El documento resume tres casos bíblicos en los que Dios le dio instrucciones específicas a personas sobre cosas que debían hacer: 1) A Noé sobre construir el arca, incluyendo el material, dimensiones y mobiliario, 2) A Moisés sobre construir el tabernáculo, incluyendo cuándo y por qué, y 3) Sobre el bautismo ordenado por Jesucristo y los apóstoles para la salvación y perdón de pecados. Concluye que debemos limitarnos al modelo dado por Dios y no apartarnos de él.