El documento presenta una introducción a los cuatro tipos básicos de tejidos del cuerpo humano: epitelial, conjuntivo, muscular y nervioso. Explica que los tejidos son conjuntos de células que trabajan juntas para realizar funciones específicas y mantienen las funciones corporales. Resume las características y clasificaciones principales de cada tejido.
2. Tejidos del cuerpo humano
• Los tejidos son un conjunto de
células organizadas para
realizar de manera colectiva
una función específica o más.
• Mantiene las funciones
corporales a través de
esfuerzos de sus células
individuales
• Existen 04 tipos básicos de
tejidos: Epitelial, conjuntivo
(conectivo), muscula y
nervioso.
3. ELTEJIDO EPITELIAL
• Conformado por células poco
diferentes entre si.
• Las funciones de los epitelios son
muy variadas: protección frente a
la desecación o la abrasión,
filtración, absorción selectiva,
secreción, intercambio de gases y
otras moléculas, transporte de
sustancias por su superficie, y
además pueden poseer células
que actúan como células
sensoriales
Tejido
epitelial
Membranas
epiteliales
Simples Estratificadas
Epitelio
glandular
Exocrinas Endocrinas Mixtas
4. Tejido conjuntivo (conectivo)
• Tiene abundante sustancia
intracelular.
• Se origina del mesodermo
• Funciones: de relleno (entre los
órganos), de soporte (sostiene
diversos órganos), de defensa
celular y humoral (anticuerpos)
• Clasificación:
• Tejido conectivo propiamente
dicho.
• Tejidos conectivos
especializados.
5. Tejido Muscular
• Estudiado por la miología.
• Es un tejido contráctil formado
por fibras musculares.
• Permite el movimiento y
producción de calor.
• Proviene del mesodermo.
• Se clasifica en: Estriado,
cardíaco y liso
6. Tejido Nervioso
• Tejido especializado en
generación y propagación de
impulsos nerviosos.
• Proviene del ectodermo.
• Se clasifica en neurona y neuroglia
Notas del editor
2. Definición de conflicto
El vocablo conflicto designa una situación compleja caracterizada por una determinada estructura de las relaciones interpersonales en la que unas entidades sociales apuntan a metas opuestas, afirman valores antagónicos o tienen intereses divergentes.
Desde las aportaciones efectuadas en la época actual, puede ofrecerse una definición funcional de conflicto. Ésta plantea que el conflicto es la acción antagónica entre dos o más personas (Ivancevich & Matteson, 1992). Entonces, puede plantearse que el conflicto intergrupal son el conjunto de acciones antagónicas entre conjuntos de individuos (o grupos) que por alguna razón se han asociado entre sí.
Por otro lado, Van de Vliert (1984) postula que dos personas o una persona y un grupo están en conflicto cuando al menos una de las partes experimenta frustración ante el obstáculo o irritación causada por otra parte.
Es arriesgado ofrecer una definición de conflicto debido a las múltiples aproximaciones que desde la perspectiva psicosocial se han planteado.
Integrando algunas de ellas podemos definir conflicto como una situación en que unos actores, bien persiguen metas diferentes, bien defienden valores contradictorios, bien tienen intereses opuestos o distintos, o bien persiguen simultáneamente y competitivamente la misma meta. En cada situación, la influencia o el control total de la conducta de otro es el medio escogido para alcanzar la meta.
De manera más concisa, desde la aproximación psicosocial que asumimos en estas líneas, el conflicto se entiende como la percepción de incompatibilidad de objetivos. En palabras de Putnam (1982), es una interacción entre dos partes interdependientes que perciben fines incompatibles, escasos premios y una interferencia potencial de la otra parte en la consecución de los fines.
De esta definición puede de deducirse unas propiedades que lo caracterizan:
Es una forma de interacción
El conflicto debe ser consciente, percibido por las partes. Su existencia depende de la percepción que se tenga de él. Si nadie lo percibe se acepta que no hay conflicto. Los conflictos percibidos no siempre son reales, hay muchas situaciones que podrían describirse como conflictivas cuando en realidad no lo son.
Existe interdependencia entre las partes.
Existe la percepción de un cierto grado de oposición en los fines perseguidos por las partes. Debe haber intereses o metas divergentes entre dos o más personas o grupos.
Cuando alguien bloquea la obtención de los objetivos de la otra, surge el conflicto. Es una conducta intencional, no proveniente de circunstancias fortuitas. La acción puede ser latente o manifiesta (externa).
De manera más concisa, desde la aproximación psicosocial que asumimos en estas líneas, el conflicto se entiende como la percepción de incompatibilidad de objetivos. En palabras de Putnam (1982), es una interacción entre dos partes interdependientes que perciben fines incompatibles, escasos premios y una interferencia potencial de la otra parte en la consecución de los fines.
De esta definición puede de deducirse unas propiedades que lo caracterizan:
Es una forma de interacción
El conflicto debe ser consciente, percibido por las partes. Su existencia depende de la percepción que se tenga de él. Si nadie lo percibe se acepta que no hay conflicto. Los conflictos percibidos no siempre son reales, hay muchas situaciones que podrían describirse como conflictivas cuando en realidad no lo son.
Existe interdependencia entre las partes.
Existe la percepción de un cierto grado de oposición en los fines perseguidos por las partes. Debe haber intereses o metas divergentes entre dos o más personas o grupos.
Cuando alguien bloquea la obtención de los objetivos de la otra, surge el conflicto. Es una conducta intencional, no proveniente de circunstancias fortuitas. La acción puede ser latente o manifiesta (externa).
De manera más concisa, desde la aproximación psicosocial que asumimos en estas líneas, el conflicto se entiende como la percepción de incompatibilidad de objetivos. En palabras de Putnam (1982), es una interacción entre dos partes interdependientes que perciben fines incompatibles, escasos premios y una interferencia potencial de la otra parte en la consecución de los fines.
De esta definición puede de deducirse unas propiedades que lo caracterizan:
Es una forma de interacción
El conflicto debe ser consciente, percibido por las partes. Su existencia depende de la percepción que se tenga de él. Si nadie lo percibe se acepta que no hay conflicto. Los conflictos percibidos no siempre son reales, hay muchas situaciones que podrían describirse como conflictivas cuando en realidad no lo son.
Existe interdependencia entre las partes.
Existe la percepción de un cierto grado de oposición en los fines perseguidos por las partes. Debe haber intereses o metas divergentes entre dos o más personas o grupos.
Cuando alguien bloquea la obtención de los objetivos de la otra, surge el conflicto. Es una conducta intencional, no proveniente de circunstancias fortuitas. La acción puede ser latente o manifiesta (externa).