2. España es el único país de la Unión Europea que
aún permite la caza con galgos.
No se sabe a ciencia cierta cuántos perros son
vejados o asesinados por sus propietarios, tras la
temporada de caza. En España, según la Federación
Española de Galgos, hay aproximadamente
200.000. La guerra de cifras entre los cazadores y
las asociaciones defensoras de estos animales
contribuye a la opacidad.
3. Mientras que el Servicio de Protección de la
Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) mantiene
que en 2014 fueron abandonados 62 galgos, ahorcado
uno y apaleados siete, las protectoras y asociaciones
de animales hablan de más de 50.000 galgos que
todos los años son desatendidos, resultan heridos por
malos tratos o pierden la vida.
"Las cifras reales podrían ser incluso superiores a los
50.000", advierte Laura Duarte, portavoz del partido
animalista PACMA. "El galgo tiene una vida útil, la
que puede dedicar a la caza, muy corta. Después,
muchos son abandonados o sacrificados.”
4. Pedro Morrás, secretario de la Oficina Nacional de Caza (ONC),
refuta las valoraciones de los animalistas: "Los datos que nosotros
manejamos son los únicos que tienen validez y los proporciona el
Seprona. Además, el secretario de la Federación Española de Galgos,
Juan Carlos Ramos, sostiene que en los últimos años se ha registrado
un "descenso de este tipo de acciones”.
A la hora de explicar el abandono de galgos, los cazadores aluden al
robo de estos animales. Según los datos aportados por el Seprona, en
2013 hubo 328 denuncias por sustracciones de estos animales. Más del
50,5% de los perros que se roban son galgos , por lo que para hablar de
abandono hay que erradicar primero los robos, dicen.
5. Amador, un galguero adscrito a la Federación
Andaluza de Galgos, afirma que es obligatorio
registrarlo en la Federación Española de Galgos
para que lo identifiquen con un microchip y, así,
poder castigar al dueño en caso de abandono.
Sin embargo, este mismo cazador asume que el
microchip es totalmente manipulable, por lo que la
Federación Española de Galgos, obliga a todos sus
socios a inscribir a sus galgos en un banco de ADN.
6. Anna Clement, directora y fundadora de SOS Galgos,
menciona el hacinamiento y la insalubridad con los
que conviven muchos de estos animales para justificar
la necesidad de llevar a cabo un cupo. La ley actual
obliga a los propietarios de más de cinco animales a
solicitar la licencia de núcleo zoológico.
Otra de las cuestiones que denuncian los animalistas
es el entrenamiento de los galgos. Además de las
largas carreras por el campo con estos perros, es
frecuente el ensayo con coches a motor. En Andalucía,
según apunta PACMA, está permitido atar los galgos a
un coche para entrenarlos.
7. Desde la Plataforma en Defensa de la Caza con Galgo, su
máximo dirigente apoya los entrenamientos con
vehículos a motor porque "si se permite atar un perro de
caza a una bici, ¿por qué no van a poder ir atados a un
coche?". Sin embargo, desde la ONC y la Federación de
Galgos rechazan ese argumento: "Si nosotros vemos a
alguien maltratando un galgo, se le cae el pelo", asevera
Corpa.
El secretario de la Federación Española de Galgos
defiende que "el entrenamiento se realiza de forma
escalonada con un exhaustivo seguimiento y control
veterinario". Sin embargo, la portavoz de PACMA
denuncia que los galgos sufren "condiciones terribles
mientras corren".
8. Si en algo se muestran de acuerdo tanto los cazadores como los animalistas, es en
destacar el peso de la tradición en la caza con galgos. "Es una práctica que no se
extingue, que está en pleno auge", señalan desde la Plataforma en Defensa de la Caza
con Galgo. En zonas rurales de Andalucía, Castilla- La Mancha y Extremadura están
muy extendidos los torneos con estos canes.
"La habilidad para cazar se transmite de padres a hijos", asume Anna Clement, quien
apuesta por que el primer paso para erradicar esta práctica provenga de la
concienciación. SOS Galgos, lleva 12 años trabajando en colegios explicando en qué
consisten las competiciones con galgos y cuáles son sus consecuencias. "Falta
educación, lo más importante es que antes de que algo sea ilegal, sea socialmente
inaceptado“.
Si se empieza a controlar y a regular la caza con galgos, será el principio del fin",
auguran desde PACMA. España es el único país de la Unión Europea que continúa
permitiendo la realización de monterías con galgos.
Mientras se dan los pasos necesarios para la abolición, los animalistas reclaman una
mayor vigilancia de los cazadores por parte de las fuerzas de seguridad mayor
supervisión de las condiciones en las que habitan estos animales.
9. ¿Son mascotas o útiles de
caza?
¿Qué solución plantearías
ante este problema?