"Cien Días vistos por Cinep n.° 93: el campo de la paz"
Represión en el quimbo
1. Un día en que la resistencia social se
mostró indignada por la identidad del
territorio en El Quimbo
Publicado: 3 marzo, 2012 | Autor: notiagen
El 3 de marzo de 2012 campesinos, volqueteros, paleros, apicultores, zorreros,
estudiantes y, en general, afectados por la construcción de la hidroeléctrica El Quimbo
se desplazaron a las playas del río de la Patria. La mañana estuvo pasada por agua, una
lluvia lenta y constante que caía sobre los rostros indignados de quienes en transportes
mixtos, colectivos, motos y hasta a pie se desplazaron hasta el lugar donde la sociedad
multinacional Emgesa tiene sus oficinas a un costado de la entrada del puente del Paso
del Colegio.
Las consignas una vez más retumbaron en la cordillera y se mezclaron con la melodía
del río Magdalena. Pancartas que plasmaban sentidos, frustraciones y deseos para el río
se leyeron en la margen derecha del puente que hace unos meses se encuentra cerrado
por averías en su estructura cuya responsabilidad es de la multinacional a cargo de El
Quimbo, según Miller Dussán de la Asociación de Afectados por El Quimbo
(Asoquimbo).
2. La construcción de la hidroeléctrica El Quimbo sigue su curso en medio de las
denuncias e irregularidades que Asoquimbo ha dado a conocer y sustentado en los
diferentes escenarios donde ha acudido en busca de reivindicaciones para los afectados
y por la defensa del territorio. Entre las anomalías se encuentran la adjudicación de la
licencia ambiental sin el previo diagnóstico ambiental de alternativas que obliga la ley,
no se atendió una sugerencia que hizo la Procuraduría General de la Nación el 9 de
mayo de 2009 en donde recomendaba abstenerse de aprobar la licencia de El Quimbo
porque el 95 % de la población a inundar hace parte de la Reserva Forestal protectora de
la Amazonía protegida por la Ley 99 de 1993 y porque se inundaría una de las zonas
más productivas de calidad agroalimentarias y que no tiene posibilidad de recuperación
de esa producción.
Por otro lado la Defensoría del Pueblo solicitó al Ministerio de Ambiente que
suspendiera la licencia ambiental al megaproyecto ya que atentaba contra la destrucción
de las cadenas productivas, ocasionada por el desalojo y desplazamiento, además
porque según Miller Dussan la Defensoría dice que Emgesa desinforma ya que hasta
ahora las comunidades no saben las compensaciones a que tienen derecho y no lo saben
porque ni siquiera la misma empresa entregó a tiempo el estudio de vulnerabilidad
donde debían quedar claras las compensaciones para las zonas vulnerables.
La denuncia más reciente es la indagación que abrió la Contraloría de la República
contra el Ministerio de Ambiente, la Corporación Autónoma del Magdalena y el Invias
partiendo del indicio de que se está afectando el patrimonio nacional dada la gravedad
de los hechos de no tomar una decisión ante la afectación de la zona, entre otras razones
que Asoquimbo argumentó en reunión con la contralora de la República.
3. Como dice Miller Dussán, que por medio de un megáfono y ante las cámaras,
grabadoras y agendas de los periodistas del mundo, argumentó lo que para él es un
atentado contra la soberanía nacional y el patrimonio de los colombianos, «cuando hago
referencia al proyecto hidroeléctrico El Quimbo hago referencia a las siguientes
circunstancias: es el único proyecto que entregó el 100% de las acciones a una
trasnacional, toda la inversión es privada, es la única represa en Colombia que se
declaró unipropósito, es decir, sólo para la producción de energía».
En esta ocasión el propósito de la movilización era evitar el desvío del río Magdalena
programado entre el 3 y 6 de marzo. Alrededor de 600 personas se hicieron presentes
frente al centro de operaciones de la sociedad extranjera que construye la represa con el
propósito de «exigirle que se retire de la zona y respete el territorio huilense y
campesino», según mencionó uno de los manifestantes. A las 10 de la mañana y
después de que se dieran unas declaraciones a los medios, Dussán encabezó la
movilización hacia la vía que conduce a la playa alta del río Magdalena. Después la
población manifestante que pedía permiso para ingresar a la zona denuncia que fue
agredida por el ESMAD de la Policía Nacional sin mediar y de manera aligerada; los
gases lacrimógenos y la Fuerza Pública rompieron con el carácter pacífico que había
mantenido la movilización hasta el río grande de la Magdalena en la mañana del 3 de
marzo.
En la parte alta del río, en la zona conocida como Domingo Arias, municipio de
Gigante, un grupo de 90 campesinos habían logrado llegar en la madrugada a la zona
con el propósito de hacer resistencia y obstruir el desvío del cauce del río acompañados
por un grupo de periodistas entre los que se encontraban el italiano Bruno Federico y
4. Neyder Salazar de Agenda Alterna; además de delegados de Asoquimbo que hicieron el
acompañamiento.
Cerca de la 1 de la tarde Miller Dussan hizo un llamado de manera urgente a los medios
de comunicación nacionales e internacionales a hacerse presentes en la zona alta del río
para proteger a las 90 personas que se encontraban cerca del túnel por donde se
pretendía cambiar el cauce del afluente.
La movilización en el puente del Paso del Colegio se desplazó a la vía en la cual
permanecieron por más de una hora a la espera de noticias de la comisión de la zona
Domingo Arias.
La presencia de estudiantes de las universidades de la capital huilense (Universidad
Surcolombiana, Corhuila, Cooperativa) y colegios se hizo sentir en la soleada tarde que
borró los rastros de la lluvia de manera oportuna. Por medio de la música y la danza se
hicieron presentes los aires surcolombianos.
La tensión de los minutos en la vía era evidente; el plantón fue una forma de presión
que se consideró oportuna después del enfrentamiento con la Fuerza Pública y la latente
orden impartida a los uniformados para entrar en la zona baja de la playa donde se
reunieron las comisiones en la mañana.
«Esta resistencia es social; no está dirigida por ningún partido político, hay una nueva
modalidad de resistencia. La resistencia se construye desde la base, con las
comunidades excluidas y así se va construyendo otro modelo de democracia en donde
las personas tienen que autoorganizarse para controlar ellas mismas la producción del
sustento. Por eso Asoquimbo tiene la proyección de construir una reserva
5. agroalimentaria; desde estas estrategias estamos construyendo paneles itinerantes con el
Movimiento Ríos Vivos donde estamos erigiendo una nueva política minero-energética
soberana y autónoma para el país. Asoquimbo no sólo está en la lucha contra un
megaproyecto, si no en la defensa de todo un territorio y en pro de generar una nueva
organización social y política que parta desde la resistencia que comienza a invalidar
esa forma de democracia participativa que como ustedes observan es de las más
restrictivas», mencionó Miller Dussan en la rueda de prensa del día anterior y recalcó en
la asamblea que se realizó en el cruce de la Plata (Huila) hasta donde llegó la
movilización con sus arengas.
«
Ríos para la vida no para la muerte» proclamaba el deseo de protección y respeto por el
río Magdalena que a eso de las 5:30 de la tarde empezaba a correr por el túnel que
Emgesa construyó para poder continuar con el proceso de construcción de la
hidroeléctrica.
«La resistencia continúa y que desvíen el río no hará que no sigamos adelante»,
mencionó en un tono alto Dussan, el mismo tono que utilizó para referirse a los
pronunciamientos del presidente de la República, ministros y generales de la Fuerza
Pública que se pronunciaron en contra y despectivamente de la resistencia que ha
asumido Asoquimbo durante ya cuatro años. T