Los delitos cometidos por menores entre 14 y 18 años aumentaron un 15% en 2009, con más de 3,600 menores ingresando al sistema penal juvenil. El hurto fue el delito más común, aumentando un 24.4% en 2009. El uso de menores en el tráfico de drogas también aumentó, en un 3.92% desde 2008. Los alcaldes propusieron juzgar a menores mayores de 15 años que cometan delitos graves como adultos para aplicar condenas ejemplares.