1. El arte es el uso de la habilidad y la imaginación, para crear objetos, experiencias,
melodías o entornos con el fin de lograr el placer estético en el observador. Se dice
tradicionalmente que el arte alimenta el alma, y quienes realizan esta afirmación no se
equivocan. Al ver una obra de arte, uno se siente conmovido por ella, y puede llegar a
sentir que se está transportando a otros lugares y tiempos, reales o imaginarios; el arte
provoca sobrecogimiento. Se dice que la capacidad de distinguir lo hermoso de lo feo es
una habilidad humana innata, pero la verdad es que los valores estéticos cambian de
cultura en cultura, y algunos pensadores se han referido a la definición del arte como
uno de los problemas más grandes de la filosofía; por lo mismo el arte y su percepción
siempre serán subjetivos.
Desde la edad clásica y mucho antes, se viene practicando el arte en sus diversas
modalidades y expresiones. Ya los primeros humanos con inteligencia, dibujaban en las
cavernas su interpretación de la realidad de manera tanto externa (tal como se presenta a
los sentidos) como interna (sus apreciaciones subjetivas de la realidad, usando símbolos
y representaciones abstractas); incluso investigaciones modernas afirman que el origen
de arte es entópico, esto es, deriva de experiencias subjetivas o internas de los chamanes
de la época que volcaron de manera gráfica sus percepciones. Desde esos comienzos,
hasta el día de hoy, el arte trata de reflejar, lo que somos y lo que estamos viviendo.
En los comienzos de la historia del arte, es decir a partir de los recuentos escritos en
donde está presente el concepto, se entendía por arte a una determinada habilidad, por lo
general manual o musical, bien desarrollada en una persona. El concepto luego
evoluciona marcadamente en el período romántico, donde se le da una cualidad
"metafísica" a la actividad artística, y por lo mismo se complica su definición, dejándola
en manos de la filosofía, la religión y la ciencia. Una buena definición contemporánea
bastante equilibrada en términos históricos sobre el concepto, podría ser la de un
producto de la actividad humana, capaz de estimular los sentidos y la mente,
transmitiendo emociones e ideas. De todas maneras el tema es sumamente subjetivo, y
da para interminables conclusiones.
Cada época de la historia, por la misma razón, a cultivado un tipo de arte. Los clásicos,
era rigurosos con las formas humanas. El hombre era el centro. Luego se fueron
desarrollando lo románico, lo bizantino, el renacimiento, el barroco, el realismo, el
surrealismo, etc. Son muchos los estilos de arte que se han desarrollado, pero cada uno
de ellos, ha maravillado y tocado a sus contemporáneos, justamente porque el arte desde
cierto punto de vista tiene un valor dual: por una parte representa e identifica un estado
temporal o específico de lo que viven la sociedad y las personas, y por otra parte el arte
tiene un valor universal rescatando la inmutable naturaleza humana, sus sueños,
esperanzas, alegrías y tristezas.
Con el pasar de los siglos, se fue depurando el concepto de arte. Sobretodo la visión que
se tenía, en cuanto a su exposición y el valor comercial que se podía llegar a explotar y
ya para fines del siglo XVII, se comenzó a conceptuar la idea de exponer masivamente
las obras de arte, con un objetivo recreacional y, al mismo tiempo, comercial. Al mismo
tiempo, surgieron las primeras escuelas serias y masificadas, para que los interesados y
sobretodo, dotados, pudieran aprender las técnicas necesarias como para convertirse en
verdaderos maestros de su oficio.
Entre las disciplinas consideradas actualmente como arte, están: la arquitectura, las
manualidades, la danza, la decoración, el diseño, el dibujo, la pintura, la moda, el cine,
la literatura, la música (con todos sus géneros y expresiones), la fotografía, la poesía, la
escultura y el teatro. La clasificación de todas las modalidades de esta actividad humana
en nuestros días es motivo de constantes debates, pero no podría ser menos para un tema
tan cautivante y elusivo como el arte.