El grafito tiene una estructura hexagonal en la que los átomos de carbono presentan hibridación sp2 y forman enlaces covalentes dentro de las capas. Las capas están unidas débilmente por fuerzas de Van der Waals. Es conductor eléctrico a lo largo de las capas y semiconductor perpendicular a ellas. Se usa como lubricante, en la industria por su resistencia al calor, y en reactores nucleares y electrodos por su conductividad.