2. No creas en nada simplemente porque lo diga la tradición, ni siquiera
unque muchas generaciones de personas nacidas en muchos lugares
ayan creído en ello durante muchos siglos. No creas en nada por el
mple hecho de que muchos lo crean o finjan que lo crean. No creas en
ada porque así lo hayan creído los sabios de otras épocas. No creas en lo
ue vuestra propia imaginación os propone cayendo en la trampa de
ensar que Dios os lo inspira. No creas en lo que dicen las sagradas
scrituras, sólo porque ellas lo digan. No creas a los sacerdotes ni a ningún
tro ser humano. Cree únicamente en lo que tu mismo hayas
xperimentado, verificado y aceptado después de someterlo al dictamen
el discernimiento y a la voz de la conciencia.”