimentaria global del 2008, ha habido una oleada
masiva de inversiones del sector privado en la agricultura. El G8, el
Banco Mundial y los inversionistas corporativos dicen que el hecho de
que fluya más dinero a la agricultura significa más innovación,
empleos y comida para un planeta hambriento.
Pero al examinar las inversiones realizadas por uno de los jugadores
del sector privado más activos en la fiebre global por allegarse tierras
de cultivo, el multimillonario de India Chinnakannan Sivasankaran,
emerge un cuadro perturbador.
Su Grupo Siva, y la miríada de subsidiarias que lo configuran, han
adquirido acciones en cerca de un millón de hectáreas de tierra en el
continente americano, África y Asia, sobre todo en tierras donde
operan plantaciones de palma aceitera.
Pero Sivasankaran es también un acaparador de tierras y un evasor
fiscal. Como la mayoría de los principales inversionistas en
agricultura, sus inversiones se han canalizado a través de una
telaraña de compañías fantasmas con sede en refugios fiscales
deslocalizados. Las compañías de las cuales tiene acciones están
implicadas en dudosos acuerdos agrarios y en esquemas de soborno,
y parecen ser mucho mejores en canalizar generosos pagos a los
bolsillos de sus directores que produciendo alimentos.
2. Tal vez el efecto colateral más alarmante de este tipo de inversiones
es la mercantilización de la tierra y la marginación de las
comunidades que dependen de ella. Doquiera que entra el Grupo Siva
y gente como ellos, se aseguran la titulación de vastas parcelas de
tierra por cualquier medio que sea necesario – con frecuencia sin el
consentimiento informado de las comunidades afectadas. Después
utilizan estas tierras como palanca para obtener más efectivo y
crédito y así realizar más negocios con tierras.
En lugar de incrementar la producción alimentaria, esta nueva ola de
inversiones de hecho amenaza con expulsar a los campesinos de sus
tierras y erosionar su soberanía alimentaria.
Lea el informe: http://www.grain.org/e/5112