Un hombre le dio $10,000 a cada una de sus tres novias para ver qué hacían con el dinero y así decidir con quién casarse. La primera usó el dinero en su apariencia física. La segunda le compró regalos caros. La tercera invirtió el dinero en la bolsa y duplicó la ganancia, devolviéndole los $10,000. El hombre analizó cada comportamiento y decidió casarse con la novia de nalgas más grandes.