El documento describe varios riesgos para la salud y el bienestar asociados con el consumo de alcohol en la adolescencia, incluyendo un mayor riesgo de depresión, ansiedad y baja autoestima, así como efectos en el desarrollo hormonal y físico. También advierte que los adolescentes que beben antes de los 15 años tienen más probabilidades de convertirse en bebedores crónicos o problemáticos, y que el consumo de alcohol aumenta el riesgo de accidentes, suicidio, violencia, enfermedades de transmisión sexual y emb